GLOBAL VOICES

¿Qué tan correcto es decir “ciudadanas y ciudadanos”? La RAE emite una posición

22/12/2015 - 6:20 pm

La RAE salió, una vez más, al choque de una avanzada de género promovida desde hace años por muchos colectivos feministas, que elaboran guías sobre el sexismo en el lenguaje.

Todas-y-todos-CHICO

Ciudad de México, 22 de diciembre (Global Voices/SinEmbargo).– La Real Academia Española (RAE), máxima autoridad del idioma español, publicó recientemente su posición frente el uso lingüístico del femenino y masculino en términos como “todos y todas”, “trabajadores y trabajadoras” que cuando contiene personas de ambos sexos predomina el uso del masculino en el plural.

El sitio Clases de Periodismo resume el informe de la institución titulado “Sexismo lingüístico y visibilidad de la mujer” de la autoría de Ignacio Bosque, de la siguiente manera:

El informe de la RAE critica las nuevas guías sobre lenguaje no sexista elaboradas en España por universidades, sindicatos o gobiernos regionales, que proponen, por ejemplo, usar palabras como “la ciudadanía” en lugar de “los ciudadanos” o “el profesorado” en lugar de “los profesores” para hablar de grupos compuestos por hombres y mujeres”.

Tras criticar y resaltar la nula practicidad del “desdoblamiento” genérico -como el citado “todos y todas”- para evitar la supuesta caída en el sexismo, así como el uso indebido del símbolo “@” para superponer el uso femenino de la “a” y el masculino de la “o”, el lingüista descartó la viabilidad de las recomendaciones de las guías”.

Bosque, según el sitio, señala que “el uso genérico del masculino para designar los dos sexos está muy asentado en el sistema gramatical” español y que no tiene sentido “forzar las estructuras lingüísticas”.

Pero ¿a qué viene esta aclaratoria?

El portal uruguayo Montevideo expone en su nota Sobran las palabras, lo siguiente:

A la Real Academia Española (RAE) le llamó la atención el uso creciente de un latiguillo lingüístico en América latina: un artículo de la Constitución de Venezuela habla de “venezolanos y venezolanas”, la (ex) presidenta argentina Cristina Kirchner comienza siempre sus discursos dirigiéndose “a todos y a todas”. Por estos lados, el reelecto presidente Tabaré Vázquez y otras figuras políticas suelen iniciar sus alocuciones con un “uruguayas y uruguayos”.

La corriente “reformista” ya ha tenido varios ejemplos, además de los que brindan la Constitución venezolana y la (ex) presidenta Kirchner. El 15 de mayo del año pasado, la Puerta del Sol se vio desbordada por un movimiento de manifestantes que, para subrayar su conformación por mujeres indignadas y hombres indignados, se autodenominó “de l@s indignad@s”. Con el signo de arroba, para ser más inclusivos.

En este punto, el sitio Enfoque Jurídico recomienda “evitar el uso del signo @, ya que no es lingüístico y además es impronunciable.

Marcela Zeledón puntualiza en su artículo El uso del lenguaje inclusivo ¿Necesidad social? lo siguiente:

… el lenguaje incluyente, hace referencia a toda expresión verbal o escrita que utiliza preferentemente vocabulario neutro, o bien, hace evidente el masculino y el femenino. También evita generalizaciones del masculino para situaciones o actividades donde aparecen mujeres y hombres”.

Zeledón aclara que el punto no es agregar “os/as” a todas las palabras, sino más bien utilizar términos y conceptos neutros que incluyan y visibilicen a todos los grupos dentro de la sociedad. Un ejemplo, según la autora, sería “abandonar el uso del término hombre, ya que siempre fue utilizado como universal”. Para Zeledón, esta práctica invisibiliza la presencia de la infancia y de las mujeres. Lo adecuado para referirse a ambos géneros, sería entonces usar términos como “personas”, “ser humano”, “la humanidad” o “la especie humana”.

Sandra Russo escribió sobre el tema para Página 12 con la nota Sobre todos y todas. Allí menciona que el informe fue firmado por los 23 académicos de la RAE (que incluye solamente a tres mujeres):

La RAE salió, una vez más, al choque de una avanzada de género promovida desde hace años por muchos colectivos feministas, que elaboran guías sobre el sexismo en el lenguaje[…] Las feministas protestan porque el sustantivo masculino incluye al femenino, y eso ya no es un detalle, ni un modo decir lo correcto, ni es una enunciación justa. Las mujeres estamos gramaticalmente incluidas en los sustantivos masculinos (trabajadores, ciudadanos, amigos, invitados, etc.: todo eso, que es de género masculino, lleva al género femenino incorporado, justo como una costilla semántica). Pero no es la lengua la que determina la realidad, es al revés.

Y agrega:

Las lingüistas feministas sostienen que esa inclusión forzada de lo femenino en lo masculino es una forma de exclusión en la lengua. El estar contenidas e invisibilizadas en los sustantivos masculinos obliga a las mujeres a una pregunta que deben hacerse miles de veces en sus vidas: “¿Me están hablando a mí?”, mientras los varones jamás pasan por esa experiencia.”

Del mismo modo, Russo destacó que “los sectores que se van sintiendo incómodos con la lengua la van modificando, en un movimiento natural de precisión y especificidad”.

En Twitter, sin embargo, la tendencia fue apoyar la resolución de la RAE

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video

más leídas

más leídas