El biólogo marino José Ángel Sánchez, miembro de una cooperativa de pesca deportiva en Isla Cedros, una de las que forman la zona protegida, explicó a Efe que con vídeos y fotografías aéreas los pescadores confirmaron que los barcos de Pinsa están dentro de la reserva y muy cerca de la costa, lo cual afecta el lecho marino de la región.
Por Raúl Estrada
México, 31 julio (EFE).- Por lo menos 12 barcos atuneros de la empresa Pescados Industrializados (Pinsa) llevan cuatro días tendiendo sus redes dentro de la reserva de la biosfera Islas del Pacífico, frente a la costa occidental de la Península de Baja California, México, denuncian pescadores locales.
El biólogo marino José Ángel Sánchez, miembro de una cooperativa de pesca deportiva en Isla Cedros, una de las que forman la zona protegida, explicó a Efe que con vídeos y fotografías aéreas los pescadores confirmaron que los barcos de Pinsa están dentro de la reserva y muy cerca de la costa, lo cual afecta el lecho marino de la región.
Al conocer los hechos, los pescadores dieron aviso al director de la reserva, Mario Guerrero, quien al conversar con Efe confirmó que esta empresa, que comercializa las marcas Atún Dolores y Mazatún, entre otras, se está amparando “en un artículo transitorio en el decreto, que mantiene vigentes sus permisos para que crucen el área delimitada de la reserva, lo cual es poco ético pero legal”.
El tercer artículo transitorio del decreto presidencial del 7 de diciembre de 2016 que estableció el área protegida indica que los permisos otorgados previamente para la realización de actividades dentro de la zona de amortiguamiento de la reserva “continuarán surtiendo sus efectos hasta la conclusión de la vigencia” de los títulos correspondientes.
“Pinsa es una empresa que tiene su sello de socialmente responsable. En su página dice que pertenece a la Comisión Interamericana del Atún Tropical y a la Alianza del Pacífico por el Atún Sustentable, pero hacen malas prácticas dentro de una reserva recién creada simplemente porque la ley se lo permite”, denunció Guerrero.
Efe buscó a directivos de Pinsa; sin embargo, un vocero de la empresa señaló se está investigando lo ocurrido para tener una postura oficial.
Para Guerrero, la única forma de fortalecer la protección en la zona es lograr que los permisos a los barcos atuneros pierdan su vigencia, y que la autoridad responsable de hacerlo debe ser la Comisión Nacional de Pesca y Acuacultura (Conapesca).
El biólogo Sánchez explicó a Efe que, de acuerdo con las imágenes obtenidas, “Pinsa está usando redes de cerco que no dejan absolutamente nada a la comunidad porque atrapan indiscriminadamente otras muchas especies que no son valiosas y que después de la captura se tiran al mar”.
Agregó que, “como se sabe mundialmente, cada kilo de pescado que se captura a través de pesca deportiva arroja un beneficio económico entre 10 y 20 veces mayor que el que se captura por pesca industrial”.
Los pescadores locales denunciaron también que desde que llegaron los barcos hay presencia de aceite en el mar, que puede ser diésel derramado o aceite de pescado que es vertido de vuelta al agua.
La reserva Islas del Pacífico se localiza frente a la costa occidental de los estados de Baja California y Baja California Sur, tiene una extensión de un millón 161.222 hectáreas, que incluyen 21 islas y 97 islotes.
Cedros es la isla de mayor tamaño con 347 kilómetros cuadrados y cuenta con una población cercana a 3.000 personas que se dedican actualmente al turismo ecológico a la pesca artesanal y deportiva.
La comunidad de pescadores de la reserva está certificada para exportar especies comerciales a mercados asiáticos como Hong Kong y a Estados Unidos.
Cuando la cooperativa de pescadores propuso al Gobierno mexicano crear la reserva, el objetivo era proteger a las especies comerciales, como el jurel y el atún principalmente, así como el ambiente marino existente.