Ciudad de México, 7 de agosto (SinEmbargo).- En años recientes, la industria de las bebidas alcohólicas ha hecho grandes esfuerzos para encontrar nuevas bebidas con sabores diferentes a los que ya se encuentran en el mercado. Sin embargo, los intentos han tenido pobres resultados. No obstante, ahora un grupo de científicos han logrado crear un nuevo licor a partir de la destilación de los restos del café.
Un equipo de científicos de Portugal y Galicia, pertenecientes al Instituto de Biotecnología y Bioingeniería y del Centro de Ingeniería Biológica, incorporados a la Universidad de Minho en Braga, Portugal, fueron los responsables de que el café sea ahora el ingrediente a partir del cual se destile un nuevo tipo de licor de alta graduación, publicó ScienceMag.
Hasta ahora, los restos de café se utilizaban como fertilizante natural para las plantas, así como para otros fines ajenos a su naturaleza como tratamientos faciales e incluso como una especie de limpiador abrasivo para las tuberías del hogar entre otros usos variados.
Por otra parte, los coqueteos entre el café y el alcohol no son un asunto nuevo. En la actualidad existe toda una variedad de bebidas alcohólicas con sabor a este grano como el Kahlúa, así como algunas variedades del llamado licor de café.
La diferencia entre esta nueva bebida y las anteriormente mencionadas es que todas ellas estaban aromatizadas con la semilla de esta planta, no destiladas a partir de ella.
De esta manera, el proceso de este nuevo aguardiente es similar al de otras bebidas embriagantes como el whiskey o el ron, lo que convierten a esta nueva variedad en algo único y sin precedentes que seguramente se convertirá en parte del panteón de amantes del café.
El proceso consiste primordialmente en tres etapas, comenzando por la extracción de los componentes aromáticos mediante un tratamiento hidrotérmico que se aplica a los restos de esta semilla. De esta manera, lo que se hace es secar los posos de café y después se hierven a una temperatura de 163 grados centígrados durante 45 minutos.
Después de esto, para obtener este destilado, sigue la fermentación de este extracto una vez filtrado el líquido resultante de esta cocción. Finalmente, se complementa con sucrosa y etanol y se deja fermentar como si se tratara de cualquier otro licor.
Finalmente, el resultado de todo este proceso se traduce en un licor con una concentración alcohólica de 40 grados, que seguramente hará las delicias de los amantes de las bebidas fuertes.
Por su parte, un equipo de catadores evaluó la bebida y certificó que no sólo es apta para el consumo, sino que su sabor y aroma pueden ser mejorados mediante envejecimiento. Así mismo, los especialistas definieron el sabor de esta bebida con un intenso olor a café como amargo y ligeramente picante.
Sin embargo, para aquellos que buscan en esta bebida tanto los efectos del licor como las bondades de un café común y corriente, la mala noticia es que –debido a la destilación– esta pierde toda su cafeína en el proceso. No obstante, representa una novedad para los amantes de este sabor.
