Author image

Rubí Celia Ramírez Núñez

11/12/2022 - 12:02 am

Vivir el derecho a mirar

“Las imágenes del muralismo histórico, recuperaron mitos, leyendas, deidades, remanentes de lo divino, reconstruyeron esa ‘intimidad y sus vínculos con las regiones’ de una enorme acumulación de historicidad precolombina”.

@argeomontragon. (2022). Éxodo [Archivo]. Recuperada Recuperada de https://www.instagram.com/argeomondragon/
El fluir del tiempo-historia nos ha aproximado a la conclusión del primer siglo del muralismo. Hace exactamente un año, en el texto “Descolonizar la cultura, descolonizar la memoria” (diciembre, 2021) hablaba sobre el “desenmascaramiento de la cultura totalizadora” impulsado desde el Ateneo de la Juventud, organización que logró posicionar en cargos públicos de educación y cultura a personajes clave que lograron fisurar el obelisco positivista, dueño del “monopolio de la representación visual” después de la Revolución Mexicana. Este texto cobra un nuevo sentido a la hora de desdoblar más finamente la relevancia del movimiento muralista de 1920 que le plantó cara a las tradiciones eurocentristas al pintar con “autenticidad y originalidad” procesos y contextos sociales hasta entonces ocultos. (Ramírez Núñez, 2021).

A lo largo de este año, para mi fortuna tuve a bien compartir espacios de análisis con personas involucradas en la investigación que buscan construir nuevas miradas decoloniales en la plástica latinoamericana. La historiografía de los llamados “estudios del tiempo presente” ha ido cobrando importante significación en los últimos años, es una visión que interviene en diversos universos de disciplinas sociales y humanísticas para la reivindicación de la memoria. Parte de la investigación que realiza a la obra de diversos pintores, la Dra. Ana Bugnone (Universidad Nacional de la Plata) propone una mirada nueva que abra espacios a la discusión sobre “quienes somos, cuáles son nuestros condicionamientos coloniales – y patriarcales -, y que hacemos con ellos”. (Bugnone, 2022)

En esta tesitura de la complejidad del derecho a mirar, Bugnone sugiere una revisión a la conceptualización de visualidad y contravisualidad de Nicholas Mirzoeff (2016), ésta se entiende como una percepción física, pero además es una estructura compleja en la que se intercambia “información, la imaginación y la reflexión” para producir un “panorama tanto físico como psíquico”. El autor aborda a la visualidad como “práctica discursiva”, no para atribuirle el título de agencia, sino para ser entendida en tres grupos como “complejo de visualidad”: 1) la categorización de lo visual, o bien como lo describe Foucault (1970) “la nominación de lo visible”, nombres y definiciones principalmente; 2) la visualidad que separa a los grupos e impide su organización social y política; por último, 3) la “legitimación estética”, que es una estética de lo “apropiado”, que le atribuye status quo y hasta de lo hermoso y gratificante. (Mirzoeff, 2016, p. 34).

 

@argeomontragon. (2022). Libro de migrantes VIII [Archivo] Recuperada de https://www.instagram.com/argeomondragon/
Hay una “autoridad” visual que se ejerce sobre nosotros de forma extrínseca, la Dra. Bugone pone una alerta sobre esa hegemonía visual, hay una necesidad de ejercer la libertad de mirar y que reclama autonomía, no como un derecho humano o ley social, sino como un derecho que se ha negado, “suprimiendo creencias, lenguas y formas de organización familiar, económica y social”. […] El derecho a mirar es por tanto la reivindicación del derecho a lo real.” (Mirzoeff, 2016, p. 35).

La autoridad sobre lo visual genera su versión de lo “sensible” y ejerce presión en los espacios de dominación, “el arte es un campo de batalla” (Grüner, 2017 en Bugnone. 2021), se convierten en espacio en disputa de “lo negado”: “Las imágenes tienen la fuerza de construir una narrativa crítica que permiten cambiar los sentidos bloqueados y olvidados por la lengua oficial.” (Rivera Cusicanqui, 2015).

En el lado opuesto, la contravisualidad, revela la posibilidad de resignificación de la memoria, la mirada en retrospectiva no regresa como un montón de recuerdos precisos y exactos, sino nuestra individualidad reflexionando sobre las experiencias vividas. En la lectura de Mirzoeff (2016), la contravisualidad es un conflicto, porque se trata de dar coherencia a la “no realidad”, es algo “creado” que se oculta detrás de la visualidad. Las creencias y prácticas formadas por generaciones anteriores, nos son transmitidas con ciertos grados de autoridad: “[…] la educación tiene por objeto construir al ser social […]” (Durkheim, 1985, p. 26), así, las artes, la pintura, el muralismo tienen la virtud de contribuir a mostrar sistemas de creencias y religiones externas a los marcos hegemónicos.

Las imágenes del muralismo histórico, recuperaron mitos, leyendas, deidades, remanentes de lo divino, reconstruyeron esa “intimidad y sus vínculos con las regiones” de una enorme acumulación de historicidad precolombina. La Dra. Bugnone pone a prueba la técnica para entablar un diálogo con la historia de las imágenes, rastrea el entramado de las relaciones sociales, culturales, políticas y lingüísticas atemporales: imágenes del pasado, presente y el futuro que propone nuevas miradas.

La herencia que ha dictado el muralismo histórico en las nuevas generaciones es palpable, el dinamismo de los procesos sociales que se reflejan en el arte público del siglo XXI, atestigua un campo de batalla que propone “discutir en su propio terreno” la autoridad hegemónica de la visualidad, esa narrativa racista que divide, que nos expulsa de la estética arbitrada. Frente a la imposición, muchos de los nuevos espacios de diálogo y de creación de arte son proyectos decoloniales que se disponen para recuperar ecos ancestrales que nos fueron arrebatados. Las redes colaborativas y autogestivas que siguen creciendo para generar las distintas expresiones en el espacio público, reflejan una mixtura increíblemente heterogénea, generaciones que se entrecruzan, multiculturalidades que se reúnen y retratan la “pluricronomaticidad de los entornos”, durante un largo tiempo han sido mal vistos y perseguidos. Poco a poco han ido contracorriente para conquistar lugares y hacerlos menos inseguros, más libres del acoso en todas sus dimensiones.

El marco teórico que nos sirve para la investigación científica en el terreno de la plástica es fundamental y necesario, lo que éste escrito propone es mirar nuevamente con un tamiz doble o triplemente más sensible y crítico ante el aviso de lo homogéneo. Dos conceptos que hoy en día están muy de moda, “repensar” y “reinterpretar” no dejan de ser sumamente importantes para las ideas que ya he planteado, sin embargo, requieren de ese gran salto que deja por un momento esa esfera de lo seguro, de cuadratura, el arte se siente y se vibra igual que el universo mismo. Que todos ustedes tengan un buen fin de año.

 

Bibliografía

  • Bugnone, A. (8 de noviembre de 2022). Arte y exclusión en el arte contemporáneo [Discurso principal]. Sesión del Seminario Permanente de Historia Contemporánea y del Tiempo Presente, Instituto Mora, Ciudad de México.
  • Durkheim, E. (1985). Las reglas del método sociológico. México: Ediciones Quinto Sol.
  • Mirzoeff, N. (2016). El derecho a mirar. IC Revista científica de Información y Comunicación, 13, pp, 29-65. https://icjournal-ojs.org/index.php/IC-Journal/article/view/358/313
  • Rivera Cusicanqui, S. (2015). Sociología de la imagen. Miradas ch’xi desde la historia andina. Nociones Comunes: Buenos Aires.

 

Imagen

 

Rubí Celia Ramírez Núñez
Politóloga y Maestra en Gobierno y Asuntos Públicos por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la UNAM. Apoyo en la Coordinación de Investigación del Instituto Mora. Explora las líneas de investigación de espacio público, ciudadanía e instituciones de gobiernos locales. Sus publicaciones “El grafiti, un nuevo muralismo” y “Nuevos muralistas exhiben el coraje del personal de salud”, en la Revista Bicentenario, son resultado del acercamiento a los actores sociales contemporáneos en cultura a través de la historia oral.

Los contenidos, expresiones u opiniones vertidos en este espacio son responsabilidad única de los autores, por lo que SinEmbargo.mx no se hace responsable de los mismos.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video

más leídas

más leídas