El reclamo surge por los contratos ficticios que el futbolista brasileño firmó con el Barcelona como parte de su traspaso en el 2013, sin embargo se enfrentó a una serie de problemas legales y pagos que tuvo que realizar desde su bolsillo.
Ciudad de México, 29 de febrero (RT).- Neymar ha demandado por tercera vez al F.C. Barcelona. En esta oportunidad, reclama a su antiguo club 6.5 millones de euros (cerca de 7.1 millones de dólares) por “contingencias fiscales“.
Según un informe del diario español, El Mundo, el reclamo deriva de los contratos ficticios que el futbolista brasileño firmó con el club azulgrana como parte de su traspaso desde el Santos en el 2013. En contraprestación por aceptar la transferencia de sus derechos, Neymar recibió una millonaria suma, que se consideró su salario, y por la cual tuvo que afrontar una sanción de Hacienda y tributar como persona física desde su bolsillo.
Ahora, el delantero del Paris Saint-Germain (PSG) exige que ese dinero le sea reembolsado, aunque el Barça parece no tener tiene intención de abonarle esa cantidad ni de emprender una demanda en su contra. No obstante, esta situación podría alejar más al jugador de su regreso al Camp Nou la próxima temporada, ya que se hablaba de una posible renovación de contrato.
Con este alegato, ya son 38.6 millones de euros (unos 42.5 millones de dólares) los que el deportista le demanda al equipo catalán, recoge el diario deportivo AS.
En enero de 2018, el astro brasileño denunció a su ex equipo porque solo le pagó 14 millones de euros (unos 15 millones dólares) de los 40 pactados como prima por su renovación de contrato que firmó en el 2016. El club catalán, por su parte, afirmó que ese premio estaba vinculado a que el futbolista cumpliera el contrato íntegro hasta junio del 2021, lo que no cumplió al fichar por el PSG.
En diciembre de 2019, el futbolista le reclamó al Barcelona unos 3.5 millones de euros (3.9 millones de dólares) por el impago de su salario en su último mes en ese equipo y acusó a su directiva de actuar con “absoluta mala fe” y aplicar “represalias” contra él por haber fichado por el club parisino.
