Desde playas hasta montañas, Colima tiene una opción para disfrutar y relajarse o para vivir aventuras como practicar surf o senderismo.
Ciudad de México, 8 de marzo (SinEmbargo).- Colima es un estado muy bello, con muchas experiencias para ofrecer, pequeño en extensión pero grande en cultura, paisajes y gastronomía. Ya sea playas paradisíacas o montañas cubiertas de niebla, este rincón del Pacífico mexicano recibe a las viajeras que buscan descansar o realizar deportes extremos.
Manzanillo
¿En busca de mar? Manzanillo es una gran elección. Para relajarse bajo el sol o disfrutar de un masaje en la orilla del mar están playas como La Boquita y Playa Miramar. Además, en Las Hadas Resort se pueden tomar clases de yoga frente a la incomparable vista del océano o disfrutar de un spa con tratamientos inspirados en ingredientes locales.
Para las más aventureras, buceo y snorkel son grandes opciones para conocer las profundidades de Manzanillo. Quienes quieran emociones intensas, el paseo en banana en la hermosa Playa La Audiencia es imperdible. No hay que olvidar los deportes extremos, pues se pueden aprovechar las clases de surf disponibles en Playa Olas Altas. Para algo más relajado, Playa Miramar da la opción de patinar en el Pacífico Skatepark, un parque con una vista privilegiada al océano.
Comala
Si la idea es hacer un viaje de cultura y gastronomía, Comala es un imperdible. Conocido como "el Pueblo Blanco de América", sus calles empedradas y fachadas coloniales invitan a recorrerlo a pie mientras se disfruta del buen clima. En la plaza principal se puede degustar un exquisito café artesanal y probar una auténtica botana colimota en los portales. Además, se pueden realizar tours por las rutas del mezcal y del café.
Este destino es excelente para las mujeres que desean conectar con la naturaleza, ya que Comala ofrece diversas actividades. Se puede hacer senderismo en Suchitlán, a solo 15 minutos del centro de Comala, disfrutando de un entorno verde que recarga de energía o para quienes gustan de desafíos, el cañonismo en Zacualpan es impactante, con caminatas entre cañadas y arroyos.
Por otro lado, en la Barranca de Suchitlán, se puede poner a prueba el equilibrio en su puente colgante y luego ascender al mirador para disfrutar de una vista panorámica de los majestuosos volcanes de la región. Durante Semana Santa, las turistas pueden presenciar las celebraciones únicas que combinan ritos cristianos y prehispánicos con la tradicional danza de los morenos en la comunidad indígena de Suchitlán.
Armería y Cuyutlán: Bienestar y Naturaleza
Para conocer la tradición salinera hay que visitar este lugar. Si lo que se quiere es descubrir a fondo esta cultura, el tour por el Museo de la Sal ofrece una perspectiva histórica sobre una de las actividades más antiguas del estado.
Lo mejor de todo es que Cuyutlán cuenta con una zona extensa de restaurantes, tiendas de artesanías y servicios generales para turistas, brindando el mejor recibimiento a nacionales y extranjeros. Además, el Tortugario de reserva ecológica y el Estero Palo Verde ofrecen recorridos en lancha para admirar la biodiversidad local.
Para las que quieren la experiencia completa en el mundo de la producción de sal, la empresa Sal Real de Colima ofrece "La Ruta de la Sal", una experiencia única para explorar el proceso de obtención de este producto de manera sostenible. El recorrido está disponible de marzo a mayo, cuando el agua se evapora y los cristales de sal se forman.
