RADICALES ¬ Las vías para pacificar México se acortan. Más inteligencia, o más guerra

04/11/2025 - 5:00 pm

En esta edición de RADICALES, los periodistas Daniela Barragán, Álvaro Delgado y Héctor Alejandro Quintanar hablaron sobre el asesinato de Carlos Manzo y todo lo ocurrido tras este lamentable hecho que ha generado indignación en diversos sectores de la sociedad y que obliga a revisar las estrategias de seguridad que promueve el Gobierno de la Presidenta Claudia Sheinbaum para combatir el problema. ¿Qué hacer ante la violencia que se vive en México?

Ciudad de México, 4 de noviembre (SinEmbargo).- El asesinato del Alcalde de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo, volvió a encender el debate nacional sobre la estrategia de seguridad de la Presidenta Claudia Sheinbaum. Mientras sectores de la oposición insisten en revivir la “mano dura” y enfrentar de manera directa a los criminales, otros sectores advierten que regresar a la guerra contra el narcotráfico sería repetir un error que sumió a todo México en más de una década de violencia.

Esta mañana, durante la presentación de un plan de paz para Michoacán en respuesta a las críticas de la oposición que cuestionan la política de seguridad en México tras el asesinato de Carlos Manzo, la Presidenta Claudia Sheinbaum afirmó que el Gobierno federal no regresará jamás a la estrategia de la guerra contra el narco que implementó Felipe Calderón Hinojosa.

"Guerra quiere decir permiso para matar. Guerra quiere decir que están permitidas las ejecuciones extrajudiciales. ¿Qué quiere decir una ejecución extrajudicial? Que un elemento de una Fuerza Armada de México puede disparar contra una persona con el solo hecho de presumir que es un delincuente, no en defensa propia, sino teniendo la orden de ejecutar. Eso fue la guerra contra el narco: ejecuciones extrajudiciales. Y todavía se atrevían a decir que si había daños colaterales, es decir, personas que fallecían en ese proceso, pues era parte de la guerra y estaba justificada. Nosotros jamás vamos a tener esa estrategia. Jamás. Primero, porque somos humanistas y nosotros no creemos que la ejecución extrajudicial sea una salida. [...] Eso no lleva a nada porque eso es injusticia y no construye una sociedad humanista, y nosotros sí somos necios en construir una sociedad humanista y dentro de la Ley", dijo.

Al respecto, Héctor Alejandro Quintanar consideró que la reacción inmediata de ciertos sectores conservadores responde más a un intento de capitalizar políticamente la tragedia que a una preocupación genuina por la seguridad.

“Cierta reacción generalizada en las derechas, en la oposición comentocrática y partidista, es la de construir una especie de mártir; ya que no tienen liderazgos, buscan ahora abanderarse de un mártir”, explicó.

El académico advirtió que ese discurso es peligroso pues empuja hacia un escenario de recrudecimiento y “una petición de que se vuelva a la idea de la mano dura, del enfrentamiento físico visible”.

“Eso es lo más preocupante del asunto”, añadió, “porque hoy ya tenemos evidencia de sobra para pensar lo que ocurrió de 2006 a hoy”.

Quintanar recordó que la llamada guerra contra el narcotráfico iniciada por Felipe Calderón no fue un error táctico, sino una estrategia que terminó por debilitar al Estado.

“Lo que ocurrió en 2006 no fue solamente una guerra improvisada, sino entregar al país al narcotráfico, al crimen, y ocultar eso con una fachada uniformada de verde olivo”, señaló. El resultado fue un estallido de violencia “que creció en un 300 por ciento en un momento donde la violencia en el país iba a la baja”.

Desde otra perspectiva, el periodista Álvaro Delgado llamó a ampliar el análisis más allá del hecho violento en sí y revisar los modelos de seguridad en disputa.

“Este hecho deleznable nos coloca en la obligación de analizar no solamente dos estrategias para combatir la violencia en nuestro país, sino también identificar los dos proyectos de nación”, afirmó.
Recordó que la estrategia de guerra iniciada por Felipe Calderón y continuada por Enrique Peña Nieto “arroja resultados muy negativos”, mientras que la estrategia de paz impulsada por los gobiernos de la Cuarta Transformación debe medirse por su eficacia y sus resultados en territorio.
“La discusión debe ser cuál de las dos estrategias funciona realmente… si hay que atacar con guerra o combatir con inteligencia y atendiendo las causas”, planteó.

La Presidenta Claudia Sheinbaum reflexionó sobre el asesinato de Carlos Manzo, Alcalde de Uruapan, y reclamó a opositores que se comportaran como "buitres".
Carlos Alberto Manzo Rodríguez, Alcalde de Uruapan, Michoacán, fue asesinado el pasado sábado 1 de noviembre durante el Festival de Velas. Foto: Archivo / Pedro Anza / Cuartoscuro

Delgado enfatizó que los resultados de la estrategia de guerra impulsada por Calderón y continuada por Peña Nieto son medibles, así como lo es la política de pacificación emprendida por los gobiernos de la Cuarta Transformación.

“La discusión debe ser cuál de las dos estrategias funciona realmente, considerando que en México tenemos un problema serio de inseguridad y de violencia en muchas zonas del país”, apuntó.

El periodista recordó que en regiones como Michoacán, Sinaloa, Tamaulipas, Chiapas y el Estado de México existen zonas bajo el control de grupos criminales que operan como autoridades paralelas. En ese contexto, Delgado planteó una disyuntiva:

"¿Hay que atacar esas zonas que están en poder del crimen organizado con una estrategia de guerra? ¿O hay que combatirlas con inteligencia, atender las causas que las generan o cómo le hacemos? Yo lo que digo es que la estrategia de guerra que inició Felipe Calderón y continuó Peña Nieto arroja resultados muy negativos".

Por su parte, la periodista Daniela Barragán alertó sobre el riesgo de reciclar fórmulas fallidas con el nuevo Plan Michoacán anunciado por el gobierno federal.

“No es la primera vez que la solución para un problema en Michoacán se plantea con un plan especial. Con Peña Nieto se mandó a un comisionado presidencial, Alfredo Castillo, y fue un completo fiasco”, recordó.

Barragán, señaló que el reto actual para el Gobierno es demostrar que la estrategia federal “se va a hacer de manera distinta a lo que ya se ha hecho”.

Barragán consideró que, si bien el tema es grave, “mediáticamente se ha utilizado para restarle responsabilidad a los gobernadores de Morena”, y subrayó que la presidenta y los mandatarios estatales “deben asumir su papel”.

"Mucho se habla de lo que pueda hacer la Presidenta, pero creo que también es momento de que empiecen a salir las y los gobernadores de Morena. Creo que es momento que la Presidenta no solamente empiece a echar andar el plan Michoacán, no es novedoso, pero sí debe ser novedoso en cuanto a una implementación eficaz, pero también en empezar a hablar en las responsabilidades que tienen las y los gobernadores".

Daniela, Meme, Héctor y Álvaro

Daniela, Meme, Héctor y Álvaro

Lo dice el reportero