Carlos Velázquez escribe “El pericazo sarniento”

06/01/2018 - 12:00 am

Difícil leer este libro. O fácil según uno acepte que son muchos los escritores que toman cocaína, pero que nadie lo cuenta. Carlos Velázquez, uno de nuestros autores preferidos desde y sobretodo El karma de vivir al Norte, elige un ensayo más que personal para contar su relación con las drogas.

La editorial es Cal y Arena y cuando fui a verlo a Rafael Pérez Gay hablamos mucho de ese libro. De hecho, él hace el prólogo: “Carlos Velázquez ha logrado contar su paso por el infierno con una prosa dura, directa. La mente del adicto es un misterio y Velázquez emprende ese viaje al fondo de la noche y de él regresa con este poderoso libro de memorias”, dice.

Hay algo que uno debe hacer en un libro de memorias y eso es contar la verdad. Si uno empieza a dar vueltas y a adornar los recuerdos, ya no son memorias y ya no vale la pena leerlo.

Carlos escribe con una verdad absoluta y al mismo tiempo con una pluma de la que nunca se descuida. En este punto deberíamos decir: Vamos, querido, tú eres mucho más adicto a escribir bien que a cualquier sustancia prohibida. Lo cierto es que hay frases terribles y que son difíciles de olvidar.

“La taxicomanía del norteño es como la plaga. Arrasa con hectáreas en segundos”.

“El Pájaro se ahorcó, Marquitos se mató en un accidente, después de pasarse entrando y saliendo del Cereso y Juanito quedó tarado por tanta anfetamina. Pero nosotros no nos juntábamos con la misión de encontrar un cadáver, nuestro objetivo era encontrar la muerte. Algunos lo consiguieron”.

Carlos Velázquez presenta El pericazo sarniento. Foto: Cortesía Alejandro Ortega Neri

“Si Fowgill, ese monstruo que fue millonario, que tuvo yates, que estuvo preso y que para mí es el mejor narrador del idioma después de Borges, tuvo problemas de dinero toda su vida, como buen adicto a la coca, qué le puede esperar a un pobre postadicto como yo”.

“Los adictos también poseen sueños. El mío es quedar tablas con la coca. Mi corte de caja, a unos días de cumplir cuarenta años, es bastante decente. Nunca he sufrido una sobredosis. Jamás he caído en una clínica de rehabilitación. No me he prostituido por drogas. Ni me han arrestado por posesión de sustancias. Coca nada te debo, coca estamos en paz”.

Un libro para leerlo de un pasón, perdón, de una sentada y reflexionar mucho sobre el tema.

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
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