Obayashi se mantuvo obstinadamente fiel a su mensaje pacifista central a través de más de 40 películas y miles de programas de televisión, comerciales y otros videos.

TOKIO (AP) – Nobuhiko Obayashi, uno de los cineastas más prolíficos de Japón que dedicó sus obras a representar los horrores de la guerra y a cantar el poder eterno de las películas, murió. Tenía 82 años.

El sitio oficial de su última película, Labyrinth of Cinema, dijo que Obayashi murió el viernes por la noche.

Obayashi fue diagnosticado con cáncer terminal en 2016, y le dijeron que solo tenía unos pocos meses. Pero continuó trabajando, apareciendo frágil y, a menudo, en una silla de ruedas.

Se había programado el lanzamiento de “Labyrinth of Cinema” en Japón el día de su muerte. La fecha se ha retrasado debido a la pandemia de coronavirus, que ha cerrado los cines.

“El director Obayashi luchó contra su enfermedad hasta el día del lanzamiento programado de su película. Descanse en paz, director Obayashi, usted que amaba tanto las películas que seguía haciéndolas ”, decía el anuncio.

La película se exhibió en el Festival Internacional de Cine de Tokio el año pasado, que lo honró como un “mago cinematográfico” y proyectó varias de sus otras obras.

Obayashi se mantuvo obstinadamente fiel a su mensaje pacifista central a través de más de 40 películas y miles de programas de televisión, comerciales y otros videos.

Sus películas tienen imágenes caleidoscópicas de cuento de hadas que repiten sus motivos característicos de coloridos festivales japoneses, goteando sangre, marchando soldados con forma de muñecas, estrellas fugaces y sinuosas calles empedradas.

Labyrinth of Cinema es un homenaje a la realización de películas. Sus personajes principales, jóvenes japoneses que van a una vieja sala de cine, pero que cada vez más se ven envueltos en crisis, tienen nombres que emulan a los gigantes cinematográficos favoritos de Obayashi, Francois Truffaut, Mario Bava y Don Seigel.

“La señorita solitaria” de Obayashi, lanzada en 1985, fue filmada en la costa de Onomichi, el pintoresco pueblo de la prefectura de Hiroshima donde Obayashi creció e hizo clips de animación a mano.

Sus otras películas populares incluyen su House de 1977, una comedia de terror sobre jóvenes que deambulan en una casa embrujada, y Hanagatami, lanzada en 2017, otra versión de sus temas perennes de amor joven y las injusticias de la guerra que se desarrolla de forma iridiscente. matices

Obayashi fue un pionero en el mundo de los comerciales de televisión japoneses, contratando estrellas de cine extranjeras como Catherine Deneuve y Charles Bronson, destacadas en su ingenioso trabajo cinematográfico que parecía simbolizar la modernización de la posguerra de Japón.

Nació en 1938, y su infancia se superpuso con la Segunda Guerra Mundial, años recordados por la agresión y las atrocidades de Japón contra sus vecinos, pero también por un período durante el cual los japoneses sufrieron hambre, abusos y muertes masivas. Sus creencias pacifistas fueron reforzadas por su padre, un médico del ejército, quien también le regaló su primera cámara de 8 milímetros.

Sus obras carecen de las tramas llenas de acción de Hollywood y los finales bien cuidados. En cambio, parecen comenzar de la nada y terminar, luego comienzan de nuevo, entrando y saliendo de escenas, a menudo viajando en el tiempo.

Durante una entrevista de Associated Press en 2019, Obayashi enfatizó su creencia en el poder de las películas. Películas como la suya, dice, hacen esa pregunta importante: ¿Dónde estás parado?

“Las películas no son débiles”, dijo, ofendido ante tal idea. “Las películas expresan libertad”.

Dijo que estaba trabajando en otra película, aunque reconoció que estaba al tanto de las limitaciones de su salud, todo el trabajo tomó más tiempo.

Al final de la entrevista, dijo que quería demostrar su objetivo de por vida para su realización cinematográfica. Mostró su mano, tres dedos levantados en el lenguaje de señas de “Te amo”.

“Valoremos la libertad con todas nuestras fuerzas. No tengamos mentiras ”, dijo Obayashi.

Obayashi le sobreviven su esposa Kyoko Obayashi, actriz y productora de cine, y su hija Chigumi, actriz.

Se planeaba una ceremonia para llorar su muerte, según los medios japoneses, pero los detalles no estaban disponibles de inmediato. La ciudad de Tokio y el gobierno central han solicitado que se eviten las reuniones públicas debido a la pandemia.