Dallas, 14 Abr (Notimex).- La policía de Balch Springs, un suburbio del sureste de Dallas, informó hoy que la pastora de una iglesia fue arrestada por causar la muerte por inanición de un niño de dos años en un rito religioso, tras declararlo poseído por un demonio.
La muerte del menor, hijo de una inmigrante mexicana, no fue reportada a las autoridades y el cuerpo del niño fue trasladado por su madre a México para su sepultura.
El Departamento de Policía de Balch Springs inició una investigación de los hechos, luego que varios testigos reportaran que el niño fue privado de alimento y que se le mantuvo sólo con agua durante 25 días, hasta que murió el pasado 22 de marzo.
Mark Maret, teniente de la policía de Balch Springs, informó que Araceli Meza, de 49 años de edad, prelada de la Iglesia Internacional Jesús es el Rey, responsable del ritual, fue arrestada la víspera, acusada de infligir graves heridas corporales a un menor por omisión.
Maret informó que la investigación sigue y se espera que la policía detenga a más personas sospechosas de estar implicadas en los hechos.
La acusada y su esposo Daniel Meza fungían como pastores de la iglesia, a la que acuden en su mayoría inmigrantes mexicanos.
La mujer era vicepresidenta de la Iglesia, sostenía ser una profeta que podía comunicarse directamente con Dios, y operaba los ritos en una casa particular en Balch Springs, dijo Maret.
De acuerdo con las investigaciones, al fallecer el niño el asado 22 de marzo, Meza y otras tres personas presidieron una ceremonia religiosa para tratar de resucitarlo.
Un video obtenido por la estación de televisión de la cadena Telemundo en Dallas, proporcionado por una testigo, muestra la ceremonia.
La testigo identificó al niño como “Benjamín” y dijo que el infante y su madre habían vivido en la casa de Meza durante un año, y que la mujer “sentía que la pastora era Dios”.
La policía de Balch Springs determinó que el menor tenía nacionalidad estadunidense, y Maret dijo que la policía trabaja con autoridades mexicanas para tratar de ubicar a los padres en México y continuar las investigaciones.