El inicio del ciclo escolar suponía una prueba para el Gobierno federal, que no ha dejado de amenazar a los maestros faltistas con recortes salariales o incluso con el despido si insisten en cambiar las aulas por las calles y el trabajo por los bloqueos. Mientras los maestros de la CNTE reiteraron que no dejarán el paro de labores hasta que sus demandas sean atendidas. Incluso, en estado como Oaxaca, la Sección 22 anunció la reactivación de bloqueos.
Ciudad de México, 23 de agosto (SinEmbargo).- La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) cumplió, aunque sólo parcialmente, su amenaza de boicotear el inicio del ciclo escolar 2016-2017. El magisterio disidente logró mantener cerradas las puertas de 47 por ciento de los planteles en Oaxaca y del 42 por ciento de las escuelas en Chiapas, dos de sus estados más combativos.
Diferentes líderes de la CNTE aseguraron que sus acciones de boicot en contra del actual ciclo escolar continuarán hasta en tanto no se derogue la Reforma Educativa.
En Guerrero y Michoacán, otras dos entidades con fuerte presencia del magisterio en rebeldía, el bloqueo de escuelas fue menos efectivo.
En un comunicado de prensa, la Secretaria de Educación Pública (SEP) informó que en esas dos entidades abrieron y operaron, respectivamente, 99 y 97 por ciento de los planteles en el primer día de clases.
En la Ciudad de México, sólo 11 de más de 4 mil planteles no tuvieron clases.
En total, este lunes deberían regresar a clases 26 millones de alumnos de nivel básico y más de un millón 200 mil maestros asignados a un total de 226 mil escuelas en todo el país.
El inicio del ciclo escolar suponía una prueba para el Gobierno federal, que no ha dejado de amenazar a los maestros faltistas con recortes salariales o incluso con el despido si insisten en cambiar las aulas por las calles y el trabajo por los bloqueos.
Mientras los maestros marchaban y bloqueaban las puertas de cientos de escuelas, en abierto reto al Gobierno federal, el Presidente Enrique Peña Nieto se presentó en una escuela donde cursó parte de su primaria en Toluca para mandarles, por enésima vez, la advertencia de que no habrá diálogo entre la CNTE y su administración si no vuelven de inmediato, y todos, a los salones de clase.
“Primero la educación y luego el diálogo. El Gobierno de la República siempre mostrará disposición para hablar y atender distintas demandas. Lo único que no está sujeto o sujeta a negociación alguna es lo que la Reforma Educativa prevé. La Reforma Educativa es muy clara: tiene por objetivo central asegurar calidad en la educación”, dijo Peña Nieto.
“La niñez de nuestro país y nuestros jóvenes que tienen derecho a la educación no pueden ser rehenes de ninguna causa, de ninguna bandera y de ninguna gestión”, agregó. “Es obligación de los docentes impartir educación”.
La sección 22 de la CNTE, en respuesta a las declaraciones del Presidente, insistió en que sus miembros no regresarán a dar clases mientras la reforma educativa no sea cancelada.
“Ya no queremos que nos pregunten cuándo vamos a regresar a clases. La postura de la CNTE es clara: es continuar. La represión del Estado también es clara. Vamos a esperar esa represión”, declaró Isabel García Velasco, integrante de la comisión política de la sección 22.
En declaraciones a la prensa después de un mitin en Oaxaca capital, García Velasco añadió: “Si Enrique Peña Nieto tiene la voluntad política que hoy nos llamen”.
Diferentes líderes de la CNTE, por su parte, declararon a su organización en alerta máxima, particularmente en Chiapas, y responsabilizaron al Gobierno federal de cualquier provocación o agresión que sufran sus agremiados por parte de las fuerzas del orden durante protestas o movilizaciones realizadas por los maestros inconformes.
Durante la jornada de este lunes se registraron movilizaciones de maestros los cuatro estados mencionados donde tiene fuerte presencia. En Oaxaca, un total de 70 mil docentes se movilizaron.
Además, la CNTE anunció en esa entidad la reactivación de 37 bloqueos carreteros, mientras el Gobierno informó de un reforzamiento de la seguridad con el despliegue de agentes federales y municipales en todo el estado, uno de los más pobres del país.
En su intento por incrementar los efectos de su protesta, la CNTE anunció que recurrirá incluso a la formación de brigadas que “visitarán” a las es escuelas que si operen, sin aclarar qué harán si encuentran a profesores dando clase.
En tanto, la mayoría de los 1.3 millones de alumnos que estudian en 18 mil planteles en Chiapas no pudieron reanudar clases debido a que maestros de las secciones 7 y 40 de la CNTE se sumaron al paro.
En una marcha realizada en Tuxtla Gutiérrez, Pedro Gómez Bahamaca, secretario de conflictos de la Sección 7 del magisterio disidente, anunció que en esta nueva fase habrá “bloqueo a centrales hidroeléctricas, refinerías, carreteras y aeropuertos”.
Estas acciones, dijo, “se replicarán en otros estados” a fin de que se considere un proyecto alternativo de educación “que garantice los derechos labores de maestros” y responsabilice a todos los actores.
Los líderes magisteriales volvieron a acusar al Gobierno federal de simular un diálogo y de burlarse de los trabajadores y sus demandas.
La CNTE se declaró en paro desde el 15 de mayo, en protesta contra al Reforma Educativa que, entre otras cosas, estandariza la evaluación docente y abre la posibilidad de que los maestros pierdan sus plazas si no superan sus pruebas.
Los maestros insisten en que la evaluación sea eliminada de la ley y se mantengan ciertos privilegios de que han gozado desde hace años, como la contratación automática de estudiantes normalistas.
-Con información de EFE
