Ciudad de México, 24 de julio (SinEmbargo).– El pasado 22 de abril, cuando Jesús Reyna García, Gobernador interino de Michoacán, tomó protesta también se comprometió a superar las dificultades en materia de seguridad, empleo, educación, salud, vivienda y créditos.

Ese día y luego de que el Congreso estatal aprobara la primera licencia a al Gobernador Fausto Vallejo Figueroa para ausentarse del cargo para practicarse un trasplante de hígado, Reyna García afirmó: “En estos momentos de grandes retos, Michoacán exige de cada uno de nosotros generosidad y altitud en el compromiso, no hay ningún asunto o interés particular al superior interés de todos los michoacanos; no existe ninguna tarea más importante, que la de trabajar porque nuestro estado supere las dificultades”.

Hoy, casi 90 después desde esa toma de posesión, la violencia en el estado se ha incrementado de manera significativa. Las víctimas mortales que han dejado ataques en distintos puntos de la región se cuentan por decenas, 120 familias abandonaron sus comunidades por la inseguridad y ahora, incluso, elementos de la Policía Federal se han convertido en el blanco de grupos criminales que se han instalado en la región, principalmente en Tierra Caliente.

Tras una semana de enfrentamientos, ayer seis policías federales resultaron heridos en Lázaro Cárdenas, municipio donde el jueves pasado otros cuatro policías fueron emboscados. Horas antes de ese ataque, tres elementos de seguridad habían sido lesionados en Uruapan.

El lunes fallecieron cinco supuestos policías comunitarios cuando se manifestaban contra la inseguridad en Los Reyes. Sin embargo, de acuerdo con el Gobernador interino, los recientes hechos no ponen en entredicho la gobernabilidad del estado.

Reyna García dijo ayer que el comando que atacó a los manifestantes pertenecía a grupos de autodefensa de Buenavista. El Gobernador interino evitó dar a conocer mayor información, pero destacó que desde el titular de la Procuraduría de General de Justicia del Estado (PGJE), Plácido Torres, dirige la investigación en el lugar de los hechos,  para dar con los responsables del que calificó como “un lamentable acontecimiento”.

SEGOB: HAY AVANCES CONTRA EL CRIMEN

El estado de Michoacán vive días violentos justo cuando su Gobernador, el priista Fausto Vallejo Figueroa, recibió una nueva licencia por 180 días más; es decir, seis meses.

Pero para el titular de la Secretaría de Gobernación (Segob), Miguel Ángel Osorio Chong, la violencia surge en “respuesta al avance que han tenido el gobierno federal y estatal en contra del crimen”.

“Por supuesto es en respuesta a lo que ha venido avanzando el gobierno de la República y por supuesto el estado de Michoacán a favor de los ciudadanos, restablecer el orden, la paz y la seguridad”, dijo esta el encargado de la política interna del país en conferencia de prensa con la secretaria de Seguridad Interna de Estados Unidos, Janet Napolitano.

Osorio Chong lamentó el ataque a un grupo de personas que se manifestaban contra el cobro de cuotas y extorsiones de Los Caballeros Templarios y  dijo  “es un evento que rechazamos, que repudiamos y que, por supuesto, no nos va a hacer retroceder sino todo lo contrario, dar con quienes han realizado ese evento cobarde, a un grupo de ciudadanos reunidos en esa comunidad y que por supuesto que daremos con los responsables”.

Indicó que los operativos implementados en Michoacán por las fuerzas federales han arrojado resultados positivos, por lo que –dijo– seguirán adelante con la recuperación de la entidad.

“Vamos a seguir adelante y vamos a seguir encontrando los resultados que hasta ahora han sido muy favorables y que, por supuesto, los reforzaremos en los días subsecuentes y que sepa de una vez y por todas la seguridad que no habrá retroceso”, insistió Osorio Chong.

UNA SEMANA VIOLENTA

Ayer – por tercera vez en cinco días–, elementos de la Policía Federal fueron emboscados en el estado de Michoacán con un saldo preliminar de seis agentes heridos.

El ataque ocurrió sobre la carretera Carapan-Playa Azul, en el municipio de Lázaro Cárdenas, cuando un grupo de hombres que estaban apostados a un lado de la vía comenzaron a disparar contra los policías. Un día antes, se registró un hecho similar en el tramo carretero Caleta de Campos-Chuquiapan, del mismo municipio, donde tres agentes federales resultaron lesionados tras el embate de un grupo delincuencial.

El 18 de julio, cuatro elementos federales resultaron heridos debido a un enfrentamiento entre fuerzas castrenses y civiles armados en la Autopista Siglo 21 en el municipio de Lázaro Cárdenas. Dos días después, un comando atacó a elementos de la Policía Ministerial dejando dos heridos en el municipio de Uruapan.

El lunes también, un enfrentamiento entre presuntos miembros de policías comunitarias y un grupo armado dejó cinco muertos, según la Procuraduría General de Michoacán. La semana pasada elementos de la Policía Ministerial encontraron a seis personas ejecutadas en Catalina, Tomatlán. De acuerdo con los reportes oficiales, los cuerpos presentaban heridas de bala y huellas de tortura. Horas después, en la misma comunidad, fueron hallados cuatros hombres sin vida en la ranchería El Limón.

Ese mismo día, por lo menos 120 familias de tres localidades del municipio de San Miguel Totolapan, una localidad de Guerrero aledaña a Tomatlán, abandonaron sus comunidades a consecuencia de la inseguridad que se vive en la región Tierra Caliente.

La región de Tierra Caliente en Michoacán ha sido pieza clave en el levantamiento de poblados que se han levantado en armas para proteger a los miembros de sus comunidades.  En esa zona minada, los grupos de autodefensa se baten diariamente a balazos con Los Caballeros Templarios.