Ciudad de México, 26 de agosto (SinEmbargo).- Tanto buscar sangre en el cuello ajeno, que al final terminaron en matrimonio con gemelos incluidos. Los “vampiros” Anna Paquin y Stephen Moyer se conocieron mientras grababan la serie True Blood, se enamoraron, se casaron y siguen hasta donde podemos saber tan felices y juntitos.
Pasaron momentos difíciles, eso sí, sobre todo cuando la entrañable protagonista de El Piano, película de la neocelandesa Jane Campion que la convirtió en una de las actrices más jóvenes en ganar un Oscar, estaba embarazada y había que disimular el hecho ante las cámaras.
“Intentamos evitar que no se notara el mayor tiempo posible utilizando ropa muy creativa. Sin embargo, los dos últimos capítulos hubo que editar las imágenes digitalmente para eliminar la barriga”, dijo Anna en una entrevista a un medio estadounidense.
“Solamente grabé una escena de sexo durante el embarazo. Bill (el personaje que interpreta Moyer) tiene una fantasía con varios personajes de la serie y conmigo. ¡Fue una experiencia sexual con mi marido mientras estaba embarazada! Pero bueno, solamente grabamos de hombros para arriba, así que no llegó a ser extremadamente desagradable”, dijo Paquin.
Este matrimonio idílico no es lo único que nos dejó la serie True Blood. También pronto veremos a otra de sus protagonistas, la bella Deborah Ann Woll, protagonizando la nueva entrega televisiva de Daredevil para Netflix, según informó The Hollywood Reporter.
La actriz encarnará a Karen Page, la abogada de día y héroe anticrimen de noche, que además será el interés amoroso de Matt Murdock durante los 13 episodios del drama televisivo de Marvel.
La serie de Netflix marcará el estreno oficial del personaje de Page como protagonista, relegado a un segundo plano en la película de 2003.
Ellen Pompeo, de The Grey’s Anatomy, dio vida al personaje en la cinta de Mark Steven Johnson (Ghost Rider). Murdock, interpretado en el filme por Ben Affleck, será encarnado en esta ocasión por Charlie Cox, de Boardwalk Empire.
ADIÓS A LOS VAMPIROS
Todo este preámbulo ha sido en realidad para enfrentar la resaca ocasionada por el adiós que hemos dado este domingo a nuestros vampiros favoritos. Así es, la serie sensual, aterradora y exitosa de HBO dijo adiós este domingo 24 con el episodio “Thank you” y lo ha hecho por todo lo alto.
Desde ya, sus números son terroríficos, como corresponde al color de la trama. Se trata de la tercera serie más vista de HBO (tras Los Soprano y Game of Thrones ), cuya mezcla de horror y erotismo sedujo a más de 13 millones de televidentes en cada episodio.
La historia de Sookie Stackhouse (Anna Paquin), su triángulo amoroso con los seductores vampiros Bill Compton (Stephen Moyer) y Eric Northman (Alexander Skarsgård) y las complejas y misteriosas vidas de sus amigos – y enemigos – en el pueblo de Bon Temps, hicieron las delicias de los fans a lo largo de siete temporadas.
Desde la invención de la sangre sintética y los desafíos de la integración entre vampiro y humano, hasta el misterio del mundo de hadas y de todos los acontecimientos en Merlotte’s y en Fangtasia, True Blood fue una metáfora, cuando no parodia, de una vida en la que a menudo tememos de infectarnos con un virus fatal o que nos condene a perpetua la mismísima Autoridad Vampírica.
La cadena HBO informó que los vampiros de True Blood vivirán por siempre en HBO GO, donde todas las temporadas de la serie están disponibles.
Visita www.hbogola.com o descarga la aplicación para su dispositivo móvil con iOS o en Xbox 360, para suscriptores del paquete HBO/MAX con cable y satélite operadores participantes.
