Salvador Guerrero Chiprés

Derecho a disentir, sin violencia

"La gentrificación, por ejemplo, aunque ha expulsado a miles de personas de colonias icónicas, no se resolverá con vandalismo a negocios franquicia, estaciones de transporte o inmuebles públicos —como fue el caso del MUAC—, ni con lemas xenófobos."

Salvador Guerrero Chiprés

22/07/2025 - 12:03 am

Derecho a disentir, sin violencia
Un grupo de encapuchados realizó pintas y rompió vidrios durante la segunda marcha contra la gentrificación en la Ciudad de México. Foto: Edgar Negrete, Cuartoscuro.

La Ciudad de México ha sido históricamente refugio de disidencia y laboratorio de ciudadanía, espacio para la defensa de la libre manifestación, así como del rechazo enérgico a la violencia deslegitimadora de causas sociales.

En la defensa de una ciudad habitable, los ataques a instalaciones universitarias, en un desvío de la marcha del domingo contra la gentrificación, mueven a una convocatoria tanto política como social: manifestarse y dialogar pacíficamente.

Luego de la incursión en Ciudad Universitaria de quienes dicen integrar el Bloque Negro —estrategia de protesta con antecedentes en movimientos anarquistas de Europa y América Latina desde el siglo XX—, la pregunta ha sido ¿por qué la policía no actuó si estaba presente en la movilización?

El cuestionamiento lo retomó ayer la Jefa de Gobierno de la capital nacional, Clara Brugada, durante la entrega de becas a universitarias y universitarios para el transporte. La respuesta implica una garantía legal, política y simbólica interpretada como la prohibición de la entrada de fuerzas del orden sin autorización expresa del Rector o las autoridades universitarias. “Y lo vamos a respetar siempre de los siempres”, recordó la mandataria.

Principio vigente desde 1929 cuando se otorgó la autonomía a la UNAM y consolidado tras episodios trágicos como la represión al movimiento estudiantil de 1968, que reforzó la idea de la Universidad como un espacio libre de militarización o control policial, incluso si genera contradicciones prácticas en ciertos momentos. Las autoridades universitarias tienen pendiente fortalecer la seguridad interna, aunque no lo han hecho ni ante la ilegalidad registrada en el auditorio Che Guevara.

En la lógica de ciertas protestas radicalizadas, las únicas violencias existentes son las del Estado, el mercado y el patriarcado. Todo lo demás, incluidos los destrozos, es asumido como un contragolpe justificado. La rabia destructiva termina por afectar a los propios sectores que dice representar y lleva a evocar pasajes oscuros de la historia. "Los únicos que han quemado libros en la historia son los fascistas", recordó la Presidenta Claudia Sheinbaum.

La gentrificación, por ejemplo, aunque ha expulsado a miles de personas de colonias icónicas, no se resolverá con vandalismo a negocios franquicia, estaciones de transporte o inmuebles públicos —como fue el caso del MUAC—, ni con lemas xenófobos.

Son necesarias políticas claras y una interpretación pertinente de las propuestas. El Bando Uno emitido por Brugada plantea la regulación de rentas, cuyo aumento queda sujeto a no ser mayor porcentualmente a la inflación, aun cuando se ha malinterpretado como congelamiento, un esquema de los años 40.

Regular es garantizar el derecho a la vivienda sin violentar los de la propiedad. Un principio de inclusión observable en el programa de becas a estudiantes, que termina con el mito del mérito personal.

Una ciudad habitable defiende el derecho a disentir sin violentar.

Salvador Guerrero Chiprés

Salvador Guerrero Chiprés

Salvador Guerrero Chiprés es coordinador general del C5, ex presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México. Es doctor en Teoría Política por la Universidad de Essex, Inglaterra; maestro en Comunicación por la Universidad Iberoamericana y licenciado en Derecho y en Comunicación por la UNAM. Fue asesor de la Secretaría de Seguridad Pública del entonces Distrito Federal y de la Comisión Nacional de Seguridad, y Comisionado Ciudadano de Transparencia en el InfoDF.

Lo dice el reportero