Salvini, evitó las investigaciones previas resultantes de otras crisis de migrantes cuando el Senado rehusó quitarle la inmunidad, tuiteó que lo tiene sin cuidado la perspectiva de enfrentar cargos penales.
Por Colleen Barry y Aritz Parra
MILÁN, 20 de agosto (AP).– Un Fiscal italiano ordenó el martes la detención de un barco de asistencia humanitaria y el desalojo inmediato de más de 80 migrantes que continúan a bordo para poner fin a un drama en el que 15 personas saltaron por la borda en su intento desesperado por escapar de las condiciones en la nave, mientras que España envió un buque naval para tratar de solucionar la crisis.
El Fiscal siciliano, Luigi Patronaggio, dispuso la detención del Open Arms, anclado frente a la isla de Lampedusa, en el extremo sur de Italia, después de que subiera al barco humanitario español y se entrevistara con las autoridades portuarias como parte de una pesquisa para la posible presentación de cargos de secuestro resultantes de la negativa del ministro del Interior Matteo Salvini a permitir a los migrantes descender del barco español, según la agencia noticiosa ANSA.
Se desconocía por el momento cuando comenzarán a bajar de la nave.
Salvini se negó a abrir los puertos italianos, incluso después de que seis países anunciaran su disposición a recibir a los migrantes y a pesar de una fisura en la frágil coalición del gobierno italiano.
Salvini, que evitó las investigaciones previas resultantes de otras crisis de migrantes cuando el Senado rehusó quitarle la inmunidad, tuiteó que lo tiene sin cuidado la perspectiva de enfrentar cargos penales.
“No tengo miedo, estoy orgulloso de defender las fronteras y seguridad de mi país”, escribió el Ministro.
Horas antes, el Gobierno Español envió un buque de la Armada para escoltar al Open Arms hacia un puerto español después de que al menos 15 de los migrantes saltaran hacia el mar cuando alcanzaron a divisar Lampedusa, en su desesperación por huir del hacinamiento y las condiciones en el barco 19 días después de que los rescataran frente a Libia. Quienes saltaron por la borda fueron después recogidos por buques italianos.
