Mark Carney, líder del Partido Liberal, obtuvo la victoria en la elección celebrada hoy en Canadá, por lo que se mantendrá como Primer Ministro del país.
Ciudad de México, 28 de abril (SinEmbargo).- Mark Carney, líder del Partido Liberal y actual Primer Ministro de Canadá, ha sido proyectado como el ganador de las elecciones federales canadienses celebradas hoy, según los resultados preliminares.
En un proceso electoral marcado por tensiones con Estados Unidos y las amenazas económicas de Donald Trump, Carney consolidó una sorprendente recuperación para los liberales, quienes hace meses parecían destinados a una derrota frente al Partido Conservador liderado por Pierre Poilievre.
De acuerdo con los datos preliminares dados a conocer por CBC News, la emisora nacional de Canadá, el Partido Liberal encabezado por Carney lidera la contienda con un 44.7 por ciento, mientras que el Partido Conservador se posiciona en segundo lugar con 40.6 por ciento de los votos.
En el sistema electoral canadiense, los ciudadanos no votan directamente para elegir a un Primer Ministro, sino para elegir a los miembros del Parlamento que representarán a sus circunscripciones en la Cámara de los Comunes. Estas elecciones suelen celebrarse cada cuatro años, aunque pueden convocarse antes.
El partido político que obtiene la mayoría de los escaños en la Cámara de los Comunes (o que logra formar una coalición con otros partidos para alcanzar la mayoría) es invitado a formar el Gobierno. Si un partido obtiene más de la mitad de los escaños (172), se dice que tiene una mayoría absoluta. Si no, puede formarse un Gobierno en minoría con el apoyo de otros partidos.
The polls are now closed.
For 37 days, in every corner of this country, our team worked to build a stronger Canada.
Thank you to everyone who put so much into this campaign. pic.twitter.com/1Xj0R1B094
— Mark Carney (@MarkJCarney) April 29, 2025
La votación de esta noche, dice el diario The Globe and Mail, representa un cambio notable respecto a hace apenas tres meses, cuando los conservadores populistas de Pierre Poilievre estaban a punto de ganar una gran mayoría debido en gran parte a la fatiga de los votantes con el gobierno minoritario de Justin Trudeau. Ante una revuelta partidaria, el Trudeau dio un paso al costado en enero y los liberales se apresuraron a abrazar a Carney, a quien el diario describe como "un tecnócrata afable y novato político con amplia experiencia económica en el manejo de la crisis mundial de 2008 y el Brexit en 2020".
El Globe and Mail también recuerda que el ascenso de Carney como líder liberal y las amenazas del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, sobre los aranceles y la insistencia de querer anexar a Canadá como el estado 51 de Estados Unidos llevaron a un resurgimiento liberal que se cernió sobre la campaña de 37 días, convirtiendo la contienda en una carrera de dos vías con los conservadores.
Ya con un nuevo mandato, "la tarea que tiene por delante el Sr. Carney es iniciar negociaciones inmediatas con la administración Trump para evitar una guerra comercial total, al tiempo que convoca al Parlamento para aprobar un nuevo presupuesto y una legislación para derribar las barreras comerciales interprovinciales y volverse económicamente menos dependiente de los Estados Unidos", planteó el influyente diario canadiense.
Carney, exgobernador del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra, asumió el liderazgo del Partido Liberal en marzo tras la renuncia de Justin Trudeau. Su campaña se centró en responder a las tarifas comerciales impuestas por Trump y sus amenazas de anexión, prometiendo una economía resiliente y una postura firme en defensa de la soberanía canadiense.
Las encuestas finales mostraban una ventaja ajustada para los liberales, con un 41 por ciento de apoyo frente al 39 por ciento de los conservadores. La proyección preliminar de CBC indica que Carney no sólo aseguró su distrito electoral, sino que liderará al Partido Liberal a un cuarto mandato consecutivo, un hito poco común en la historia política canadiense.
El contexto electoral estuvo dominado por las acciones de Trump, quien impuso aranceles del 25 por ciento a productos canadienses y sugirió que Canadá podría convertirse en el “estado 51” de EU. Estas provocaciones avivaron un sentimiento nacionalista que favoreció a Carney, percibido como el líder más capaz para negociar con Washington.
En contraste, Poilievre enfrentó críticas por su retórica, que algunos compararon con la de Trump, lo que debilitó su posición.
De concretarse la victoria, Carney enfrentará desafíos significativos, como gestionar su relación con Estados Unidos, abordar el lento crecimiento económico de Canadá y responder a las expectativas de los votantes sobre empleo y vivienda.
Con los resultados aún pendientes de confirmación oficial, la victoria de Carney marcaría un nuevo capítulo para Canadá, con un líder que promete estabilidad y determinación frente a las tormentas geopolíticas.
