El ahora ex Director General Jurídico y de Gobierno, Pedro Pablo de n presentó su renuncia oficial en lo que termina el proceso de investigación en que se busca saber de dónde obtuvo los 600 mil pesos con los que lo encontraron la semana pasada en Polanco.
Ciudad de México, 21 de septiembre (SinEmbargo).- El día de hoy, Pedro Pablo de Antuñano presentó formalmente su renuncia al Jefe delegacional de Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, quien autorizó su salida.
De Antuñano se desempeñaba como Director General Jurídico y de Gobierno, sin embargo decidió renunciar a su cargo para que se llevara a cabo una investigación en su contra, luego de que se le encontrara en la colonia Polanco con 600 mil pesos en una caja de cartón.
En el documento entregado por Pedro Pablo de Antuñano, se puede leer: “Comunico a usted que a partir de esta fecha y por así convenir a mis intereses, doy por terminada voluntariamente la relación de trabajo y por virtud de la cual venía prestando mis servicios en el puesto de confianza de director General Jurídico y de Gobierno”.
El ahora ex funcionario previamente adviritió en conferencia una conferencia de prensa que su renuncia sólo sería provicional, hasta que se aclare que el dinero que llevaba es parte de las donaciones de particulares para la cración de documentales de una productora audiovisual, donde colabora, de nombre Zumba producciones.
“Nosotros explicamos el origen de ese recurso y se nos permitió la salida. Después, casualmente, alguien habrá dado la orden para que nos interceptaran tres cuadras adelante y se nos indicara que teníamos que volver a acreditar el origen del recurso. Yo entendí que alguien le quería dar un uso político a un asunto particular”, señaló el funcionario.
Las autoridades de la Ciudad de México iinvestigan a de Antuñano por el delito de uso de recursos de procedencia ilícita, el cual, de acuerdo con el Nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio, no amerita prisión preventiva.
Fuentes de la Procuraduría General de Justicia capitalina (PGJDF) señalaron que el dinero que poseía De Antuñano fue resguardado por la Fiscalía Central de Investigación de los Delitos Cometidos por Servidores Públicos.
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