#PosMeSalto: la lucidez de las multitudes conectadas

27/01/2014 - 12:00 am

Por César Alan Ruiz Galicia y Alberto Escorcia.

Este es el examen de nuestra sorpresa. Estamos viviendo algo insólito, que aunque inmediato, no termina de cuajar en nuestras mentes. Se trata de una energía colectiva que se ha desapegado de nuestras categorías usuales. Vale dejar abierta la discusión sobre si son movimientos o movilizaciones, olas sociales, climas de participación, superficies de inscripción o simplemente convocatorias geniales. Pero ahí están sus resultados: gente que en distintas geografías sale a la calle sin la orden de un centro de mando y sin haberse visto nunca, para actuar en conjunto como una concertada coreografía.

La intención de este texto es marcar dos grandes pautas respecto a otras valiosas reflexiones que se han hecho sobre los nuevos movimientos sociales. Primero, para oponemos por principio a la lógica de los cisnes negros, que se manifiestan como la tendencia al ajuste de nuestras discusiones teóricas favoritas a priori a la realidad. Por el contrario, este enfoque nace en y de las prácticas que ejecutan los movimientos emergentes. En segundo lugar, aquí procuramos apoyamos en datos concretos -a partir de análisis de Big Data- y no solo en intuiciones brillantes.

Solo resta decir que la mayoría de estas ideas no se le ocurrieron a quien escribe, sino que son una especie de curaduría sobre muchos textos, videos, documentales, mapas, herramientas de análisis y materiales que están siendo producidos por una corriente internacional de agitación tecnopolítica, animada por much@s interesad@s en desarrollar nuevas metodologías y formas de organización social. Al final del texto dejo algunos links para quien se interese en profundizar y darle seguimiento a este enfoque.

En los tres últimos años se ha perfilado en México y el mundo un fenómeno que tardó cerca de dos décadas en madurar. Se trata de la emergencia de lo que llamaré aquí movilización en red. Existen antecedentes concretos en nuestro país: desde el EZLN –diría Castells que es “el primer movimiento guerrillero de la era de la información”- pasando por l@s Anonymus, #InternetNecesario y #VotoNulo, llegando a #YoSoy132 y #PosMeSalto, donde se ha tejido un correlato a las formas de resistencia tradicional, utilizando para la movilización las nuevas herramientas tecnológicas de manera táctica y estratégica. Es el caso de las grandes convocatorias de Túnez y Libia, el 15M en España o Passe Livre en Brasil. Estos son algunos de los principios que redefinen la dinámica de lo que ocurre:

Coordinación: Es colectiva, sin la organización de una “mente maestra”.

Convocatorias: Masivas, no personales. Quienes redundan un llamado -con un RT, un mensaje de texto o de boca en boca- son los que realmente congregan.

Dirección: Distribuida, no concentrada.

Espacio público: Anfibio, por la hibridación entre la realidad física y digital, que provoca su crecimiento y complejización.

Emociones: Son el agente activador, por encima de un plan o ideología. Las personas se reúnen inicialmente por lo que rechazan, para luego conformar lo que desean.

Estrategia: Acción Tecnopolítica. Es la centralidad de las nuevas tecnologías en el desarrollo de  convocatorias y movilizaciones.

Flujos: Bidireccionales. Se pasa de lo “frío” de una relación virtual a lo “caliente” de la calle y viceversa, así como de las relaciones “fuertes” de nuestra familia y amigos, a las relaciones “débiles” entre los miembros de una multitud, en ida y vuelta.

-Horizontalidad: No existe una estructura jerárquica ni cadenas de mando.

Liderazgo: Temporal, disgregado y compartido.

-Proceso: Es evolutivo y de carácter colectivo.

Representación: Desintermediada. Cuando estamos presentes, no necesitamos ser re-presentados.

Sincronización: De acciones, en distintas capas sociales, nivelando biorritmos.

Además de estos cambios, sugieren los hechos una implícita filosofía de la acción colectiva, que se ha ido desarrollando a veces a contracorriente de las fórmulas que se consagran en los grandes centros de especulación. Empieza por la aceptación de que más que un actor, las movilizaciones en red son una forma de actuar que rememora ese espíritu que servía de  fuente de inspiración a los pintores adheridos a De Stijl: “¡Abajo las fronteras, arriba la retícula!.

Una movilización en red no es algo “espontáneo” sino el punto de quiebre de una pequeña historia: la de una malla de relaciones de confianza y de discusiones políticas entre las personas que conforman un círculo. Así las cosas, la conectividad -física o digital- precede a la formación de una colectividad. Esto es clave: una parte del tejido social se ha podido reconstruir por la interacción de sus redes sociales.

Gestación: el 29 de julio de 2013, Joel Ortega, Director del SCT Metro, informó que se realizaba un diagnóstico para proponer un incremento a la tarifa de tres pesos por pasaje. El 30 de julio apareció la primer manifestación en Twitter contra el incremento: se trata del Hashtag #NoAlAumentoDelMetro.

https://twitter.com/angiealy/status/362403920351473665

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Analizando los datos, es el 31 de Julio de 2013 que aparece el primer Meme que se opone al incremento. https://twitter.com/TiasPerruchis/status/362638225858244608

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En el periodo que va de julio a diciembre se impulsaron por al menos tres ideas-fuerza convertidas en tendencias de Twitter y etiquetas en Facebook: #NoAlAumentoDelMetro, #MetroPopular y #PosMeSalto. Esta última prenden a partir de un Meme propuesto por el usuario @Stardrill el 28 de noviembre:

https://twitter.com/stardrill/status/406113297264824320

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El Meme alude a #PosMeMato, que es una imagen donde una niña salta desde un sillón -en vuelo despreocupado- y que en esos momento era uno de los temas más populares por los chistes generados.

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Al consumarse el aumento -se anunció el 6 de diciembre- y con un backgronud de meses, prende la idea de recurrir a la desobediencia civil como una forma de protesta. Al mismo tiempo, mediante la consigna “Metro Popular”, es convocada para el 7 de diciembre la Primer Asamblea de Usuarios del Metro: https://twitter.com/NuevaRepublica/status/409183411467608065

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#PosMeSalto es así el colofón de un tejido que se articuló durante meses desde diversos nodos. Es crucial visualizar el proceso para entender que una movilización en red no surge ex nihilo, sino que es un planteamiento que va mutando, recombinándose y evolucionando mediante la inteligencia colectiva para llegar a ser.

Fue con apenas veinte horas de diferencia que se realizaron los primeros saltos y liberaciones de torniquetes; se eligió, sin un plan, la estación Bellas Artes como punto de reunión. El primero salto se realizó al terminar la Asamblea de Usuarios del Metro, el 7 de diciembre, mientras el segundo ocurrió el día siguiente, a cargo del colectivo #UndergroundMX:

https://twitter.com/Miguel_Tresmas/status/409746042410643456

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A continuación se puede apreciar una visualización con más de 70 mil Twitts procesados que muestran  la mutación de ‪#‎NoAlAumentoAlMetro a ‪#‎PosMeSalto, pasando por ‪#‎MetroPopular y ‪#‎SaltoXMexico con sus derivados, que fueron al rededor de 10 hashtags. Vale la pena reparar en el increíble volumen y velocidad del intercambio de información entre usuarios.

La imagen se puede ver en alta resolución en: http://yosoyred.com/genesis-posmesalto/

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Los nodos articuladores más participativos fueron: @julioastillero, @JohnMAckerman y @claudianpiego, que sirvieron de puente entre las 3 comunidades más grandes. Para #MetroPopular y #PosMeSalto los puentes fueron @anonopshispano y @epigmenioibarra, como también @SubVersionesACC y @masde131. Para ‪#‎NoAlAumentodelMetro fueron @radioamlo @dontriana y @LICSANCHEZ. Hay curiosos intercambios y centralidades, sobre todo en el Hashtag #SaltoXlaPatria, que por un par de días fue un intento de las cuentas grandes de cambiarle el nombre a #PosMeSalto. Al final, la comunidad optó por esta etiqueta, como una decisión sincronizada.

***

Es un hecho que las movilizaciones en red causan dolores de cabeza a los sacerdotes del status quo: los gobiernos optan por la represión general porque no hay un particular al que puedan comprar o castigar. Los medios oficialistas, desconcertados, construyen supuestos liderazgos con furor, urgidos por la angustia de volver al terreno conocido de los “fósiles” estudiantiles o de la conspiración de las izquierdas. Los poderes fácticos, fanfarroneando para velar su inquietud, se valen de lobbys para legislar la libertad en internet y controlar cada vez más las movilizaciones en red. El subtexto de su confusión es:

¿Cómo atrapamos a todas las gotas de lluvia? ¿Dónde poner puertas al campo? ¿Qué coacción emplear para neutralizar la agitada dinámica de tantas partículas libres?

Los límites de las movilizaciones en red se antojan evidentes: no todos tienen acceso a Internet, si bien lo que ahí pasa también se transmite de boca en boca. Por otra parte, es democrático el recelo a lo nuevo: muchos activistas radicales son conservadores tecnológicamente y en cuanto a su estrategia comunicativa, por lo que prefieren replegarse a los discursos y formas de organización habituales. Incluso dando otro giro de tuerca, palpita el vértigo de la activación sin propósito: en ausencia de unidad ideológica y extrañando la consistencia de la estructura, se acumularían acciones que se consumen en su propia ejecución y que no trascienden. Serían solo pequeñas explosiones a las que autoridades y ciudadanos terminaremos por acostumbrarnos con el tiempo.

Para relativizar ese punto de vista, sirve analizar con astucia la identidad entre forma y finalidad. Es el caso de las movilizaciones en red, que son en sí mismas un acontecimiento político relevante: en ellas, la forma es fondo. Por otra parte, su existencia tampoco significa necesariamente la bancarrota de modalidades jerárquicas, verticales y concentradas de organizarnos, que pudieran ser más eficientes en situaciones concretas. Siendo prudentes, podemos limitarnos a decir que las movilizaciones en red son una realidad tan consistente como aquellas convocatorias que siguen los esquemas tradicionales.

También es pertinente señalar que para cambiar las cosas, primero está la política, no solo las tecnologías. La Tecnopolítica como herramienta es condición necesaria, pero no suficiente de transformación social. Aceptado esto, vivirla es una cuestión de actitud: es un hecho que las condiciones existen para que explotemos las herramientas tecnológicas en beneficio de las causas de siempre. Puede ser ingenuo -por decir lo menos- sugerir que la movilización en red es la raíz cuadrada de todos los movimientos sociales, pero sin duda es la gran oportunidad de usar estratégicamente una lógica de acción colectiva que todavía no es manejable por los protocolos de contención convencionales.

Finalmente, este paradigma insinúa el secreto que se esconde en largos silencios sociales: aunque no estén siempre llenas las calles, hay continuidad en las luchas y sus miembros permanecen urdiendo aún en sus fases de repliegue. Mientras los grandes medios daban a #YoSoy132 por muerto, crecía otro bulbo que entrecruzaba esa red, sigilosamente, abriéndose paso mediante la interacción de sus nodos. Ahora mismo, mientras #PosMeSalto se mantiene en una dinámica de sístole y diástole, otras condiciones preparan una gran variedad de conjugaciones posibles para el surgimiento de algo nuevo.

Así las cosas, las movilizaciones en red no son una detallada conspiración, sino una gran co-inspiración. Si jugamos con la idea, son existencialistas: es previa la existencia a la esencia. La gente primero se congrega, luego sus integrantes definen que quieren ser y hacer. Esta clase de convocatorias entusiasman porque son un respiro para la libertad y la esperanza: tal vez lo único imposible es que lo posible tenga límites.

 @AlbertoEscorcia//@YoSoyRed

@CesarAlanRuiz

Créditos. Sampleamos, recuperamos y pensamos en colectivo. Vale agradecer a tantas personas de Política Viral, #YoSoy132, Democracia Real Ya, OWS, Passe Livre, y muchos otros, que han modelado las herramientas con que discutimos y que contribuyen a la conformación de este enfoque.

Algunos textos y sitios básicos:

Tecnopolítica: la potencia de las multitudes conectadas. El sistema red 15M, un nuevo paradigma de la      política distribuida

http://www.uoc.edu/ojs/index.php/in3-working-paper-series/article/view/1878/n13_toret

Tecnopolítica, Internet y R-evoluciones.

http://www.icariaeditorial.com/pdf_libros/Tecnopolitica,%20internet%20y%20r-evoluciones.pdf

Las insurgencias no tienen un plan, ellas son el plan: performativos políticos y mediadores evanescentes.

http://hemisphericinstitute.org/hemi/es/e-misferica-102/arditi

Las lecciones de 2011: tres tesis de organización.

http://www.elciudadano.cl/2013/04/02/58215/las-lecciones-del-2011-tres-tesis-sobre-organizacion/

#20Nmx un día para celebrar.

http://viaductosur.blogspot.mx/2013/11/29nmx-un-dia-para-celebrar.html

César Alan Ruiz Galicia
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