El multinivel de la corrupción

Ramiro Padilla Atondo

15/12/2014 - 12:02 am

A todos al menos una vez en la vida, nos han tocado a la puerta esos famosos amigos o conocidos que han entrado a un multinivel. Llegan con el rostro transformado, con una felicidad recién descubierta a ofrecerte una oportunidad que no podrás rechazar.

¡El negocio de tu vida! Te dicen, y se molestan cuando los miras con escepticismo. Luego se deshacen en explicaciones y te invitan a una de esas famosas pláticas, donde un embaucador más profesional intentará convencerte.

¡Es que este modelo de negocios es el futuro! Gritan entusiasmados, sin saber que el famoso multinivel ya tiene más de cuarenta años, o ¡cuando estrene auto deportivo te arrepentirás! Yo me he reído a carcajadas al escuchar semejantes afirmaciones.

Hacerse millonario por conseguir gente y vender productos. Suena super bien. Pero es mentira. Si los multiniveles han tenido bastante éxito en México, es porque vivimos la cultura del mínimo esfuerzo. Queremos mucha lana sin chingarle. Y México tiene un mercado amplísimo de incautos.

Pero por otro lado, hay un multinivel que sí te hace millonario. Un multinivel que tiene éxito garantizado. El multinivel de la política. Solo cambie usted los nombres de los niveles y aplíquelo.

En un multinivel usted empieza siendo plata (o algo así, los nombres los pondré yo en honor a la arbitrariedad) que sería el equivalente a regidor o director de alguna dependencia. Luego pasa usted a presidente municipal y se convierte usted de manera automática en oro. Sus ingresos por dar concesiones a sus cuates le dan ingresos de ejecutivo con membrete de oro. Luego viene diputado local o federal que vendría siendo zafiro. Puede tener ingresos un poco más altos que los de presidente municipal.

En este multinivel también se trata de conseguir gente. Entre más agremiados a su causa pensando que se podrán beneficiar mejor. Recuerde usted que el PRI ha sido el multinivel más exitoso en la historia de la humanidad. Roban y reparten.

Luego vendría esmeralda, para gobernadores y senadores. Se dice que en las gubernaturas está el verdadero dinero. Que si usted llega a gobernador tiene cien milloncitos de dólares garantizados. Y luego vendría la categoría reina. Diamante. Aunque aquí puede haber varios tipos de diamantes. Los secretarios de estado, ministros de la suprema corte, hasta el mismo presidente.

En esta categoría los ingresos son casi ilimitados. El cielo es el límite. Usted puede hasta asignarse la partida secreta, que para eso es secreta ¡carajo!

Puedo hacer más subdivisiones y categorías pero no viene al caso. Este es solo un panorama general de cómo trabaja este multinivel que nos tiene tan jodidos.

Al igual que el otro, estos multiniveles tienen en común la manipulación de la gente para beneficio de unos cuantos. Claro, rompen la rutina. Usted va a una reunión de gente que se mira súper feliz. Hasta traje se ponen y comparten pláticas de motivación, el ¡sí se puede! por todos lados. Lo malo es que no funcionan. Solo lo harán perder su tiempo y sus recursos. Mejor deje de vivir en el error, deje de vivir fuera del presupuesto y métase al que sí vale la pena. El del gobierno.

Allí la lana nunca se acaba. Aunque robar se ilegal.

Ramiro Padilla Atondo

Ramiro Padilla Atondo. Ensenadense. Autor de los libros de cuentos A tres pasos de la línea, traducido al inglés; Esperando la muerte y la novela Días de Agosto. En ensayo ha publicado La verdad fraccionada y Poder, sociedad e imagen. Colabora para para los suplementos culturales Palabra del Vigía, Identidad del Mexicano y las revistas Espiral y Volante, también para los portales Grado cero de Guerrero, Camaleón político, Sdp noticias, El cuervo de orange y el portal 4vientos.

Lo dice el reportero