Los amantes van y vienen por sus ojos entrecerrados: las rendijas del delirio y el sueño son caminos amplios de sus deseos.
Por Alberto Ruy-Sánchez.
Los amantes van y vienen por sus ojos entrecerrados: las rendijas del delirio y el sueño son caminos amplios de sus deseos.
Por Alberto Ruy-Sánchez.