CUÁNDO ME SIENTO SEXY Y CUÁNDO NO

Gabriela / En el punto G

19/07/2014 - 12:00 am

Me siento sexy los viernes a las 9 de la mañana y los sábados a las 10 de la noche. Cada vez que llueve en verano y cuando duermo la siesta en ropa interior.

Llámame psicótica, pero me siento sexy cada vez que consigo correr durante una hora entera y cuando como chocolate negro.

Mira tú que el chocolate con leche no me hace sentir nada sexy. Como ponerme medias, hay pocas cosas más ridículas que una mujer poniéndose unas medias; sin embargo, me encanta caminar con ellas después de quitarme los zapatos. Tampoco me siento sexy el primer minuto de desnudarme delante de alguien, pero luego… luego sí.

¿Dónde está esa delgada línea roja entre sentirse sexy y parecer una payasa?

Pienso que hay dos formas de sentirse sexy: una es arreglarte el pelo, maquillarte y ponerte una ropa que te favorece. Entonces te sientes sexy porque te VES sexy (y ya había hablado de esto antes). La otra es bañarte en el mar, el deporte o el sexo. Cuando no tienes ni idea de cómo te ves pero tu cuerpo está en tensión, se mueve con decisión y las sensaciones suben y bajan desde los pies hasta la cabeza sin control ni parada. Entonces te SIENTES Afrodita recién salida de la concha (¡marina!, argentinos, de una concha del mar!).

Puede que haya una tercera, que la dejo al final por la pasividad de la forma, y es que te hagan sentirte sexy cuando tú no te sientes así para nada. Como llegar a la casa medio muerto de cansancio y que te digan que estás para comerte. Eso anima más que un café. Es más, todos deberíamos “ser comidos” después de un mal día en el trabajo. Sí, el sexo oral hace a todo el mundo sentirse sexy.

No como los gorros de ducha.

Sentirse sexy es repartir confianza por todos lados y para ello es absolutamente fundamental no tener ni idea de los defectos que tenemos o de cómo lucimos. Es hacer las cosas sin darte cuenta, casi sin querer y sólo porque se sienten bien. Sentirse sexy es disfrutar de y dentro de tu propio cuerpo. ¿Saben esa escena de las películas cuando una chica regordeta y con gafas de pronto se desmelena y se convierte en una bestia sexual? Ése es el momento.

Según un estudio de una cadena de perfumerías inglesa (Superdrug) sólo un 7% de las mujeres se siente sexy SIEMPRE. Tampoco me parece tan mal, una también tiene que trabajar, hacer la compra y otras cosas. ¿Se imaginan ir por ahí como en un permanente anuncio de perfumes? Moviendo la cabeza todo el rato para que el pelo vuele al viento, sandalias altas, (por cierto, estoy deseando ver un anuncio con un abrigo de 5 kilos de los que me pongo yo en invierno) y recorriendo la ciudad sin destino. Qué cansancio.

No, sentirse sexy se deja para los momentos especiales, como las tormentas de verano y los días de siesta. El resto del tiempo puedes sentirte simplemente normal y vestir vaqueros. Como comer pizza, que no te hace sentir sexy pero te hace sentir bieeeen.

Gabriela / En el punto G

Lo dice el reportero