¿Hay PVEM para rato?

Salvador Camarena

26/06/2012 - 12:02 am

Suena bien la propuesta que circula, de no votar por ningún partido “rémora”. De optar en todo caso sólo por el PRI, si uno prefiere que el presidente sea Enrique Peña Nieto. O sólo por el PRD si uno apuesta a que es la hora de Andrés Manuel López Obrador. Y lo mismo para otros puestos donde tengan candidatos comunes partidos grandes y “rémoras”. Se trata de negarle los más votos posibles al partido Verde Ecologista de México, al del Trabajo y al Movimiento Ciudadano (hacer esto último en Jalisco sería una catástrofe para la única candidatura que reta al PRI en aquella entidad, pero esa es otra historia).

Sin pretender decir que uno es menos malo que el otro, u otro más cuestionable que los demás, dediquemos unas líneas a uno de estos partidos “rémora”, al Verde Ecologista de México.

A continuación dos adivinanzas, una regalada, otra no tanto: ¿A qué propuesta les recuerda el siguiente texto? ¿Y a qué año, o circunstancia, corresponde?:

“Farmacias El Fénix era la única empresa beneficiaria de las subrogaciones de los hospitales del sector salud, de salubridad, de ISSSTE, y del Seguro Social, y tenían una operación absolutamente reprobable, eran beneficiarios con un millonario convenio. El médico firmaba la receta, que era negada por el hospital o la clínica, y se daba la instrucción de que fueran a recogerlas a farmacias El Fénix. El Fénix recogía este documento del sector salud y daba a cambio un vale, porque nunca tenía la medicina, y aún teniéndola en el anaquel la negaba, pero ese vale que entregaba ya de farmacias El Fénix tenía una vida muy corta, de 24 a 48 horas, entonces ese vale vencía y el paciente perdía el derecho a reclamar la medicina, pero ellos ya tenían el documento en el sector salud que religiosamente era cobrado”.

Es obvio que el esquema es muy parecido, al menos en lo básico, a la propuesta del PVEM en esta campaña electoral que reza: “Si el gobierno no tiene la medicina, que te la pague”. ¿Pero de cuándo es el esquema enunciado líneas arriba? De tiempos de José López Portillo (por aquello de quienes hoy defienden a capa y espada que ya hemos cambiado y es imposible volver al pasado).

¿Y a qué viene el pasaje aquí reproducido? El periodista Esteban David Rodríguez ilustra con ese testimonio, entre otros, parte de los orígenes de Jorge González Torres, fundador del PVEM y, obvio otra vez, padre del actual presidente de ese partido Jorge Emilio González Martínez. El párrafo citado corresponde al capítulo "Cacicazgo reverdecido", del libro Caciques, Dinosaurios y Santones. Las castas políticas que oprimen a México (Grijalbo, 2006). Ahí David Rodríguez cuenta que “surgieron suspicacias sobre la posibilidad de que los dueños de la cadena de farmacias El Fénix se pudieran haber beneficiado del alto cargo que desempeñaba su pariente político, el doctor Martínez Manautou”.

Emilio Martínez Manautou, de larga carrera política y secretario de Salud durante buena parte del sexenio López Portillo, fue suegro de Jorge González Torres, descendiente del clan que fundó farmacias El Fénix.

Es solo una parte del contexto histórico de González Torres, personaje que en 1986 fundaría el PVEM. De ese año para acá sobran los ejemplos de la manera en que este partido ha sabido acomodarse con el candidato emergente, casi siempre ganador. Apoyaron a Cárdenas, a Fox y ahora a Peña Nieto. Y sobran también escándalos en torno al PVEM.

Por cierto, en su sitio oficial, el PVEM explica que ese organismo, “una modesta Organización de Colonos surgida en los pedregales de Coyoacán en 1979, Fué el Factor del cambio al final del siglo, después de 70 años de Gobernar al País un partido político”. (Se respetó la redacción original). Sin embargo, en la misma página web en la pestaña Historia no explican cómo es que ahora se han ligado precisamente a ese partido al que ayudaron a quitar. Pero eso es pecata minuta ante tantos otros temas no plenamente explicados por parte de "El Niño Verde" y amigos que le acompañan.

Y es que suena a consuelo tonto conformarse con la alegría que producen los abucheos que los clase medieros regalan a los anuncios del PVEM en las salas de cine. Si algo podría ser una buena noticia per se el próximo 2 de julio es que a partir de ese día, los González, y sus amigos, comiencen a buscarse la vida en otro lado, lejos ojalá por un buen tiempo de la política. Veremos.

Salvador Camarena

Es periodista y conductor de radio.

Lo dice el reportero