CLOSE UP ¬ Bernie, de 83 años, es la única resistencia organizada en EU contra Trump

29/03/2025 - 8:30 am

Hoy en día, a sus 83 años, Bernie Sanders parece ser el único resquicio organizado de la izquierda estadounidense para hacer frente a Donald Trump y a la oligarquía que lo ha acompañado en este primer tramo de su Gobierno.

Ciudad de México, 29 de marzo (SinEmbargo).- Bernie Sanders se ha convertido en la única resistencia organizada en Estados Unidos contra Donald Trump. El Senador independiente de Vermont ha asumido el liderazgo de la izquierda en la Unión Americana con una campaña en la que ha denunciado la oligarquía que acompaña al trumpismo en esta recta inicial de su mandato.

Sanders ha denunciado a lo largo de su extensa carrera política, y sobre todo desde su activismo que data de la década de 1960, el peligro que representa la concentración de riqueza en unas cuentas manos. Eso mismo lo ha acercado con los sindicatos locales y los sectores de trabajadores más desfavorecidos.

De hecho, Bernie se asume a sí mismo como “socialista”, como “socialdemócrata” en los hechos. Esta primera ha sido una etiqueta que no ha truncado su trayectoria. De hecho su primer triunfo en Vermont, cuando ganó una alcaldía lo hizo ya con esta distinción que no le impidió obtener el triunfo en un país gobernado por el conservadurismo y la derecha de la era de Ronald Reagan.

Desde ese primer paso, que algunos llaman la “revolución de Sanders”, el político nacido en Brooklyn, en Nueva York, hace 83 años, en el seno de una familia de inmigrantes judíos de Polonia. Sanders, el menor de dos hijos, creció en una familia de clase trabajadora con dificultades económicas. El propio Sanders reconoció desde el principio la desigualdad económica de Estados Unidos según declaró a The Guardian: “Vi injusticia. Esa fue mi principal inspiración política”. Y en efecto, esa ha sido su marca.

Hoy en día, a sus 83 años, Bernie Sanders parece ser el único resquicio organizado de la izquierda estadounidense para hacer frente a Donald Trump y a la oligarquía que lo ha acompañado en este primer tramo de su gobierno.
Bernie Sanders. Foto: Facebook Bernie Sanders

Un socialista de 83 años frente a Trump

Hoy en día, a sus 83 años, Bernie Sanders parece ser el único resquicio organizado de la izquierda estadounidense para hacer frente a Donald Trump y a la oligarquía que lo ha acompañado en este primer tramo de su gobierno.

Sanders, quien ha declinado está en medio de una gira que ha llamado “Stop the Oligarchy” movilizando a miles de personas en distritos clave controlados por republicanos y advirtiendo sobre los peligros del autoritarismo y la concentración de poder en manos de una élite multimillonaria.

En un video publicado en redes sociales, el Senador independiente de Vermont anunció el inicio de esta gira nacional y en la que centró sus críticas en Elon Musk, el hombre más rico del mundo que se ha asentado en la oficina oval, junto a Trump, con un discurso de extrema derecha.

"Creo que es un momento oportuno para plantear la pregunta que los medios de comunicación y la mayoría de los políticos parecen no plantearse: ¿Qué quieren realmente él y otros multimillonarios? ¿Cuál es su objetivo final?", declaró Sanders en el video. "Todo lo que podamos hacer es lo que debemos hacer. Huelga decir que tengo la intención de aportar mi granito de arena, tanto dentro de Washington DC como viajando por todo el país para defender a las familias trabajadoras y enfrentar a la oligarquía".

Sanders ha apadrinado en esta gira a la congresista por Nueva York Alexandria Ocasio-Cortez, de 35 años. Ambos tratan de movilizar a las bases demócratas, aún inmersas en el descalabró sufrido en noviembre pasado frente a un empoderado y virulento Donald Trump, que venció cómodamente a Kamla Harris.

Los demócratas han sido cuestionados por haber abanderado a una clase trabajadora, a la cual Sanders ha acompañado a lo largo de sus décadas de lucha en Vermont y Washington.

En solo cinco eventos, dijo Sanders, más de 86 mil personas se le unieronpara hacer frente al autoritarismo y la oligarquía y detener cualquier proyecto de ley que recorte Medicaid para dar a los multimillonarios aún más exenciones fiscales”. Sanders protagonizó mítines multitudinarios en Las Vegas (Nevada), Greely y Denver (Colorado), y Tempe y Tucson (Arizona).

Son actos en los que no ha recurrido a grandes escenografías. Ha sido captado detrás de un atril o en la parte trasera de una camioneta, gritando por un megáfono. Lo clave en estos eventos ha sido un llamado a no permitir que EU se dirija a una oligarquía ni a un autoritarismo con Trump al frente. “Estamos preparados para luchar. Y vamos a ganar”.

Lo cierto es que a sus 83 años, Sanders ha dicho que no se postulará de nuevo a la presidencia, aunque se ha convertido en un líder de la resistencia a la segunda presidencia de Donald Trump.

Kurt Hackbarth destacó como Bernie Sanders está haciendo mancuerno equipo con la diputada de Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez, y expusó que lo que está alertando del gobierno de Donald Trump es algo que siempre ha denunciado Sanders a lo largo de su carrera y puntualizó que lo ha hecho es lo que deberían de estar haciendo los demócratas.

"Justo ahora Bernie Sanders está haciendo mancuerna, con la Diputada de Nueva York, Alexandria Ocasio-Cortez y ellos están haciendo recorridos por el país para alertar sobre lo que está haciendo el Gobierno de Donald Trump, pero también para alertar sobre algo que Bernie Sanders ha denunciado toda su carrera que es la oligarquía creciente en Estados Unidos. Justo el nombre de este recorrido se llama Fight Oligarchy".

El escritor mencionó que Sanders siempre ha hablado de la necesidad de terminar con el partido bipartidista en Estados Unidos, pues tanto demócratas como republicanos se han vuelto muy similares.

"No es casual que Bernie Sanders siempre ha hablado de las restricciones del sistema bipartidista en Estados Unidos, que los republicanos y los demócratas, pues son dos partidos demasiado cercanos ideológicamente y cada vez más y ambos partidos representan a sus grandes donadores en un sistema donde las elecciones más o menos se compran, casi directamente a través de los donativos de gente con dinero o estos comités de acción política, PACS se llaman. Entonces, lo que está haciendo Sanders aquí no es nada nuevo".

Hackbarth destacó la importancia de la labor de Sanders, pues dijo, el Senador está haciendo lo que el partido demócrata debería.

"Sanders está haciendo lo que el Partido Demócrata debería estar haciendo y no está haciendo que es oponerse a lo que está haciendo Trump, no solamente hablando con los suyos, sino viajando a distritos donde ganaron los republicanos, los llamados distritos rojos, los rojos son este los distritos conservadores ahí y pues han atraído a muchos de nombres muy grandes que evocan sus dos candidaturas presidenciales en 2016 y en 2020".

La revolución de Bernie Sanders

Muchos se hubieran dado por vencidos luego de haber perdido cuatro contiendas electorales: dos para el Senado y dos para ser Gobernador. Paradójicamente estas cuatro derrotas solo fueron el inicio de la revolución que emprendió Bernie Sanders en Vermont, estado del cual aún es Senador y en donde cosechó su primer triunfo como Alcalde con un discurso de izquierda en una era donde la derecha reinó de la mano de Ronald Reagan.

Su triunfo no fue menor.

Vermont es uno de los estados más pequeños de Estados Unidos, con fronteras con Canadá, Nueva Inglaterra y Nueva York, en donde nació Sanders el 8 de septiembre de 1941. Y durante bastantes décadas siempre fue un reducto del conservadurismo.

Branko Marcetic escribe en la revista Jacobin que en el período de 132 años que abarca de 1856 a 1988 Vermont sólo votó por un demócrata para presidente en una sola ocasión, el presidente Lyndon Johnson en 1964. De hecho, señala, cuando Roosevelt se postuló por primera vez a la reelección en 1936, fue uno de los dos únicos estados que votaron en su contra. Ni siquiera había incluido a un demócrata en el Senado hasta 1975.

Lo cierto es que un aspecto que permitió que Bernie Sanders ganara la alcaldía de Burlington se dio a un cambio que se dio en el estado en la década de 1960 cuando personas de diferentes estados fueron a vivir ahí, muchos provenían de Nueva York y Massachusetts: “hippies, radicales, activistas de izquierda y otros, hartos de la decadencia de la vida urbana y buscando regresar al campo o participar en la vida comunitaria”, relata Marcetic.

De hecho, Sanders fue uno de sus forasteros que llegó a Vermont. La periodista de El País Amanda Mars reconstruyó en febrero de 2020, en el marco de la segunda ocasión que Bernie buscó la candidatura presidencial demócrata, ese episodio:

“Sanders llegó a Vermont con su primera esposa en 1967 procedente de Nueva York, tras obtener una diplomatura en Ciencias Políticas en la Universidad de Chicago. Poco antes había comprado un terreno en Middlesex, cerca de Montpellier, la capital del Estado, por 2 mil 500 dólares de la época y se instalaron a vivir en un cobertizo sin electricidad ni agua corriente. El matrimonio no duraría más de dos años y él se mudó a Burlington”.

En ese sentido, Marcetic expone que desde que Sander se mudó definitivamente a Vermont en 1968 tuvo trabajos como carpintero, escritor independiente y, durante un tiempo, desempleado. Con las campañas electorales ya superadas, incluso decidió probar suerte en el cine y cofundó una organización educativa sin fines de lucro y recorrió Nueva Inglaterra en coche, bajo la lluvia o la nieve, vendiendo tiras de película baratas directamente a las escuelas.

Para 1979, se pasó a la producción fílmica, donde produjo su obra maestra: un documental de media hora sobre el socialista Eugene Debs, el fundador del partido socialista de EU que obtuvo un millón de votos desde la cárcel en las elecciones presidenciales de 1920.

Greg Guma, su biógrafo no autorizado, escribió en “La República Popular: Vermont y la revolución de Sanders” cómo Gordon Paquette, quien había sido alcalde de Burlington durante cinco mandatos desestimó a Sanders al asumir que era solo un izquierdista advenedizo con un don para atraer la atención de los medios.

“El 3 de marzo de 1981, con unos pocos miles de dólares, un puñado de voluntarios y una agenda de reformas relativamente vaga, Sanders ganó las elecciones por tan solo diez votos. Burlington tenía un alcalde radical, autodenominado socialista, decidido a cambiar el curso de la historia de Vermont”.

Aún cuando se asumió y se identificó de esta manera, Amanda Mars expone que la media docena de personas que consultó quienes trabajaron o se relacionaron con Bernie Sanders durante aquellos años coincidieron en describirlo como un alcalde mucho más pragmático de lo esperado, que siempre mantuvo una agenda izquierdista de reformas pero acabó pactando con empresarios y republicanos.

Kurt Hackbarth comentó cómo Sanders inició su activismo a principio de los años 60 como estudiante, primero en Nueva York y luego en la Universidad de Chicago, en los momentos más álgidos y calientes de los movimientos a favor de los derechos civiles.

"Sanders empieza su activismo a principio de los años 60 como estudiante, primero en Nueva York y luego en la Universidad de Chicago, en los momentos más álgidos y calientes de los movimientos a favor de los derechos civiles, sobre todo la población afroamericana con figuras tan importantes obviamente históricas como Martin Luther King, Malcolm X y muchos más. Sanders participó en esto como estudiante, incluso fue arrestado y demás. Lo curioso de Sanders en el sistema tan cargado hacia la derecha, como es el estadounidense, es que él siempre ha dicho abiertamente que se considera un socialista, un socialista demócrata, Democratic socialist".

Señaló, que tras mudarse a Vermont en los años 70, Sanders se postuló en varias ocasiones por la alcaldía de la ciudad de Burlington por partidos menores y fue hasta 1981 obtuvo el triunfo. Ese logro lo impulsaría años mas tarde a ganar la diputación al Congreso Federal como independiente.

"En 1990 gana la diputación al Congreso Federal como independiente. Creo que fue el único independiente en ese momento son muy pocos, es decir, candidato sin partido. Ahí sirvió de diputado de 1990 hasta 2006, cuando ganó la Senaduría de Vermont y pues ya lleva desde entonces en el Senado. Él se asocia con la bancada del Partido Demócrata y vota la gran mayoría de las veces con el Partido Demócrata, pero técnicamente no forma parte del Partido Demócrata, es un político sin partido, que es una singularidad dentro de ese sistema".

Del Capitolio a buscar un lugar en la Blanca

Luego de haber sido Alcalde por 8 años en abril de 1989, Sanders se tomó un descanso de la política, viajó a Cuba y Nicaragua y se convirtió en profesor visitante en el Hamilton College. Eso acabó cuando en 1990 buscó contender por un lugar en la Cámara de Representantes, algo que había intentado en 1988 y en lo cual había fracasado frente a Peter Smith.

En 1990, con el temor de lo ocurrido antes, Sanders se lanzó por la candidatura mediante una campaña en la que priorizó el trabajo en campo, tocando de puerta en puerta y con distintas casas de campaña en Vermont. Ante el avance que comenzó a tener en las encuestas, Smith, su rival, recurrió a una campaña sucia mediante la manipulación de sus declaraciones y atacándolo por su corte socialista. Al final, eso terminó afectando al Congresista Smith y le permitió a Sanders hacerse con el triunfo, por un margen de 56 por ciento frente a un 40 por ciento.

Sanders de hecho llegó a la Cámara de Representantes como el primer independiente elegido desde la elección de Frazier Resmas de Ohio 40 años antes. En esa posición estuvo durante 16 años. La clave, de acuerdo con Marko Mercetic en un artículo en la revista In These Times, radicó en que Bernie Sanders confió siempre en su base de voluntarios de base, nunca restó importancia a la campaña puerta a puerta y evitó los ataques personales contra sus oponentes.

Durante ocho mandatos en la Cámara, se ganó la reputación de "El Rey de las Enmiendas" por aprobar más enmiendas que cualquier otro miembro del Congreso. También mantuvo una lucha constante contra la administración Bush por otorgar exenciones fiscales a multimillonarios y permitir que la deuda nacional alcanzara niveles récord.

El siguiente paso lo llevó al Senado, en donde se mantiene a la fecha. Luego de su paso como Congresista en 2006, Bernie Sanders fue elegido para el Senado de los Estados Unidos con el 65 por ciento de los votos, superando al republicano Rich Tarrant. La campaña para el Senado fue una de las más costosas en la historia de Vermont: Tarrant aportó inicialmente 3,45 millones de dólares de su fortuna personal, Sanders partió con un banco de 2,9 millones de dólares y un tercer republicano, Greg Park, recaudó más de un millón de dólares.

La contienda comenzó en mayo de 2006 con una serie de mítines que comenzaron en Burlington y continuaron en Springfield, Rutland, Bennington y Brattleboro. La trayectoria de Sanders en Vermont y su fórmula de apoyarse en sus bases y de ir casa por casa le ganó la confianza de la clase trabajadora de Vermont, los agricultores familiares, los ancianos, los veteranos y los jóvenes, según destacó en ese entonces su equipo de prensa.

Desde su posición en el Senado, Sanders buscó en dos ocasiones la candidatura presidencial demócrata. En 2016, lo hizo frente a Hillary Clinton en una contienda reñida, en la que salió a la luz un ensayo que publicó en una revista en Vermont en 1972 titulado "Hombre y Mujer", en el que incluía una referencia a una mujer que fantaseaba con una violación. Tras el reconocimiento político de Sanders como candidato presidencial en 2015 el ensayo recobró relevancia.

Al final, Sanders respaldó a Clinton en julio de 2016."Hillary Clinton entiende que debemos de arreglar la economía en Estados Unidos, que está manipulada y que dirige casi todas las nuevas riquezas e ingresos a (los más ricos del país, que están dentro del) 1 de la población", dijo Sanders, al enumerar las razones por las que apoyó a Clinton. "Hillary Clinton entiende que si alguien en Estados Unidos trabaja 40 horas a la semana, esa persona no debe de ser pobre".

En 2020, Sanders lo volvió a intentar y contendió frente Joe Biden por la candidatura demócrata. Esa campaña estuvo marcada por una afección cardiaca que tuvo en octubre de 2019 y por la que tuvo que ser intervenido en un hospital de Las Vegas, Nevada. En esa ocasión, se bajó de la carrera en abril de 2020 "Termina la campaña, pero la lucha continúa", afirmó un comunicado su equipo de campaña en esa ocasión.

Fuera de los focos, en 2024 Sanders incluso respaldó a Biden cuando buscó la reelección en medio de críticas por su estado de salud. "¡Basta! El señor Biden puede que no sea el candidato ideal, pero él será y tiene que ser el candidato", escribió Sanders en un columna en The New York Times.

Hoy, parece ser uno de los últimos resquicios que le queda a la izquierda.

Kurt Hackbarth refirió en ese sentido cómo han sido las dos ocasiones en las que ha buscado contender Sanders por la candidatura demócrata, y cómo este partido le ha bloqueado el paso aún cuando ha demostrado tener un respaldo popular importante.

"Cuando él decide buscar la presidencia en 2016, decidió hacerlo dentro del Partido Demócrata por una sencilla razón que es muy difícil que alguien gane la presidencia fuera. No ha habido un movimiento de tercer partido que realmente haya tenido posibilidades de ganar la presidencia de Estados Unidos desde el siglo XIX y fue muy criticado por eso, fue muy criticado por personas que pensaba que él debería justo como ha hecho como Diputado o como Senador buscar la presidencia como independiente, el problema es que necesitas montones de dinero para hacer esto, es muy difícil".

Hackbarth menciona que pese a iniciar con una desventaja de mas de 50 puntos porcentuales, Bernie Sanders logró recortar la distancia con Hillary Clinton.

"Buscó la presidencia en las elecciones internas del Partido Demócrata, los primaries que se llevan a cabo en cada estado y su contrincante era Hillary Clinton. Cuando él empezó su candidatura, creo que Hillary Clinton tenía una ventaja de 50 puntos. Ella estaba como en 60, él estaba como un 8, algo así. Nadie pensaba que tenía posibilidad alguna. Hillary Clinton era la esposa de un expresidente, había sido secretaría de estado, tenía un perfil súper alto, super conocida en todo. ¿Sanders quién era? Era un senador independiente de un estado muy pequeño y marginal que se considera un socialista en un país donde llamarse socialista es casi una grosería para la mayoría. Pero algo interesante pasó, Sanders empezó a hacer mítines y viajar de estado en estado y la gente empezó a llegar".

Ante esta situación, el partido demócrata decidió bloquear la candidatura de Sanders.

"Sanders articuló un mensaje que caló hondo en el público de Estados Unidos hacer que básicamente la fundamental identidad de los dos partidos. Un poco como López Obrador logró popularizar el término PRIAN aquí, Sanders
hizo mucho por mostrar que los dos partidos en Estados Unidos son demasiado parecidos. Y abogó por a políticas abiertamente populistas. A subir el salario mínimo federal, que no se había no se ha subido desde 2009 en Estados Unidos, seguro médico universal en un país donde la sanidad está privatizada y pues puedes incluso perder la casa si te enfermas. Finalmente la gente sentía que había una diferencia. A tal grado que el Partido Demócrata hizo de todo para bloquearlo, para impedir que ganara, es decir, el peso del partido cayó sobre él e inclinaron la balanza para que Hillary ganara en 2016, la candidatura interna, pero estaba muy reñida, mucho más de lo que habían pensado al principio".

En su segundo intento, ahora frente a Joe Biden, ocurrió algo similar, pues los demás precandidatos decidieron declinar a favor del ahora expresidente.

"En 2020 contra Joe Biden. ahora con un movimiento detrás de él, el movimiento de 2016. El problema ahí es que cuando Sanders empezó a ganar los primaries en New Hampshire, en Nevada, ¿qué hicieron? Todos los demás precandidatos se declinaron para favorecer a Joe Biden. Entonces otra vez terminaron bloqueando a Sanders. Es decir, el partido bloqueó desde adentro sus dos candidaturas para que nunca fuera a ser el candidato del partido. Desde entonces pues el movimiento de Sanders se ha dispersado, digamos, hasta un poco ahora donde está intentando retomarlo en este momento con este su recorrido con Ocasio-Cortez".

Hackbarth expuso además cómo Sanders dejó pasar su mejor momento en 2016 y optó por no crear un movimiento político que le hablara a esa base social que ha construido a lo largo de los años. También comentó que ha sido criticado por su acercamiento con Joe Biden, su indefinición en política exterior y el pragmatismo que ha aprendido de su larga estancia en Washington.

"El problema es que que mucha gente ya no creen en un partido demócrata, ni uno en el otro y ahí regresamos a la crítica que Sanders debió haber fundado un movimiento fuera del partido hace tiempo, porque ahora la gente le critica y dicen, "Nada más están usando a Sanders para hacer que la gente regrese a los demócratas." Y mucha gente ya no quiere nada que ver con los demócratas, ese es el problema".

Obed Rosas

Obed Rosas

Obed Rosas es editor de la Unidad de Investigación y encargado de la sección de Libros de SinEmbargo, en donde también se ha desempeñado como Jefe de Mesa y Editor de Redes. Es conductor de Close UP y Co-conductor, junto a Álvaro Delgado, de Siete Días, programas de SinEmbargo Al Aire. Ha trabajado en otros medios como Expansión, Newsweek en Español y Revista Zócalo. Es licenciado en Comunicación y Periodismo por la FES Aragón de la UNAM y estudió, además, Lengua y Literatura Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras de la misma casa de estudios.

Lo dice el reportero