Hace dos semanas, Javier Milei fue derrotado por el peronismo. El peso se desplomó aunque las autoridades financieras le inyectaron miles de millones de dólares.
Ciudad de México, 25 de septiembre (SinEmbargo).– Cuando Javier Milei asumió el poder, su Gobierno rompió con las inercias. The Wall Street Journal lo detalla así: Recortó drásticamente los subsidios, las regulaciones y las nóminas públicas, que se habían disparado bajo el Gobierno de sus predecesores peronistas de izquierda; el presupuesto presenta ahora superávit, excluyendo algunos pagos de intereses, y el banco central ya no financia déficits. La inflación mensual se desplomó al 1.9 por ciento en agosto, desde el 12.8 por ciento del mes en que Milei fue elegido.
“Pero Milei no solucionó otra causa fundamental de la inflación argentina: la dependencia de una moneda cuyo valor está vinculado al dólar. Mucho después de que otros países permitieran que sus monedas flotaran con relativa libertad, Argentina persiste con un tipo de cambio fijo, por temor a que la devaluación se refleje rápidamente en los precios de las importaciones y la inflación”, agrega el diario especializado en finanzas.
“El Presidente Donald Trump, quien ve a Milei como un alma gemela, ha acudido en su ayuda. Esta semana, el Secretario del Tesoro, Scott Bessent, declaró que Estados Unidos ayudaría a Argentina, ya sea mediante la compra directa de deuda argentina, una línea de crédito o una línea de swap (similar a una línea de crédito). Argentina ha recibido numerosos rescates. Claramente, sus problemas son más profundos”, sostiene. El plan de ayuda es por 20 mil millones de dólares. No es gratis. No es un regalo. Argentina tendrá que pagarlo. Es deuda. Ya México tuvo ese rescate con Ernesto Zedillo y pagó, aunque antes firmó pagarés comprometiendo sus ingresos petroleros.
Yesterday, @POTUS and I spoke extensively with President @JMilei and his senior team in New York. As President Trump has stated, we stand ready to do what is needed to support Argentina and the Argentine people.
Under President Milei, Argentina has taken important strides… https://t.co/TlzvkbNxII
— Treasury Secretary Scott Bessent (@SecScottBessent) September 24, 2025
Tampoco ha resuelto el fondo de la economía argentina, que no es ni financiero ni monetario. Es la desigualdad, la pobreza, los problemas de salud y educación, una economía dependiente, la falta de fondos para un retiro digno, la competitividad, los empleos bien pagados, la infraestructura. Un Estado de Bienestar.
Y además, claro, está lo monetario. Argentina no ha podido romper el vínculo entre la depreciación de la moneda y la inflación. “En 1994, el tipo de cambio fijo de México se rompió, y sólo un rescate liderado por Estados Unidos evitó un impago de la deuda. Dado que el banco central acababa de independizarse, no permitió que la depreciación de la moneda se reflejara en una inflación sostenida. Aun así, se desató una grave recesión. Hasta la década de 1990, Brasil, al igual que Argentina, tenía un historial de hiperinflación y planes de estabilización fallidos”, explica The Wall Street Journal.
En 1994, Brasil introdujo una nueva moneda y la fijó al dólar. En 1999, tras el ataque especulativo a la moneda, se abandonó la paridad. El banco central adoptó entonces una meta de inflación, mientras que el Gobierno fijó nuevas y estrictas metas fiscales. Y desde el año 2000, la inflación en México y Brasil ha sido en general de un solo dígito, mientras que en Argentina ha promediado alrededor del 70 por ciento durante la última década, explica el diario.
Prisa, prisa
Sí, el Gobierno de Milei tiene prisa. Hace dos semanas, Milei fue derrotado por el peronismo. El peso se desplomó aunque las autoridades financieras le inyectaron miles de millones de dólares.
Milei había prometido “dolarizar” Argentina. No lo tiene. El tipo de cambio es fijo y le cuesta al banco central mantener la moneda estable. Cuesta miles de millones que se van a la nada. Gita Gopinath, exfuncionaria del FMI, dijo que era buena la asistencia estadounidense, pero que Argentina debería devaluar y dejar flotar el dólar. Otros opinaron lo mismo.
Milei no está tan de acuerdo con devaluar porque no quiere asumir el costo político... aunque el costo político está allí: “La política aceleró la caída de la inflación. Pero como el peso no se depreció lo suficiente como para compensar el aumento de los costos en Argentina, la competitividad se deterioró. Las importaciones se dispararon. A pesar de un cuantioso préstamo del Fondo Monetario Internacional, el banco central ahora tiene pocas reservas de divisas para defender el peso. El rescate estadounidense propuesto por Bessent aliviaría parte de la presión sobre las reservas de Argentina”, detalla The Wall Street Journal.
Pero una solución permanente requiere más, agrega. “Argentina necesita una moneda flexible que pueda alcanzar niveles más competitivos sin impulsar la inflación. La reciente caída del peso aún no ha disparado las expectativas de inflación, lo que quizás sea una señal de que una política monetaria y fiscal restrictiva puede contener los precios. Pero es pronto, y Milei ya está flexibilizando el presupuesto fiscal”.
“Argentina también necesita un sector exportador más fuerte. Es altamente proteccionista, lo que resta competitividad a la manufactura. Si bien es competitivo en materias primas como la agricultura y el petróleo y el gas, está agobiado por los impuestos a la exportación. Milei suspendió recientemente los impuestos a la exportación, pero Bessent afirmó que Estados Unidos está trabajando con Argentina para restablecerlos. Aunque contradiga sus instintos, Trump podría brindar a Argentina apoyo a largo plazo reduciendo los aranceles estadounidenses y quizás incluso negociando un acuerdo de libre comercio sujeto a cambios adicionales. Eso contrarrestaría la influencia de China, impulsaría las exportaciones argentinas, atraería inversión extranjera y mejoraría las probabilidades de que se reembolse el rescate estadounidense”, concluye The Wall Street Journal.
“Con dos mensajes públicos en redes sociales y un programa que tiene detalles opacos, el Tesoro de los Estados Unidos y el FMI mostraron que existe un neo consenso de Washington que define la política económica del Gobierno de Javier Milei”, escribe hoy Leandro Renou, periodista especializado en economía, en el diario Página 12. “Lo que para Milei es un rescate, para Estados Unidos es un paso más en su programa geopolítico y, sobre todo, en su disputa por el liderazgo de la región con China”.






