Ciudad de México, 20 de feb (SinEmbargo).- El Presidente de la República, Enrique Peña Nieto, instruyó a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en la elaboración de una política de seguridad nacional y un plan para modernizar al Ejército mexicano que responda a las necesidades del país y enfrente los retos que tiene ante sí la institución castrense.
Ayer, en el marco del Centenario del Ejército Nacional, Salvador Cienfuegos Zepeda mencionó las cuatro acciones que, en amplia coordinación con las fuerzas armadas del país, tendrán siempre un claro rumbo de proyección y desarrollo nacional:
- Fortalecer el perfil profesional de los integrantes del instituto armado con una amplia base de valores éticos, que se base en dos preceptos castrenses, doctrina y sistema educativo.
- Modernizar al Ejército, teniendo a la vista un claro rumbo y desarrollo nacionales, para lo cual se planea un presupuesto con dirección responsable y definida con pretensiones de capacidad operativa, transparencia y rendición de cuentas.
- Mejorar el entrenamiento y capacitación de los soldados para satisfacer la misión primordial de defensa nacional, sin menoscabo al imperativo de reducir la violencia.
- La cuarta acción está orientada a continuar en las labores de apoyo a la seguridad ciudadana, privilegiando la inteligencia que proporcionen los órganos del Estado.
El titular de la Sedena añadió que el respeto a los derechos humanos y apego a la ley seguirán siendo los preceptos que tengan debate en el actuar y la interacción de los soldados de México con la sociedad y “toda conducta que se aleje de ese sendero habrá de asumir y afrontar las consecuencias”.
Cienfuegos Zepeda destacó ante Peña Nieto, el almirante secretario de Marina Vidal, Francisco Soberón Sanz, y representantes de los tres poderes de la Unión, que la característica principal del Ejército es la lealtad, por lo que las acciones se desarrollarán en base a este valor.
Para conmemorar el Centenario del Ejército Nacional, el cantante Vicente Fernández encabezó un concierto la noche del lunes en el Auditorio Nacional. En el evento estuvieron presentes el Mandatario federal y la Primera Dama, Angélica Rivera, a quienes les dedicó el tema "100 años".
“Aunque ya me estoy retirando, quiero pedirle al secretario de la Defensa Nacional, que me sigan invitando, porque me siento un soldado más”, dijo durante la celebración.
EL EJÉRCITO NO DEBE ESTAR EN LAS CALLES: DIPUTADOS
Las bancadas de los distintos partidos en la Cámara de Diputados reconocieron la labor del Ejército como garante de la defensa de la soberanía, paz y seguridad, así como pieza clave para mantener el rumbo de la nación. Sin embargo, destacaron la necesidad de que las fuerzas castrenses regresen a sus cuarteles.
"Los gobiernos se vieron en la necesidad de asignar a las fuerzas armadas tareas policiacas para fortalecer y enfrentar al crimen organizado, pero se debe de normar ese apoyo para que de manera paulatina se retiren de las calles", señalaron.
Los diputados destacaron el propósito del Congreso de la Unión para que apruebe las leyes que les permite al Ejército un marco de actuación más adecuado, que garantice sus derechos y precise sus obligaciones.
La nueva realidad del país y del mundo, manifestaron, obligan a que se respeten los derechos humanos de los integrantes de las fuerzas armadas, pero que ellos también respetar los de la sociedad civil.
A su vez, los legisladores expresaron su reconocimiento al Ejército mexicano como garante de la defensa de la soberanía, paz y seguridad, así como pieza clave para mantener el rumbo de la nación.
El presidente en turno de la Mesa Directiva, José González Morfin, destacó que el Ejército también ha sido importante para brindar auxilio en momentos difíciles, “protegiendo en todo momento a la sociedad”.
González Morfin recordó que hace cien años, el 19 de febrero de 1913, a fin de re establecer la vida política y social de la República se dieron facultades al Ejército para sostener el orden constitucional y con ello comenzar la restauración democrática en nuestro país.
Dijo que lo decretado por Venustiano Carranza es lo que constituye el antecedente del actual Ejército y Fuerza Aérea Mexicana.
