Aire puro embotellado: Negocio millonario por polución en China

21/12/2015 - 5:00 pm

Donde unos ven un grave problema para la salud y el medio ambiente, otros ven una oportunidad de negocio, y así es como la contaminación atmosférica de Pekín y otras ciudades chinas han abierto un lucrativo mercado: el de respirar aire limpio.

El fuerte esmog ha cubierto la capital china durante cinco días. Foto: Xinhua
El fuerte esmog ha cubierto la capital china durante cinco días. Foto: Xinhua

Ciudad de México, 21 de diciembre (SinEmbargo/VICE/EFE).- Donde unos ven un grave problema para la salud y el medio ambiente, otros ven una oportunidad de negocio, y así es como la contaminación atmosférica de Pekín y otras ciudades chinas han abierto un lucrativo mercado: el de respirar aire limpio.

Desde las convencionales mascarillas o purificadores de aire hasta ofertas más pintorescas como la de vender latas de aire puro, el abanico de opciones para mitigar los efectos de la contaminación se está ampliando en un sector en pleno apogeo.

Picos de contaminación como el que sufre Pekín desde este sábado, que ha obligado a decretar la segunda alerta roja porcontaminación -la máxima- en la historia de la ciudad, han disparado la demanda de estos productos.

Las mascarillas faciales se han convertido en un icono de la lucha diaria contra la contaminación de quienes residen en la potencia asiática, aunque otro producto resulta más rentable: el purificador de aire, un aparato diseñado para espacios cerrados que limpia el aire de partículas contaminantes.

Mascarillas usadas en China por la contaminación. Foto: EFE
Mascarillas usadas en China por la contaminación. Foto: EFE

Las ventas de purificadores de aire en China ascenderán al término de 2015 a 6.77 millones de unidades y generarán unos ingresos de 15 mil 350 millones de yuanes (2 mil 400 millones de dólares, 2 mil 200 millones de euros), según las estimaciones de Askci, una firma local de estudios del consumo.

El analista de la consultora Daxue Thibaud Andre considera, en declaraciones a Efe, que es un momento "crucial" para entrar en este mercado y posicionar una marca.

"El Gobierno ahora informa con menos filtros sobre el asunto de la contaminación, algo que es nuevo y que podemos esperar que incremente enormemente la concienciación de los consumidores sobre los purificadores de aire", asegura Andre.

Cada vez más empresas se deciden a fabricar purificadores, incluso las especializadas en productos que en principio tienen poco o nada que ver con la contaminación.

La tecnológica china Xiaomi, conocida por sus teléfonos inteligentes, sorprendió el año pasado al poner a la venta un purificador de aire, meses después diseñó uno de agua y el pasado 24 de noviembre, una nueva versión del de aire.

El purificador de la empresa Xaoimi. Foto: Xaomi
El purificador de la empresa Xaoimi. Foto: Xiaomi

Como el lanzamiento de su último modelo de purificador coincidió con una densa capa de "smog" en el norte de China, Xiaomi agotó sus existencias (que se vendían a 699 yuanes -alrededor de 110 dólares, 100 euros- la unidad) en menos de una semana.

Los purificadores de aire son ya el segundo tipo de electrodoméstico más demandado en el gigante asiático, sólo por detrás de los exprimidores, reveló una encuesta elaborada por la empresa de análisis de tendencias de consumo CNRS-TGI.

En todo caso, no son el único aparato relacionado con la contaminación que está generando negocio.

Origins, una empresa fundada en enero del año pasado en Pekín, vende a 360 yuanes (algo más de 55 dólares, 50 euros) un dispositivo que mide el nivel de contaminación y que ha conseguido popularidad suficiente como para terminar sus existencias.

Aparato que mide el nivel de contaminación. Foto: Especial
Aparato que mide el nivel de contaminación. Foto: Especial

"Cuando se declaró la primera alerta roja (la semana pasada) no podíamos esperar que habría tanta demanda, por eso nos hemos quedado sin existencias y hasta el mes que viene no podremos atender las peticiones que nos lleguen", señala a Efe Jessica Lam, cofundadora de la compañía.

Lam explica que el consumo de este tipo de productos es muy volátil y que puede cambiar según sople el viento y se lleve, o no, la contaminación.

"Cuando la gente ve que el aire es malo, quien ya está concienciado de que es un problema, se decide a comprar algo para tratar de solucionarlo", explica esta emprendedora.

El sector de los dispositivos para paliar la contaminación ha crecido mucho, por lo que Andre, de la consultora Daxue, anticipa una intensificación en la competencia.

"En términos de competencia, el mercado va a ser extremadamente feroz. En 2000 había alrededor de un centenar de firmas fabricando ese equipamiento. Hoy la industria china cuenta con más de 3 mil marcas", apunta el analista.

Aunque para la mayoría de los residentes en China la mejor opción en los días de contaminación seguirá siendo quedarse en casa o ponerse una mascarilla si han de salir a la calle, no faltan las ideas innovadoras para minimizar las consecuencias de la polución.

Así es como una empresa canadiense, Vitality Air, ha decidido enlatar aire puro de las Montañas Rocosas y venderlo en China, una iniciativa que muestra como pocas que lo que para unos puede ser una asfixia, a otros les puede permitir respirar económicamente tranquilos.

Oxígeno embotellado. Foto: Vitality Air
Oxígeno embotellado. Foto: Vitality Air

La pareja empezó su negocio en 2014 después de que sus amigos que viajaban con frecuencia a Asia les contaron sobre la pésima calidad del aire en China.

Como experimento, los dos metieron todo el aire posible en una bolsa Ziploc grande, la cerraron y la ofrecieron en eBay –al final la vendieron por 99 centavos de dólar–. Su segundo intento inició una puja y la bolsa se vendió en 168 dólares. De ahí surgió la idea de lo que ahora se conoce como Vitality Air.

"La forma en que capturamos el aire ahora es un secreto comercial", dijo Paquette en entrevista para VICE. También aseguró que se desplaza de Edmonton, Alberta, hasta Banff y el Lago Louise para llenar latas gigantes de aire utilizando una herramienta de compresión y luego las embotella en su casa.

"Al principio, el producto estaba diseñado como una curiosidad pero desde que empeoró la contaminación en Beijing, cada vez más gente lo compra como artículo de uso diario y no como curiosidad", señaló. "Ha habido bastante demanda".

Las latas vienen con una máscara incluida y contienen alrededor de 150 sprays de 1 segundo.

Se venden paquetes individuales y dobles de latas por un precio que va de entre los 16 y los 46 dólares. Paquette dijo que otros países aparte de China han mostrado interés, como Irán y Afganistán.

Paquette dijo que el producto tardó en llamar la atención pero que la demanda se disparó desde se emitió la alerta de smog en Beijing la semana pasada.

Lam dijo al periódico Telegraph que su primer embarque de 500 latas se vendió en cuatro días y que un contenedor con más de 4 mil latas va en camino hacia China.

Paquette dijo que algunos distribuidores en China han mostrado interés en llevar las latas de Vitality Air a las tiendas comerciales.

Sin embargo, el concepto de respirar aire del otro lado del mundo para lidiar con el esmog no es nada nuevo.

Por ejemplo, para promover el turismo en el área y crear conciencia sobre la crisis de contaminación del aire en China, en 2014, la Reserva Natural de la Montaña Laojun ofreció a los ciudadanos de Zhengzhou –una de las ciudades más contaminadas del país– la oportunidad de respirar aire fresco de las montañas en bolsas selladas.

Otro ejemplo de lo redituable que puede ser la falta de aire limpio es un restaurante en la provincia de Jiang Su, que cobra una "cuota por limpieza de aire" a sus clientes.

Parece broma pero ahora las empresas hacen negocio de la emergencia en China por la falta de aire limpio. ¿Cuáles son los límites del mercado?

Mascarilla de aire. Foto: EFE
Mascarilla de aire. Foto: EFE

 

Redacción/SinEmbargo

Redacción/SinEmbargo

Lo dice el reportero