La contaminación causada por desechos tóxicos e intereses inmobiliarios ponen en riesgo el Área Natural Protegida Lago de Texcoco, alertan autoridades y habitantes de comunidades cercanas.
Ciudad de México, 19 de julio (SinEmbargo).– “Buscaban desplazar a los originarias, a los campesinos, de este territorio porque les interesa y les sigue interesando para el desarrollo inmobiliario”, dijo Arturo González Cando, integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, desde los vestigios de la terminal en forma de “X” de lo que sería el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), en el Lago de Texcoco.
Arturo se refiere a políticos y empresarios que desde hace más de dos décadas respaldaron el despojo de tierras en el Estado de México. Pobladores como él, que lucharon por años hasta conseguir la cancelación del aeropuerto en 2018, y autoridades federales alertan que el lago sigue amenazado por intereses inmobiliarios, así como por la contaminación de desechos tóxicos.
Con el nombramiento del Lago de Texcoco como Área Natural Protegida, en marzo de 2022, quedó prohibido construir viviendas u otras áreas urbanas y arrojar desechos en sus 14 mil hectáreas de extensión, pero recientemente se encontraron tambos con residuos peligrosos vertidos y enterrados.

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que el 5 de junio denunció a tres personas a las que encontró depositando residuos peligrosos en Atenco, dentro del área natural. En el lugar había decenas de bolsas y tambos con desechos. Un juez las vinculó a proceso y ordenó como medida cautelar su detención por atentar contra el ambiente y la gestión ambiental.

En el Área Natural Protegida se han encontrado desechos, por ejemplo, de empresas químicas como Nouryun. El diario Milenio reportó el mes pasado que la Profepa le solicitó información porque halló bolsas de uno de sus productos utilizado en la producción de PVC. La empresa aseguró que encargó sus residuos a la empresa Transportes ambientales, que a su vez los habría entregado a otra subempresa.
Jorge Daniel Fonseca, Director del Área Natural Protegida Lago de Texcoco, alertó que esta problemática también se relaciona con grupos de personas que insisten en construir desarrollos inmobiliarios en la zona.
“Sabemos que con el anuncio de la construcción del aeropuerto el mayor interés que se avivó con el megaproyecto fue la megaurbanización del oriente del Estado de México, en especial de los terrenos contiguos a lo que sería este aeropuerto, y que son intereses que actualmente continúan luchando contra el decreto de protección, que muchos de ellos incluso se han amparado para poder continuar con estos procesos de desarrollo inmobiliario de distintas índoles, tanto legales como ilegales
“Uno de los mayores problemas que tenemos es el establecimiento de viviendas a manos de fraccionadores que hacen venta ilegal de grandes extensiones del territorio y que además han encontrado la forma de lucrar con residuos producto de la construcción, con residuos de manejo especial altamente contaminantes para los ecosistemas acuáticos. Trabajan bajo un esquema de generar el relleno de estos terrenos que posteriormente van a vender para el desarrollo inmobiliario. Ese es el mayor reto del Área Natural Protegida: luchar contra los intereses inmobiliarios que se tienen en la región", alertó.
Pobladores de Atenco también han alertado de la contaminación y el intento por vender lotes dentro del área protegida, por ello, aunque celebran que el Lago de Texcoco cada vez alberga más agua, y con ello recibe más aves y otras especies nativas, insisten en que no dejarán defender el lago, el único vaso regulador hídrico y climático que existe al oriente del Estado de México.
Desde la Ciénega de San Juan, una laguna que forma parte del Área Natural Protegida y actualmente tiene unas 600 hectáreas de agua, Ignacio del Valle, integrante del Frente de los Pueblos en Defensa de la Tierra, mira la barda que se construyó en el Gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto para delimitar dónde estaría el NAIM.
La barda ahora impide el paso de fauna nociva, pero Ignacio también opina que la estructura sirve para recordar que en poblados como Atenco seguirán impidiendo el avance de proyectos inmobiliarios en el lago de Texcoco.
"Estamos considerando esa barda no quitarla por la invasión, por los intereses de grupos que tienen proyectos inmobiliarios en los que no han respetado la naturaleza ni los sitios donde se debe de construir, en donde se corrompe la idea de asa habitación, en donde se enriquece gente que no tiene que ver nada con los intereses de las comunidades", expuso.

Jorge, del Frente de los Pueblos en Defensa de la Tierra, mencionó que proteger y recuperar el Lago de Texcoco significa mejorar la calidad del agua y la vida en el Valle de México, por lo que no permitirán que se reactive la construcción de proyectos que, como lo hizo el NAIM, amenacen ese ecosistema.
"El lago, las montañas son muy importantes para la zona oriente del Valle de México y también para la ciudad. Teniendo agua aquí en esta zona los mantos acuíferos se recargarán, tendrán agua en la ciudad y tendremos todos nosotros agua. Tendría que haber un contubernio grande con las autoridades para que esta Área Natural Protegida se deseche y eso sería corrupción, se llama corrupción. No lo vamos a permitir porque para eso estamos, para eso vienen las nuevas generaciones que ya tienen conciencia, nosotros vamos a seguir protegiendo la flora, la fauna y todo lo que da nuestra madre tierra".





