La veneración por el jaguar en otros tiempos nos habla de vínculos con la naturaleza que hoy hemos olvidado y que, en nombre del progreso, con frecuencia desconocemos en nuestro afán de destrucción. Este legado vivo puede desaparecer si no aprendemos a apreciarlo y a respetarlo.
Por Angélica González
Ciudad de México, 10 de agosto (SinEmbargo).- El jaguar (Panthera onca) es uno de los siete felinos más grandes del planeta y el felino de mayor tamaño del continente americano. El jaguar no solo se destaca por su grandeza o gran talento para cazar, sino también por ser un animal que ha trascendido en la historia prehispánica a través del tiempo y pertenece a muchas de sus cosmogonías.
Es muy difícil establecer una imagen concreta sobre el jaguar pues al pertenecer en distintas cosmogonías (la maya, la teotihuacana, la olmeca, etc.) tiene varios significados y simbolismos; algunas culturas veían a este animal como la destrucción, otras como la lluvia, otros como símbolos de la fertilidad y otras como la realeza. Es por esta variedad de significados que la revista-libro no.121 Jaguar de la editorial Artes de México no solamente se encarga de estudiar a este animal desde la biología sino de manera multidisciplinaria pues se usa la historia del arte, la antropología, la zooarqueología y otras disciplinas para abarcar el amplio panorama debido a que el jaguar hace apariciones directas o indirectas en distintos medios como códices, esculturas, pinturas, cerámica, etc.
A través de la revista podemos descubrir más sobre cómo se veía al animal en el pasado y cómo se estableció el vínculo con el felino y con los dioses a través de los mitos de distintos artículos y una increíble variedad de imágenes.
La figura del jaguar y sus significados
Los jaguares comúnmente son vistos como el símbolo de la destrucción por su talento nato de cazadores y según distintas cosmogonías los personajes temidos se transforman en ellos, pero también fueron acogidos por los chamanes pues se cree que otorgan poderes y estos utilizan la figura del jaguar para formar una especie de ying- yang con el águila que representa la luz y el jaguar la oscuridad. Por su parte los reyes utilizaban esta imagen para demostrar poder. Las tres simbologías tienen en común ver al jaguar como alguien poderoso, fuerte y capaz de todo, es por esto que en varias pinturas y representaciones artísticas como códices se ve a humanos fuertes o temidos pues poseen ciertas facciones del animal como sus colmillos; también según estudios los deportistas (que no eran jugadores de pelota, sino una especie de boxeadores) se esmeraban en que su golpe fuera lo más similar al zarpazo del jaguar, en Guerrero se disfrazaban de jaguar y luchaban para atraer la lluvia pues también poseía simbología acuática.
La imagen del Jaguar formando un ying-yang también era común en Teotihuacán, solo que ahí era con el puma. El puma representa el sol por su pelaje dorado y el jaguar por su poder a la noche y el inframundo, estos dos animales eran sacrificados en rituales importantes, estaban en los muros de la ciudad y estuvieron en los zoológicos de los reyes.
El jaguar a través del tiempo
El culto al jaguar se desarrolló desde el preclásico medio, pasó por el periodo clásico y después por el posclásico, pero también la imagen del jaguar trascendió en la época de la colonia debido a su belleza y los mitos detrás de esta figura. En la época de la colonia se les permitió a las familias nobles y dirigentes indígenas utilizar estos símbolos (combinados con títulos europeos) para consolidar sus derechos y su poder, el jaguar se volvió un vínculo entre el pueblo y sus líderes y formó parte de la simbología de los mandos indígenas, a pesar del tiempo el jaguar se siguió colando pues hay evidencia de él en la arquitectura colonial cristiana del siglo XVI.
En la actualidad los jaguares siguen siendo figuras temidas, pero también respetadas y los pueblos a pesar de tenerles miedo les respetan por el peso histórico que se cargan y es un orgullo que un animal tan bello y con tanta carga simbólica e histórica siga rondando por nuestro país.
Lamentablemente el jaguar no había tenido tantas investigaciones desde puntos científicos o veterinarios sobre él hasta tiempos recientes, además de encontrarse en peligro de extinción, pero con mucho esfuerzo por parte del gobierno, ONGS e instituciones privadas se han logrado aumentar las investigaciones sobre este felino y su conservación para evitar su posible extinción.
