Ciudad de México, 19 de feb (SinEmbargo).– El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal (CCSPJP) publicó este día el estudio "La violencia en los municipios de México", en donde indica que Acapulco, Guerrero, es el municipio que en 2012 tuvo la tasa más elevada de homicidios en el país, rebasando en 32% a Lerdo, Durango, que fue el segundo lugar nacional.
El estudio ofrece un panorama de la incidencia de los seis delitos violentos más comunes, homicidio, secuestro, violación, lesiones dolosas, robo con violencia y extorsión, resaltando que la principal causa de todos estos actos es la impunidad.
El Estado de México y Morelos son las entidades con mayor número de violaciones, siendo Yautepec, el municipio que encabeza la lista.
El documento destaca que de los 20 municipios con las tasas más elevadas de homicidios, cinco corresponden a Guerrero y cuatro a Morelos. Tampico, Tamaulipas, destaca como el municipio con la tasa más elevada de secuestros y supera 52% a Victoria, que ocupa el segundo lugar.
En Tamaulipas se encuentran cinco de los 20 municipios donde hay más secuestros, seguido por Michoacán con tres y Tabasco también con tres.
Oaxaca, Oaxaca, es el municipio con la tasa más elevada de golpes y lesiones dolosas.
De los 20 municipios con las tasas más elevadas de golpes y lesiones dolosas, 10 corresponden al Estado de México y cuatro a Tabasco.
La delegación Cuauhtémoc del Distrito Federal tiene la tasa más elevada de robos con violencia, pero es apenas 0.14% superior a la de Cuernavaca que ocupa el segundo lugar nacional.
“El Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal AC ha venido realizado y difundiendo el ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo. Pero en estricto sentido el estudio se refiere a la incidencia de homicidios dolosos, la cual es la variable más importante de la violencia pero no la única”, explica la organización en un comunicado.
Dadas las dificultades para tener acceso a la información de datos sobre delitos tales como el secuestro, la violación, las lesiones dolosas, el robo con violencia y la extorsión, no ha sido posible incorporar estas variables al estudio de las 50 ciudades más violentas del mundo, reconoce.
El Consejo aclara que con respecto a México, el estudio sí es factible, en virtud de a la existencia de información oficial desagregada por entidad federativa y municipio de los delitos ya señalados, además de homicidio.
“Pero además, un estudio como este resulta especialmente necesario ante la situación de violencia que padece México y ante las políticas del nuevo gobierno federal, del Presidente Enrique Peña Nieto. Como es sabido, la presente administración aplica una estrategia de prevención del delito que se concentra particularmente en los municipios más afectados por la violencia. El objetivo de las políticas gubernamentales es cumplir el compromiso electoral de reducir en seis años la incidencia de homicidios, secuestros y extorsiones en al menos un 50%, en comparación con el nivel actual”, agrega.





