En las últimas semanas la Profepa reportó el varamiento de 16 cetáceos muertos en Baja California Sur y Nayarit, debido a que son fenómenos ocurridos en sitios y fechas diferentes la autoridad ambiental descartó que se trate de un evento masivo.

Ciudad de México, 1 de febrero, (SinEmbargo).- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) atendió el varamiento de 10 ballenas muertas en la Laguna Ojo de Liebre, Baja California Sur y en la Playa La Cuevas, Nayarit, debido a que son fenómenos ocurridos en sitios y fechas diferentes la autoridad ambiental descartó que se trate de un evento masivo.
De acuerdo con el organismo, en la Laguna de Ojo de Liebre, en el municipio de Mulegé, en Baja California Sur, se atendieron a un total de 9 ballenas grises de la especie Eschrichtius robustus, de las cuales 8 eran ballenatos y 1 ejemplar adulto.
Se trata del segundo caso reportado por la dependencia en esta temporada, ya que el pasado 14 de enero se notificó el varamiento de otras siete ballenas grises en BCS
De acuerdo con los especialistas, no se trata de un evento masivo de mortalidad, ya que los ejemplares fueron hallados en fechas y sitios diferentes, así como en distintos estados de descomposición.
Expertos de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) en la entidad, la muerte de los cetáceos, en su mayoría ballenatos, corresponde a una situación natural porque fueron encontrados dentro de los rangos habituales de mortalidad.
Por otra parte, en el estado de Nayarit, inspectores de la PROFEPA, en coordinación con personal de la empresa Vallarta Adventures, encontraron un ejemplar adulto de ballena jorobada (Megaptera novaeangliae) en la playa Las cuevas del municipio de Compostela, donde el especimen se hallaba en avanzado estado de descomposición.
Expertos en mamíferos marinos aseguraron que el deceso de la ballena se debió a causas naturales al ser un ejemplar longevo; asimismo, informaron que derivado de la marea y las corrientes marinas este fue arrojado a tierra, además de calcular que el especimen tenía entre 15 y 20 días de haber fallecido.
Por lo anterior, se procedió a realizar perforaciones en el tórax y abdomen del animal a fin de liberar la presión de gases y ubicar en el cuerpo del ejemplar heridas o daños; sin embargo, no presentaba ninguna lesión por artes de pesca o señales de trauma o golpe-lesión por alguna embarcación.
La Profepa agregó que ambas especies se encuentran listadas en la NOM-059-SEMARNAT-2010, bajo el estatus de Sujeta a protección especial (Pr).




