El Embajador Ken Salazar aseguró en conferencia de prensa que cuenta con el respaldo del Presidente Joe Biden y del Departamento de Estado. “En Washington DC lo saben. Yo estuve con el Presidente Biden el viernes en la noche con el Secretario Blinken. Ellos me apoyan a mí con todo lo que hemos hecho. No hay ningún problema allá”, dijo.
Ciudad de México, 26 de noviembre (SinEmbargo).- El Embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, reafirmó su postura crítica hacia la política de austeridad del Gobierno mexicano en materia de seguridad, señalando que mantiene su posición y aseguró que sus comentarios han sido respaldados por Washington.
“Yo no cambio de posición. Antes de llegar a este puesto de Embajador siempre he dicho que para la democracia se requiere la seguridad del pueblo. Un pueblo sin la seguridad del pueblo tiembla la democracia y eso es la realidad, la realidad en lugares como Haití, como Venezuela y por supuesto lo puedo decir también aquí en México”, detalló.
En conferencia de prensa, Salazar señaló que su postura sobre la seguridad está basada en su experiencia previa a ser embajador. Además, aseguró que sus críticas no están dirigidas exclusivamente al gobierno, sino a las condiciones de inseguridad que afectan a diversos sectores de la población, incluidas las extorsiones que preocupan al sector privado, los asesinatos y ataques en iglesias, y el creciente clima de violencia. Al respecto, aseguró que sus señalamientos son porque confía en la gestión de la Presidenta Claudia Sheinbaum.
“La muerte del padre Marcelo en Chiapas, los asesinatos de los Jesuitas en Chihuahua, todo eso una realidad, pero lo digo yo con una esperanza grande porque tengo mucha confianza en el programa se está desarrollando la Presidenta Sheinbaum, y nosotros en los Estados Unidos queremos estar en apoyo a México para llegar a esa seguridad”, expresó.
Salazar también abordó el impacto de la inseguridad en la migración, destacando que muchos de los migrantes que llegan a la frontera norte de México provienen de estados como Chiapas, Guerrero, Guanajuato y Zacatecas. Dijo que Estados Unidos ha trabajado en conjunto con México en temas de migración y seguridad, y que Washington ha invertido millones de dólares en estos esfuerzos desde febrero. Sin embargo, insistió en que queda mucho por hacer y que se requiere un trabajo más coordinado entre ambas naciones.
Cuando SinEmbargo le preguntó sobre la postura del gobierno estadounidense, Salazar aseguró que cuenta con el respaldo del presidente Joe Biden y del Departamento de Estado. “En Washington DC lo saben. Yo estuve con el Presidente Biden el viernes en la noche con el Secretario Blinken. Ellos me apoyan a mí con todo lo que hemos hecho. No hay ningún problema allá”, dijo.
Ken Salazar también fue cuestionado por medios de comunicación sobre la amenaza del expresidente Donald Trump de imponer mayores aranceles, a lo que respondió que ese tema deberá ser tratado directamente por las autoridades mexicanas con la próxima administración estadounidense.
“Lo que hace el Presidente que viene y su administración, eso lo pueden llevar ustedes y también el Gobierno de México con ellos. Se tendrá que ir preparando para la transición. Yo solo puedo comentar sobre el programa del presidente Biden y mío como embajador, que es el programa de integración de América del Norte, con el apoyo del T-MEC, que nos ha permitido ser los principales socios comerciales en el mundo”, afirmó.
Al abordar las causas de la migración, acusó a países como Venezuela, Nicaragua, Haití y Cuba de tener problemas de democracia y gobernabilidad, lo que obliga a miles de personas a emigrar. Asimismo, apuntó que dentro de México, la inseguridad en estados como Chiapas, Michoacán, Guerrero y Guanajuato expulsa a ciudadanos hacia Estados Unidos.
“Las causas de la migración, y sabemos que hay muchos migrantes que llegan de México a la frontera de los Estados Unidos, pues son de ¿dónde vienen de México? Chiapas, Michoacán, Guerrero y Guanajuato. ¿Por qué se está saliendo tanto mexicano de sus estados? Es porque se requiere la seguridad. Eso es la realidad de México, que se reconoce donde quiera. Entonces, ¿qué es lo que yo hago como recomendación así a la Presidenta Sheinbaum y a su equipo? Es que se tiene que seguir enfocando en la seguridad y se requiere que se pongan recursos”, expresó.
Aunque reconoció que el consumo de drogas y el tráfico de armas en Estados Unidos son problemas graves de ese país. Sin embargo, puso énfasis en que los precursores del fentanilo llegan desde Asia, lo que convierte este tema en un problema trilateral entre México, Estados Unidos y Canadá.
“También se tiene que reconocer que los precursores e incluso el fentanilo que llega a México, a Estados Unidos y a Canadá. Entonces, decir que es problema de un país u otro no es ver el problema como es. Es un problema de México, Estados Unidos y Canadá.”
MIGRACIÓN: LA SOLUCIÓN ESTÁ EN EL SUR
La conferencia de prensa fue citada para abordar el tema de la migración. En un mensaje inicial, Salazar recalcó que los retos compartidos en materia migratoria demandan una planeación conjunta, con enfoque en regiones estratégicas como el sureste mexicano y la frontera con Guatemala.
“La solución de la migración está en el sur. La solución de la migración que llega a la frontera de Estados Unidos y México está en el sur”, dijo.
El embajador destacó el proyecto del Istmo de Tehuantepec como un eje clave para el desarrollo económico, la seguridad y la contención de la migración. “Hay proyectos que ojalá se sigan y tengan éxito en contener la migración”, agregó.
Salazar destacó avances logrados en colaboración con el Gobierno de México, aunque dijo que aún queda mucho por hacer para consolidar una solución integral.
Al ser cuestionado sobre posibles fallas en la gestión migratoria, el embajador afirmó que ambos países están alineados en proyectos estratégicos. Sin embargo, reiteró que se requiere mayor coordinación e inversión para abordar el fenómeno migratorio de manera efectiva.
“Hemos hecho un trabajo muy bueno, hay muchísimo más trabajo que se quiere hacer, pero si no hay planificación conjunta entre Estados Unidos y México, y si no hay inversión –que se requiere mucha de la parte de México y de Estados Unidos–, no se puede lograr esa meta que tenemos”.
