El censo será un eje central de la estrategia. Permitirá ubicar territorios artesanales, clasificar materias primas por región e identificar comunidades con potencial creativo. Marina Núñez, Subsecretaria de Cultura, detalló que también se desarrollarán programas de capacitación, que podrán aplicarse en modalidad fija o itinerante, de acuerdo con las necesidades regionales.
Los cursos estarán dirigidos a mejorar la comercialización, fomentar la innovación, enseñar técnicas tradicionales, exportación, sostenibilidad y educación financiera. Fonart destinará una línea de crédito sin intereses, con prioridad a mujeres artesanas, para que puedan invertir en su producción sin endeudarse.
Asimismo, se establecerá una política de encargos especiales para ferias, exposiciones o pedidos institucionales, con pagos justos garantizados desde el inicio. El plan contempla certificar las piezas para asegurar su originalidad, mediante un etiquetado que avale la autenticidad y procedencia de cada obra.
También se fortalecerán los mecanismos de acopio y se desarrollará una red de comercialización más sólida, con respaldo técnico y administrativo. Entre las nuevas medidas está la creación de cinco tiendas propias de Fonart en Ciudad de México, además de puntos de venta en otros estados del país.
Se planea abrir sucursales en lugares clave como Tijuana, Guadalajara, Palenque, Chichén Itzá y Tulum, aprovechando el flujo turístico en esas regiones. El Gobierno prevé llevar productos artesanales a museos, cruceros, hoteles, tiendas departamentales y plataformas de comercio electrónico.
Además, los artesanos contarán con servicios de facturación, exportación temporal, inclusión en catálogos especializados y apoyo logístico en ventas al mayoreo. El relanzamiento del Fonart también busca “saldar una deuda histórica con las comunidades indígenas y afromexicanas”, subrayó Curiel de Icaza.
En su intervención, Marina Núñez reconoció que la falta de un censo ha impedido diseñar políticas públicas adecuadas para este sector: “Es un gran faltante”.
La estrategia fue diseñada con el acompañamiento del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas y otras dependencias que colaborarán en su ejecución.
El nuevo Fonart aspira a convertirse en un modelo nacional de impulso económico a través del arte popular, la creatividad local y el patrimonio cultural.
La subsecretaria de Desarrollo Cultural, Marina Núñez Bespalova, informó que se destinarán 500 millones de pesos en créditos, a través de Financiera para el Bienestar (Finabien), como parte de una estrategia para impulsar el trabajo de aproximadamente 17 mil artesanas. Esta inversión permitirá la creación de 50 mil piezas artesanales de alta calidad y con certificación, que serán distribuidas en puntos de venta estratégicos.
Además, el Fondo Nacional para el Fomento de las Artesanías (FONART) canalizará de forma directa 15 millones de pesos adicionales para apoyar la producción de otras piezas, beneficiando a 3 mil 733 artesanos. Por su parte, el programa Original otorgará espacios de exhibición y comercialización a mil 250 participantes, incluidos 273 colectivos.
Con estas acciones, el número total de personas artesanas beneficiadas alcanzará las 23 mil 894, lo que representa un incremento del 140 por ciento en comparación con el año anterior.