De acuerdo con la revista estadounidense Wired, al menos una docena de integrantes del equipo de la startup Thinking Machines Lab (TML), liderada por Mira Murati, creadora de ChatGPT, rechazaron la oferta que Zuckerberg les hizo para formar parte de su Meta Superintelligence Labs.
Ciudad de México, 4 de agosto (SinEmbargo).- Una jugosa oferta económica no fue suficiente para que parte del equipo de Mira Murati, creadora de ChatGPT, abandonara la joven empresa Thinking Machines Lab (TML) y se integrara a la recién creada Meta Superintelligence Labs de Mark Zuckerberg, una muestra de que no siempre el dinero puede comprarlo todo.
De acuerdo con la revista estadounidense Wired, al menos una docena de integrantes del equipo de Thinking Machines Lab (TML), liderada por Mira Murati, creadora de ChatGPT, rechazaron la oferta que Zuckerberg les hizo para formar parte de su Meta Superintelligence Labs. Los sueldos iban de los 200 millones de dólares a los mil millones de dólares, para “un periodo de varios años”, detalló la publicación bimestral.
Meta Superintelligence Labs es la nueva compañía especializada en el desarrollo de Inteligencia Artificial del CEO de Meta, por lo que éste se ha empeñado en “reclutar a los mejores talentos en este campo”, destacó Wired, que aseguró que “Por el momento, en Thinking Machines Lab, ni una sola persona ha aceptado la oferta [de Zuckerberg]”, pese a que se les garantizó ganancias de “entre 50 y 100 millones de dólares” en el primer año.

Antes de este intento por parte de Meta para llevarse a los mejores talentos Thinking Machines Lab, trató desmantelar OpenAI, en la que Murati se desempeñó como directora de tecnología hasta septiembre de 2024, para después conformar Thinking Machines Lab, empresa enfocada a la creación de modelos de Inteligencia Artificial “más accesibles y personalizados”, según información de Wired.
Tras darse a conocer los ofrecimientos de Zuckerberg, Andy Stone, director de comunicaciones de Meta, rechazó la situación y cuestionó las intenciones de difundir esta información. "Solo hicimos ofertas a un puñado de personas en TML y, aunque hubo una oferta considerable, los detalles no están claros. Al final, todo esto plantea la pregunta de quién está dando vueltas a esta narrativa y por qué", declaró a Wired.
La revista también publicó una presunta conversación que el CEO de Meta habría sostenido con uno de los posibles candidatos, a través de Whats App, en donde el propio Zuckerberg da pie para que sostengan una llamada, al señalar que le “encantaría compartir más sobre lo que estamos construyendo", señala el mensaje en el que asegura que ha seguido de cerca el trabajo de sus candidatos.
"Hemos seguido tu trabajo sobre el avance de la tecnología y los beneficios de la IA para todos a lo largo de los años. Estamos realizando importantes inversiones en investigación, productos y nuestra infraestructura para crear los productos y servicios de IA más valiosos para las personas”, así inicia el presunto mensaje que Zuckerberg habría mandado personalmente a uno de los candidatos que tenían en la mira para que formara parte de Meta Superintelligence Labs.
“Somos optimistas: todos los usuarios de nuestros servicios dispondrán de un asistente de IA de primera clase que les ayudará a hacer las cosas, todos los creadores tendrán una IA con la que su comunidad podrá interactuar, todas las empresas tendrán una IA con la que sus clientes podrán comprar cosas y obtener asistencia, y todos los desarrolladores tendrán un modelo de código abierto de última generación con el que construir”, agrega el mensaje.
“Queremos traer a Meta a los mejores, y nos encantaría compartir más sobre lo que estamos construyendo", concluye el mensaje, tras el cual supuestamente se dieron llamadas con el propio Zuckerberg, así como una serie de entrevistas y conversaciones con varios ejecutivos de esta meta, entre ellos Andrew "Boz" Bosworth, director de tecnología de esta compañía.
La revista destacó la “franca” visión que "Boz" Bosworth ha expresado sobre las herramientas que Meta utilizará para competir contra OpenAI, ya que la empresa liderada por Zuckerberg, prepara una “estrategia de código abierto para socavar OpenAI”, uno de los competidores más pequeños “en la construcción de modelos de vanguardia”, con el firme propósito de que Meta lance “modelos de código abierto”, que serán la competencia directa de ChatGPT.
"La presión siempre ha estado ahí desde principios de año, y creo que lo hemos visto culminar con la salida precipitada de Llama 4", habría sostenido una fuente de Meta a Wired, en la que se detalló que tras “el lanzamiento de la última familia de modelos de la compañía (...) se armó un gran revuelo porque parecía que la empresa jugaba con un punto de referencia para que otros modelos parecieran mejores de lo que eran en realidad”.

Respecto al rechazo que hubo por parte de los talentos de Thinking Machines Lab para trabajar en Meta, la publicación bimestral señaló que existen rumores sobre la posible inconformidad que hay contra quienes dirigen Superintelligence Labs, Alexandr Wang, quien fue cofundador de Scale AI; y Nat Friedman, exdirector ejecutivo de GitHub, ya que supuestamente los candidatos consideran que a Wang le falta experiencia.
No obstante, algunos de los candidatos que acudieron al proceso de entrevistas de Superintelligence Labs hablaron para Wired, a la que comentaron que “no les inspira la hoja de ruta de productos de Meta”, ya que no les pareció atractivo crear Inteligencia Artificial, a la que calificaron como"bazofia de IA", para una plataforma como Facebook y para los videos cortos conocidos como Reels
"En OpenAI y Anthropic seguirás ganando mucho dinero y las misiones giran en torno a objetivos más elevados, como crear una inteligencia artificial general que 'beneficie a toda la humanidad', comentó una de las fuentes a Wired. Estas fuentes también enfatizaron que este tipo de puestos “se ha convertido en una forma de probar el valor de mercado de uno en la industria de la IA”.
A esta situación se suma la buena financiación que respalda a Thinking Machines Lab, ya que a un año de su existencia y sin haber lanzado un sólo producto, la empresa creada por Mira Murati, “ya está valorada en 12.000 millones de dólares”. Mientras que los laboratorios de inteligencia artificial que consultó Wired se mostraron críticos ante las ambiciones de Meta, al considerar que está no tiene “una estrategia coherente”.
La revista consideró que el objetivo en este momento de Meta debe centrarse en lograr “un laboratorio exitoso”, para lo que se requiere definir “un organigrama adecuado”, ya que en este momento todo “Meta Superintelligence Labs depende de Wang”, según lo dicho por las fuentes consultadas por Wired, las cuales señalaron que tras determinar la estructura que sostendrá a este proyecto, se podría conocer más de los propósitos del mismo, “siempre y cuando Meta logre retener a los nuevos contratados”.



