La Guerra Civil que viene: el Capitán América contra la NSA

03/11/2014 - 12:00 am

Las últimas aventuras en el cine del Capitán América se aproximan a los hechos ocurridos en la saga Guerra Civil. Foto: Walt Disney Studios Motion Pictures
La franquicia del Capitán América aborda temas de vigilancia mediante el uso de la tecnología y todo indica que así seguirá. Foto: Walt Disney Studios
Motion Pictures

Ciudad de México, 3 de noviembre (SinEmbargo).- Para muchos (sobre todo actualmente), el Capitán América es un personaje acartonado: una figura proveniente de décadas atrás que más que encarnar el ideal de superhéroe acorde a esta época, resulta incómodo para muchos (lectores incluidos), defendiendo ideas abstractas de libertad y la justicia, en lugar de hacer como otros héroes que simplemente se conforman con volar en pedazos a sus enemigos y continuar su camino.

La "A" en la frente del héroe no allana las cosas para su popularidad, e incluso resulta incómoda en muchas latitudes, sobre todo en aquellos lugares en donde las bases estadounidenses han sido una publicidad pasiva (y activa) de las barras y las estrellas. Sin embargo, el hecho es que, pese a que Steve Rogers está enfundado en la bandera estadounidense, es mucho más que un estandarte de la nación más poderosa del siglo XX. Por si fuera poco, también ha demostrado ser una buena franquicia en la pantalla grande.

Hace un par de semanas, la edición digital de la revista Variety publicó que el actor Robert Downey Jr. volverá a enfundarse la armadura de Iron Man para la tercera parte de la saga del Capitán América, y se espera que este filme sea el comienzo de una nueva fase de filmes de superhéroes para el estudio Marvel.

De acuerdo con el sitio The Verge, para la segunda película del Capitán, la solución de Marvel a lo anterior fue llevar el conflicto a otro frente, planteando una discusión sobre el poder de Estados Unidos que ha cobrado mayor importancia en los últimos meses a raíz del escándalo protagonizado por Edward Snowden. Capitán América y el Soldado del Invierno (como se le conoció en Latinoamérica), fue un filme oscuro, un tanto alejado de la naturaleza del personaje protagónico; "con un pesimismo real sobre las operaciones de inteligencia de Estados Unidos, y si la tercera película sigue la trama de Guerra Civil como sugirió Marvel, veremos las cosas se ponen aún más sombrías".

Se ha hablado en las últimas semanas de lo que está por venir para el ya casi centenario héroe del escudo de vibranio y gran parte de los rumores giran precisamente en torno a Guerra Civil, la mega saga que apareció en formato de cómics entre julio de 2006 y enero de 2007 y que tiene como grandes al Capitán América y a Iron Man. Sin duda, dos de las franquicias más redituables para Marvel en la pantalla grande.

Foto: Marvel Comics
Las últimas aventuras en el cine del Capitán América se aproximan a los hechos ocurridos en la saga Guerra Civil. Foto: Marvel Comics

Guerra Civil se centra en un conflicto entre los superpoderosos de Marvel, quienes se dividen en dos bandos luego de que el gobierno de EU decide imponer la "Ley de Registro de Superhumanos" que obliga a los enmascarados a revelar sus identidades para poder operar libremente con la anuencia de los poderes de la Unión Americana.

Este evento que desencadena varias discusiones entre las que destacan las libertades civiles y el control del gobierno y en el que Tony Stark es el abanderado de los intereses nacionales, mientras que Steve Rogers lidera a los paladines que, de la noche a la mañana, quedan etiquetados como forajidos.

En la parte más alta del conflicto, el Capitán América es asesinado por agentes de Red Skull, luego de rendirse ante el gobierno y esto queda establecido como el fallo definitivo del proyecto de registro.

Hace ocho años, el crossover de Marvel era una declaración sobre la Guerra en Irak o Segunda Guerra del Golfo, sobre cómo la carrera armamentista había dejado atrás ciertos valores estadounidenses fundamentales. Sin embargo, ocho años más tarde, estos cambios se han vuelto mucho más evidentes.

Para los auténticos fans del personaje (no de aquellos que sólo lo conocen por películas) esta rebelión del Capitán representó un paso natural. El personaje, en su concepción, no se trata de un soldado que pelea por un país, representa ideas más grandes sobre libertad, democracia, libertad y luchar contra el fascismo en todas sus representaciones. El mismo Capitán lo explica mejor en El primer vengador: I don't like bullies. I don't care where they're from (No me gustan los matones. No me importa de dónde vienen).

Foto: Marvel Comics
Guerra Civil cocncluye con hechos que afectan directamente al Capitán América. Los fans esperan ver la manera en la que será tratado esto en las películas. Foto: Marvel Comics

Sin embargo, en 2014, pelear contra el fascismo parece un asunto mucho más complicado de lo que parece o de lo que fue hace 75 años. De hecho, todo parece indicar que ahora la lucha ocurre dentro del gobierno de EU o incluso en contra de éste.

Para el Capitán América, despertar de su gélido letargo significó encontrarse con un país (y un mundo) que ya no le resulta familiar y en el que los nazis que combatía en la Segunda Guerra Mundial fueron sustituidos por un gobierno que se vale de vigilancia y tecnología para identificar y eliminar a disidentes. En el universo Marvel no hay Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por sus siglas en inglés), pero en su lugar existe SHIELD con un inmenso búnker en Nueva Jersey y, para ejecutar las operaciones, se vale de portaaviones voladores, los cuales (irónicamente) se accidentan con más facilidad que un drone.

La crítica que se hace de la NSA no es del todo perfecta, pero tras ver el Soldado de Invierno es difícil abandonar el cine sin sentirse más paranoico que cuando se entra a la sala. Después de todo, la Odisea de Snowden tiene bastantes similitudes: "un adversario oscuro, una USB encriptada llena de secretos, una ayuda de último minuto para huir". Pero, por supuesto, esto no es un caso aislado y puede verse replicado en infinidad de películas de espías.

Con todo esto puesto sobre la mesa, sería un error de proporciones equivalentes a la Guerra Kree-Skrull no continuar con los paralelismos entre la historia planteada originalmente en el cómic y la tercera parte del Capitán América. Así mismo, también sería un error garrafal colocar a Iron Man (o quien quiera que encarne en esta ocasión al Némesis del Capitán) como el enemigo a vencer. Por otra parte, para las películas basadas en el universo Marvel existe un problema de inconsistencia en el que queda en evidencia que no se encuentra bien definido. No obstante, los rumores de Guerra Civil podrían cambiar esto.

Mientras tanto, el Capitán América es cada vez más oscuro y comienza a lidiar con verdaderas ideas sobre el papel de Estados Unidos en este siglo. Si Marvel juega bien sus cartas, podría ser la cosa más interesante que ha pasado en el cine de superhéroes en años.

Ramiro Rivera

Lo dice el reportero