Durante su conferencia, la mandataria federal reiteró que no existen razones para nuevos bloqueos carreteros y destacó que su administración mantiene el diálogo.
Ciudad de México, 25 de noviembre (SinEmbargo).- La Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo (CSP) aclaró este martes que no hay razón para cerrar carreteras, lo cual constituye un delito, pero subrayó que su Gobierno no perseguirá a las personas por manifestarse. Asimismo, defendió los avances que se han logrado para garantizar la seguridad para transportistas y, a la vez, el proyecto de Ley de Aguas que está en discusiones.
En conferencia matutina, la titular del Poder Ejecutivo aclaró que una declaración de la Secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, fue malinterpretada, pues no se investiga ni se pretende encarcelar a ninguna de las personas que participaron en los bloqueos de ayer.
"No tienen carpetas de investigación. Le preguntaron a la Secretaria si era un delito cerrar las carreteras, y es un delito. Pero eso no quiere decir que vayamos a perseguir a las personas por manifestarse", explicó desde Palacio Nacional.
La mandataria federal enfatizó que existen mesas permanentes de diálogo con la Guardia Nacional (GN), la Secretaría de Gobernación (Segob) y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) para atender temas de seguridad en carreteras, por lo que consideró innecesarias las protestas que bloquean vías de comunicación.
"No tendrían por qué haberse manifestado porque hay una mesa permanente de trabajo en todos los temas. El diálogo está abierto. Si no hubiera diálogo, pues entonces entiende que hagan una manifestación. ¿Para qué cerrar las carreteras si hay una mesa de diálogo?", explicó
La Presidenta mostró una gráfica sobre la disminución de denuncias de delitos en carreteras y reiteró que el objetivo es llegar a “cero robos” en todo el país.
Respecto a la Ley Nacional de Aguas, la mandataria federal explicó que la iniciativa busca garantizar el derecho humano al agua y evitar que se mercantilice, como ocurrió con la legislación de 1992.
Por ello, expuso que el Gobierno invierte recursos públicos en la tecnificación de riego agrícola para un uso más eficiente del agua, y pidió que la parte no utilizada se regrese para consumo humano.
Además, criticó que algunos distritos de riego vendan agua a municipios sin pagar derechos, lo que calificó como un privilegio que debe terminar.
Finalmente, insistió en que no hay razón para cerrar carreteras cuando existen mesas abiertas en el Congreso y en el Ejecutivo para discutir seguridad, agricultura y agua. También advirtió que su Gobierno no caerá en provocaciones de represión y que seguirá privilegiando el diálogo con la ciudadanía.
"Nosotros no vamos a caer en esa provocación. Pero que la gente sepa que no había razón para cerrar las carreteras. Cuando hay diálogo con el gobierno, no hay cerrazón, a menos que quieran defender algún privilegio", declaró.




