Pekín, 23 sep (dpa) - Dos hermanos confesaron a la policía china haber matado a una osa panda y haberse comido y vendido parte de su carne, informó hoy la agencia de noticias estatal Xinhua.
Los hombres confesaron ante las autoridades de la provincia de Yunnan, en el sur del país. Según Xinhua, mataron al animal en diciembre del año pasado y comieron parte de su carne. Sin embargo, la mayor parte se la vendieron a otro hombre que comerciaba con restos. Por el momento no se sabe a qué pena podrían ser condenados.
Los hermanos aseguraron haber matado al ejemplar por accidente, cuando intentaban cazar a un animal que había atacado a sus ovejas. Sólo se dieron cuenta de que habían matado a un panda cuando se acercaron al animal.
Hacía años que no se avistaban osos pandas en la provincia de Yunnan. Los pandas son una de las especies más amenazadas del mundo. Unos mil 600 viven en libertad, sobre todo en las montañas del sur de China, y más de 300 en cautiverio.




