En el futbol la estadística favorece a Alemania por mucho: de ocho partidos oficiales que han disputado contra la selección de Grecia, los teutones no han perdido una sola vez. Si acaso el resultado más favorecedor para los helénicos son tres empates. Fuera de ahí, todo ha sido gloria para la "Mannschaft".
El día de hoy se enfrentan alemanes y griegos en partido correspondiente a los cuartos de final de la Eurocopa 2012. El duelo se antoja fácil para los germanos, sin embargo los griegos saldrán a hacer lo que mejor les ha dado resultados en el campo desde hace ocho años: incomodar.
Hasta antes del 4 de julio de 2004 la historia de Alemania y Grecia era bastante dispar. Por un lado, los germanos habían ganado el torneo continental de selecciones en tres ocasiones, mientras que los griegos no pasaban de ser una presencia de trámite que otros equipos más dominantes tenían que sortear en las primeras rondas.
En aquella Euro los helénicos sorprendieron al mundo entero al derrotar en la final a los anfitriones portugueses y conquistar su único título europeo a base de un juego ríspido, cimentado en una defensa a ultranza y apoyado más en el sacrificio que en el talento. No es de extrañar que ninguna de sus victorias haya sido por más de un gol de diferencia.
Si hoy ganan los griegos no sería la primera vez que callasen bocas. Sin embargo, incluso ocho años después, la historia entre ambas selecciones sigue percibiéndose dispareja. La hazaña de Grecia en Portugal no deja de ser considerada por muchos como una obra de la casualidad, por lo que este encuentro es el que –en teoría– luce como el más desangelado en la actual fase del torneo.
Grecia ni con un campeonato a cuestas ha dejado de ser una de tantas cenicientas de las Euro; mientras que Alemania –como dijo una vez Gary Lineker– es el equipo que siempre gana todo.
No sorprende que cuando se piense en alemanes y griegos juntos, lo primero que venga a la mente sea cualquier cosa menos futbol.
