
Ciudad de México. 10 de ene (SinEmbargo).- Por medio de Google Earth, un grupo de activistas puso en evidencia la existencia de campos de concentración en Corea del Norte, coincidentemente los hallazgos se empataron con la visita de Eric Schmidt, el presidente ejecutivo de Google, al país asiático.
Activistas, blogueros y organizaciones en pro de los derechos humanos utilizaron la aplicación de Google que resultó en el descubrimiento de al menos seis campos de prisioneros distribuidos en el territorio norcoreano.
De acuerdo con la Comisión de Derechos Humanos en Corea del Norte, se estima que, actualmente en territorio norcoreano, un aproximado de 200 mil personas se concentran en este sistema de detención y que 400 mil han muerto en estos campos debido a torturas, hambre, enfermedades y ejecuciones.

Estos reportes se agravan en el contexto que estima que corea del Norte ha confinado a entre 600 mil y dos millones 500 mil de sus ciudadanos para morir de inanición, mientras que ocupa sus recursos en armamento y lujos para élite gobernante; lo que supondría una de las más grandes atrocidades en el mundo que actualmente están en curso y quizás la más catastrófica en la historia de la Tierra desde el fin del régimen de los Jemeres Rojos en 1979 en Campuchea.
En el informe dado a conocer por el abogado Joshua Stanton en su blog One Free Korea, identificó la ubicación exacta de los centros penitenciarios, imágenes de las viviendas donde habitan los guardias e incluso minas de carbón cercanas y cementerios, todo corroborado por expertos y entrevistas a disidentes del régimen norcoreano que vivían o trabajaban en los campos.
Stanton empezó a interesarse por la situación de Corea del Norte mientras sirvió en el ejército norteamericano en Corea del Sur a finales de la década de los 90, periodo en el que también una hambruna azotó al pueblo de Corea del Norte.

La Agencia Nacional de Seguridad norcoreana dirige la mayoría del sistema de campos, otros, mientras que otros están operados por la Agencia de seguridad Popular (Inmin pohan seong o "anjeon bu"). A excepción de las oficinas locales de Anjeonbu y Bowibu, la mayor parte de los campos de trabajo y concentración son divididas en tres clasificaciones:
1. Los kwan-li-so (campos de prisioneros políticos).
2. Los kyo-hwa-so o campos de trabajo y re educación.
3. Campos regionales de trabajo y entrenamiento.
Sin embargo, de acuerdo con el blog, la lista de campos no es definitiva; testigos han descrito un número más elevado de prisiones y campos de tipo regional y de kyo-hwa-so.
La Comisión de Derechos Humanos en Corea del Norte, ya había dado a conocer los campamentos en 2003, en el libro The Hidden Gulag. No obstante, desde septiembre de 2011 la presencia de estas prisiones masivas fue desvelado por primera vez por Google Earth, dirigiendo los reflectores al país asiático y desmintió entonces las declaraciones del fallecido mandatario Kim Jong-Il, quien en repetidas ocasiones negó la existencia de estos campos.
One Free Korea, por su parte, reporta el uso de cámaras de gas prototípicas y experimentación con seres humanos en algunos de estas concentraciones, aunque no existe la evidencia de que estos lugares alberguen operaciones de exterminio a gran escala como en la Segunda Guerra Mundial.
Sin embargo, lo que sí es evidente es que estos campos no existen meramente para castigar y aislar a disidentes potenciales, sino que juegan un papel importante en el desarrollo de armas nucleares, dada la proximidad de algunos de estos centros con lugares de pruebas nucleares y de misiles.





