
Ciudad de México, 11 agosto (SinEmbargo).- Se llama Carlos y se apellida Gatica, como su famoso abuelo, el legendario cantante Lucho Gatica. De profesión cantante, el muchacho acaba de lanzar un disco que lleva su nombre y que refrenda el amor por la música inculcado por su ilustre pariente.
Dice que no le pesa el nombre de su abuelo y que por el contrario, le enorgullece honrar la tradición en un trabajo que todavía no ha presentado en vivo en escenarios mexicanos, pero que espera ansiosamente poner al arbitrio de sus compatriotas.
Claro que por el lado paterno tampoco lo tenía fácil, pues es el hijo de Carlos Hermosillo, el recordado goleador de la primera división mexicana, que ha dejado también la bandera tricolor en alto con su desempeño histórico en la selección nacional.
Carlos, el cantante, reconoce que lo suyo era la pelota o la balada y se decidió por esta última, aunque admite ser un “pambolero” irredento, de esos que ha sufrido más por las peripecias del Cruz Azul que por las chicas.
A unos meses del lanzamiento de su primer álbum homónimo, Carlos Gatica presenta el segundo sencillo de esta producción, titulado "No vale la pena", cuyo video fue grabado hace unas semanas en Tokio, Japón, bajo la dirección de Nunca Pepe.
El cantante y el director trabajaron durante varios días en la realización de este clip, en el cual Carlos aparece en las calles de Tokio, Japón, tanto en la zona nueva como en la antigua.
Otros temas que conforman la primera producción de Carlos Gatica fueron compuestos por artistas de la talla de Río Roma, Noel Schajris, Leonel García, David Bisbal, Claudia Brant y Mónica Vélez.

Aunque apenas inicia su andar en el camino de la música, ya ha logrado enfrentar con éxito al público, al abrir los conciertos de Ha-Ash y Río Roma en el Auditorio Nacional y Teatro Metropolitan, respectivamente, además de los shows de María José en el Coloso de Reforma y en el Auditorio Telmex de Guadalajara, Jalisco.
– Muchos cantantes que recién empiezan lo tienen más fácil que tú. Al menos no tienen que llevar un apellido tan ilustre…
– Es verdad. No lo tomo como un peso, es un orgullo muy grande y a la vez una responsabilidad importante tener el apellido Gatica. No cualquiera, además, tiene la suerte de tener al lado a una persona como mi abuelo, que me ha dado consejos, que me ha enseñado a hacer las cosas de la mejor manera. Es mi maestro.
– Humberto Gatica, el productor, también es familia
– Sí, es mi tío y trabajar con él ha sido también algo muy ventajoso para mí. Tiene un bagaje muy importante en el mundo de la música. Gracias a él y a mi abuelo, a quien tengo la suerte de tener en mi casa, pudo ser posible mi primer disco.
– ¿Qué ha dicho Lucho Gatica de tu primer disco?
– Fíjate que él ha estado muy involucrado en todas las etapas del disco. Me iba marcando errores y aciertos, por lo cual le estoy muy agradecido.
– ¿Y qué dice tu padre?
– Bueno, él hubiera preferido que me dedicara a las patadas (risas) Hablando en serio, tanto él como mi madre me han apoyado mucho, me han cobijado, me han dado la confianza como para que me volcara a lo que más me gusta en la vida, que es la música.

– ¿Cómo nació la idea de grabar tu video en Tokio?
– Fue una hermosa oportunidad, la verdad. La idea se le ocurrió al director, porque él vivió un tiempo allá y creía que la atmósfera de la canción “No vale la pena” se iba a desarrollar plenamente allí. Cuando me contaron la idea, pensé que me hablaban de la calle Tokio, no de la capital de Japón. La verdad que no me lo creía, pero como el disco y el primer sencillo, “¿Cómo te explico?”, anduvieron bien, se pudo concretar el viaje.
LOCO POR EL FUTBOL
Aunque no ha sido futbolista como su padre, Carlos Gatica se considera un loco por el futbol, una materia que le fascina tanto como la música.
– ¿A qué equipo le vas?
– ¡Al Cruz Azul! Y siempre lo digo: a mí no me hacen sufrir las mujeres, me hace sufrir el Cruz Azul. Siendo de ese equipo, estoy preparado para cualquier cosa. De chico me mandaban a entrenar a La Noria y el futbol es una parte muy importante de mi vida.
– Has vivido rodeado de gente famosa y sabrás lo voluble que es la fama…
– Sí. Intento aprender lo más que puedo de las experiencias de mi abuelo, de mi padre, de mis tíos…nací con la conciencia de que no puedes engañar al público, de que siempre debes mostrarte tal cual eres. Hay buenos y malos momentos, lo que no hay que cambiar es el convencimiento de que lo que haces es lo que debes y quieres hacer.
– ¿A los 24 años has podido tomar tus propias decisiones en torno al primer disco que acabas de lanzar al mercado?
– Bueno, siempre había querido cantar baladas porque desde chico me he sentido identificado con la música romántica, así que cuando entré al estudio de grabación estaba muy convencido de lo que quería lograr. Eso no quita que al empezar tienes que tener sobre todo la suficiente humildad como para saber escuchar a las personas que tienen más experiencia que tú en el mundo de la música.
– ¿Y estás conforme con el resultado?
– Se trata de un disco para el que he estado trabajando durante dos años. Hay canciones mías, hay canciones de compositores que admiro mucho y he intentado de dar lo mejor de mí en las interpretaciones. Cuando lo escuché, sentí esa satisfacción del sueño logrado. El disco me representa perfectamente, ese es el cantante que soy y que quiero ser.




