La lista de “impresentables” en Morena no se limita únicamente a los cuadros externos que han llegado en los últimos años, sino que el partido ha contado con sus propios cuadros que ya estaban dentro desde hace muchos años y que, a pesar de denuncias de corrupción y escándalos, se mantienen vigentes y con cargos públicos.
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Ciudad de México, 2 de marzo (SinEmbargo).– El año 2018 marcó un hito en la historia moderna del país. Andrés Manuel López Obrador llegó a la Presidencia del país en su tercer intento y Morena, partido que él fundó, comenzó su expansión que hoy lo mantiene como la principal fuerza política. Aunque la ola obradorista de ese año no sólo llevó al poder a los cuadros fundadores de este movimiento, en la inercia se incrustaron todo tipo de perfiles, unos incluso dejaron a la 4T antes de que finalizara su primer Gobierno como es el caso de Germán Martínez y Lilly Téllez votados como abanderados del morenismo y hoy convertidos en dos furibundos críticos de la izquierda.
En realidad, no son los únicos. Desde su arribo al poder, Morena se ha visto infiltrado por elementos con una agenda propia, contraria a los preceptos establecidos en el partido guinda, pero sobre todo contra los de obradorismo. Desde ese 2018, las desafiliaciones de perfiles cuestionables se dispararon y en seis años alcanzó la cifra de 138 desafiliaciones. Las cifras de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia (CNHJ).
“Se ha planteado que son casos excepcionales, un prietito en el arroz, sin embargo ya lleva demasiado tiempo, no es una política de solo un voto o un tema como es el caso de la ley contra nepotismo y reelección, sino una característica que corre el riesgo de volverse estructural al interior de Morena y de Morena con sus aliados”, comentó César Enrique Pineda, profesor e investigador de la UNAM en entrevista con SinEmbargo Al Aire.
La Comisión de Morena canceló en 2018 la afiliación de 22 morenistas de Quintana Roo porque en 2016 llamaron a militantes a apoyar a Mauricio Góngora Escalante, excandidato a Gobernador de la alianza PRI, Partido Verde y Nueva Alianza y quien fue detenido en 2018 por los delitos de peculado y desempeño irregular de la función pública.
Sobre la cancelación de afilaciones en 2018, la CNHJ concluyó que en 2016 los 22 exmorenistas llamaron a militantes a apoyar a Mauricio Góngora Escalante, excandidato a Gobernador de Quintana Roo de la alianza PRI, Partido Verde y Nueva Alianza, y quien fue detenido en 2018 por los delitos de peculado y desempeño irregular de la función pública; mientras que otros respaldaron al excandidato a Gobernador de la coalición PRD-PAN, Carlos Joaquín González. Ese mismo año, Mirella Ornelas García y John Granados Ornelas fueron expulsados porque fueron postulados a cargos en Nuevo León pero con el PRD.
Ese mismo año, paradójicamente, Morena respaldaría a Cuauhtémoc Blanco Bravo, impulsado en un principio por el evengélico Partido Encuentro Social (PES), aliado extinto del partido guinda, que dejó una gestión en Morelos marcada precisamente por el desempeño irregular de la función pública. Junto a esa camada de gobernadores que llegaron con López Obrador en 2024, también destacaría su paisano Adán Augusto Hernández López, hoy coordinador de los senadores de Morena y defensor de la afiliación del expanista Miguel Ángel Yunes Márquez.
“Mas allá del número de votos que pueden traer personajes populares o que son desprendimientos de otros partidos el problema es cómo esos desprendimientos pueden generar problemas. Por un lado tenemos peligros de corrupción e involucramiento en las capas bajas del Estado del crimen organizado, pero por el otro es alimentar un ala derecha adentro de Morena que ya lo hemos visto expresarse en varios momentos”, expresó al respecto el académico Pineda.
Para 2019 la CNHJ de Morena también expulsó a Roberto Martínez Aragón, exregidor de Isla Mujeres y al militante Jorge Gamaliel Gómez Uitzil, quienes criticaron la designación de candidatos en esa entidad con trayectoria en el PRI.
La comisión también votó por cancelar la afiliación de los diputados veracruzanos Jessica Ramírez Cisneros, José Magdaleno Rosales Torres y Augusto Nahúm Álvarez Pellico por no respaldar la propuesta de juicio político contra el exfiscal General de Veracruz, Jorge Winckler Ortiz, pero los tres se ampararon ante Tribunal Electoral del Poder Judicial y fueron restituidos en el partido, incluso Álvarez Pellico actualmente es Presidente municipal de Ixtaczoquitlán.
Sin embargo, no todos los casos han llegado a la desafiliación, en algunos casos porque han orbitado a la 4T en torno a sus aliados. En ese sentido, nombres como Eruviel Ávila, Alejandro Murat, Luis Miranda Barrera, Eugenio Hernández Flores, René Vivanco, Manuel Espino, Rommel Pacheco, Jorge Carlos Ramírez Marín, Sergio Mayer, José Chedraui, Jorge Estefan Chidiac, Clara Luz Flores, Pedro Haces Barba o Jorge Luis Lavalle Maur son ejemplos de esos personajes que, desde hace meses y años, han sido señalados como perfiles impresentables que se han sumado a la Cuarta Transformación.
Precisamente uno de los casos más recientes, por ejemplo, fue el de Jorge Luis Lavalle Maury, quien todavía enfrenta un proceso penal por los sobornos de Odebrecht y fue beneficiario de los 14 millones de pesos que Francisco García Cabeza de Vaca le pagó con recursos públicos de Tamaulipas para defenderlo de acusaciones de delincuencia organizada. A él lo sumó a su administración como titular de la Secretaría de Desarrollo Económico la Gobernadora Layda Sansores San Román, una de las fundadoras del movimiento.
La lista de “impresentables” en Morena no se limita únicamente a los cuadros externos que han llegado en los últimos años, sino que el partido ha contado con sus propios cuadros que ya estaban dentro desde hace muchos años y que, a pesar de denuncias de corrupción y escándalos, se mantienen vigentes y con cargos públicos. Tal es el caso del Diputado Pedro Haces.
A Haces Barba lo ha acompañado de tiempo atrás. En 2019, por ejemplo, cuando era Senador por Morena, aseguró que las mujeres deben ser un poco menos provocativas en el área de trabajo, pues con su atuendo son ellas las que, según él, fomentan y propician el acoso. Ahora es el vicecoordinador de Morena en la Cámara de Diputados y mano derecha de Ricardo Monreal.
Otra de las polémicas que rodea a Haces Barba es su lujoso estilo de vida, el cual contrasta con la política de austeridad republicana promovida por el movimiento de la llamada 4T. Al sindicalista se le ha visto antes en eventos exclusivos como corridas de toros en Sevilla y el Gran Premio de Fórmula 1 en Miami, lo que ha generado críticas sobre su coherencia con los principios de austeridad del partido oficialista.
“Morena debería cuidar su proceso de integración y sus procesos de nominación basados en cuadros formados al menos desde un horizonte nacional popular, si es posible también desde ciertos principios históricos de la izquierda y sanear completamente su partido hoy infiltrado por una infiltración corrupta, por supuesto esto no llena todas las estructuras del partido, ni significa que todos los candidatos son de este tipo, sin embargo, sí implica eliminar el peligro de que mas adelante Morena pueda fortalecer esa ala derecha e ir eliminando a un partido atrapa todo, que eso es en lo que se ha convertido Morena, ir trasladándolo en un partido nacional popular, en un partido de izquierdas”, expuso César Enrique Pineda.
En 2020, el partido resolvió la expulsión de Ignacio Cuitláhuac Cardona Campos, dirigente de Aguascalientes, porque un año antes trató de incluir de manera extemporánea a cuatro personas a la lista de solicitudes de registro a candidaturas aprobada por la Comisión Nacional de Elecciones, además de que solicitó el cambio de género de candidatos de los municipios Jesús María y Calvillo “por considerar que los varones tienen un mejor perfil competitivo”, no acciones para las que no tenía facultades y que fueron comprobadas por la CNHJ.
De igual forma, en 2020 la comisión canceló la afiliación de María Teresa Camarena Herrera, quien anunció en 2018, mientras ejercía como Secretaria de Finanzas de Morena en Nayarit, su respaldo a la campaña de Jasmin Bugarín, candidata del PRI a Senadora.
