Meghan Quinn, autora de comedias románticas que han sido superventas en USA Today y Amazon, trae una nueva historia sobre nuevos comienzos y la búsqueda del idealizado "felices para siempre". Se trata de Padrino fugitivo, publicada en México por VR Editoras.
Ciudad de México, 23 de julio (SinEmbargo).– Sawyer Walsh es un guionista de Hollywood y como tal sabe reconocer una buena historia de amor en cuanto la ve. Claro, solo cuando se trata de su trabajo, no en la vida real. Ahí es un desastre. Esta situación lo lleva al pie del altar mientras su exnovia se casa con su mejor amigo.
Es entonces cuando la presión, el resentimiento, la cobertura mediática se vuelve demasiado y, antes de que se dé cuenta, huye de todo, dejando a una congregación conmocionada y cámaras en su camino y en busca de calma y de pasar desapercibido, aterriza en el encantador pueblo de Canoodle, California.
En este lugar se cruza con Fallon Long, quien administra las Cabañas Canoodle Cove, un negocio familiar y la nueva residencia temporal de Sawyer.
El complejo va a pique, una situación que abruma a Long al igual que las renovaciones que debe de hacer junto a una larga lista de responsabilidades. Así, mientras Fallon lucha por llegar a fin de mes intenta devolver las cabañas a su brillo original.
Así que cuando Sawyer llega, agradece los ingresos viéndolo como un espécimen más de la fauna de Hollywood, hasta que él empieza a demostrarle lo contrario. De esta manera y a medida que Fallon está más cerca de salvar el negocio familiar, se forma un vínculo innegable entre ella y el guionista.






