En “Hello, Welcome Back”, el artista introduce también el concepto de “la puerta” como símbolo de transición, inspirado en figuras arquetípicas. Estas puertas aparecen como guardianas del cambio, preguntándonos: ¿Qué estamos listos para dejar atrás? ¿Qué estamos protegiendo? ¿Qué estamos por descubrir?
Ciudad de México, 3 de diciembre (SinEmbargo).- El artista plástico mexicano, Jorge Tellaeche, cuenta con una nueva exposición titulada “Hello, Welcome Back” que se encuentra en PALI Galería y marca un momento significativo tanto para el artista como para la galería al ofrecer al público un espacio donde el arte contemporáneo se viva con emoción, autenticidad y profundidad.
La exposición está compuesta por 12 piezas, que van del pequeño al gran formato, una instalación central (una mesa con planos) y una intervención directa sobre un muro de la galería, creando una experiencia envolvente y única. Con una estética vibrante y sensible, Tellaeche continúa su exploración de los “templos”, no como estructuras sagradas tradicionales, sino como representaciones de nuestra arquitectura interior: lugares para la introspección, la contradicción, el deseo y la transformación.
Esta muestra representa "la emoción de regresar a ese espacio en el que platicas contigo mismo", en palabras del artista. "La exposición se llama 'Hello Welcome Back' porque quería que desde el principio entendiéramos que estos templos son lugares en donde constantemente vamos a ir regresando, y entre más regresemos más sabemos cómo utilizarlos y cómo vivirlos”, dijo Jorge Tellaeche.

Espacios prácticos
Las formas de estas obras —que evocan lo orgánico y lo mecánico— ofrecen espacios para la empatía, la reflexión y la toma de decisiones energéticas. No se trata de escapar de la realidad, sino de atravesarla con intención. Estos templos y puertas no son silenciosos retiros, sino interiores salvajes donde se permite sentir plenamente, reír, llorar y recordar cómo seguir adelante.
En esta muestra, Jorge propone entender a los templos como espacios prácticos “en donde nos podemos escuchar a nosotros mismos, sin criticarnos y sin compararnos con lo que nos rodea. Es un espacio en donde nuestra individualidad es celebrada y es un espacio en el que, a diferencia de cómo conocemos los templos tradicionales que nos restringen y nos limitan, aquí es lo contrario, son estos espacios de caos, de autoproyección, en donde podemos cuestionarnos, en donde nos podemos perdonar por no ser lo que pensamos que tenemos que ser”.
"Son unos cuadros muy divertidos, con muchísimo color, con mucho sentido del humor. Son pinturas un poco diferentes a lo que he estado exponiendo, son un poco más abstractas y lúdicas, no necesariamente a todas les encuentras una estructura en particular, sino como muchas cosas pasando y esa es la idea de la mecánica de estos templos, van generando cosas diferentes, colores diferentes, brillos diferente, hay ciertos contrastes de oscuridad y de luz", compartió el artista.
PALI Galería se encuentra en Álvaro Obregón 6A, Roma Norte; la exposición estará disponible hasta finales del 2025.




