El gobierno de Trump presionó a México para cumplir con el acuerdo de agua con EU, tanto en el déficit del periodo anterior como en los próximos años.
Ciudad de México, 26 de noviembre (SinEmbargo).– El Gobierno de Estados Unidos (EU) presionó a México para que cumpla con la entrega del agua, tanto para "compensar el déficit" del periodo 2020-2025, que concluyó en octubre, así como cumplir con lo acordado para el siguiente quinquenio, de 2025 a 2030, dentro del Tratado de Aguas de 1944 que obliga al país a entregar un volumen determinado del líquido al vecino del norte.
"Los funcionarios examinaron los recursos hídricos disponibles y Estados Unidos presionó para que se entregaran los máximos suministros posibles a los usuarios de Texas. Hemos solicitado información adicional y nos reuniremos nuevamente para considerar opciones adicionales", señaló en un comunicado el Departamento de Estado de EU.
"El Presidente Donald Trump y el Ssecretario de Estado, Marco Rubio, han sido claros en que México debe cumplir con sus obligaciones en virtud del Tratado de Aguas de 1944, incluyendo compensar el déficit de aproximadamente 865 mil acres-pies durante el ciclo quinquenal 2020-2025 y cumplir con los requisitos de suministro en el ciclo 2025-2030", añadió.

El Departamento de Estado estadounidense detalló que esto "incluye un plan para cumplir de forma fiable con los requisitos del tratado de agua, considerando las necesidades de los usuarios de Texas". "Mantenemos nuestro compromiso de colaborar con México para resolver este problema por la vía diplomática mientras evaluamos todas las opciones disponibles para garantizar que México cumpla con sus obligaciones de suministro de agua", amagó.
Los funcionarios del Departamento de Estado, el Departamento de Agricultura y la Comisión Internacional de Límites y Aguas de EU se reunieron en las últimas semanas con sus homólogos mexicanos para discutir las medidas inmediatas y concretas que México tomaría para reducir el déficit en el suministro de agua y garantizar el cumplimiento del acuerdo binacional.
En abril, el gobierno de Trump llegó a un acuerdo con México para poner fin a varias semanas de tensión sobre el adeudo de agua que tiene el Gobierno mexicano, en el marco del Tratado de Aguas de 1944. El acuerdo, anunciado por el Departamento de Estado de EU, estableció que México transferiría agua de embalses internacionales, además de aumentar la cuota estadounidense en seis afluentes mexicanos del río Bravo.
Sin embargo, la Presidenta Claudia Sheinbaum aseguró en ese momento que México cumplirá con sus compromisos internacionales en materia hídrica “hasta donde se pueda”, y destacó que este cumplimiento no será a costa del abasto para la población mexicana ni del sector agrícola.
“Se hará la entrega del agua que se debe, pero hasta donde sea posible, considerando las condiciones técnicas y climáticas actuales”, dijo la Presidenta Sheinbaum Pardo durante una conferencia matutina a finales de abril.
La Presidenta de México destacó que este pacto incluye una reunión anual de seguimiento, así como medidas adicionales para mejorar la eficiencia del riego agrícola y el uso del agua en las regiones fronterizas: "Nuestro compromiso es con el uso sustentable del agua y con garantizar este recurso para futuras generaciones”.
La severa sequía que ha afectado el norte de México, particularmente en Chihuahua, ha limitado la capacidad del país para cumplir con estas entregas, acumulando un adeudo de aproximadamente mil 520 millones de metros cúbicos para el ciclo que finaliza el 24 de octubre de 2025.
La Presidenta Claudia Sheinbaum ha abordado la situación en múltiples ocasiones, además de afirmar que México cumplirá su adeudo sin comprometer el abasto de agua para los productores nacionales.
¿Qué es el Tratado de Aguas de 1944?

El Tratado de Aguas, firmado en 1944, establece que México debe entregar un promedio de dos mil 158 millones de metros cúbicos de agua cada cinco años a Estados Unidos, provenientes principalmente de los ríos Tijuana, Colorado y Bravo desde Fort Quitman, Texas, hasta el Golfo de México.
Este acuerdo establece asignaciones específicas para cada país, y otorga a la Comisión Internacional de Límites y Aguas (CILA) la responsabilidad de resolver conflictos relacionados con el uso de estos recursos.
Sin embargo, la sequía y el cambio climático ha dificultado el cumplimiento total de esta obligación en los últimos ciclos.




