
Tamara rememora el pasado inmediato, centrada en una experiencia de corte sentimental: la renuncia-renuencia a entregarse. Imposibilidad no del amor sino de amar. Tamara vive como Miller respecto a June hacia el final de su relación, “la prolongación de un ímpetu que no puede detenerse bruscamente”.
Una mujer confrontando a sus demonios. El recuerdo de su amante Mateo. Egotismo. Displicencia. Y como si sólo se tratase de una realidad provisional, se abandona a ese estado de ánimo conocido como abulia.
La atmósfera que rodea y que viste a Tamara no es otra sino la inexorable soledad del ser humano, y aquello que los franceses llaman ennui.
.............................................................................................................................................................................................






