Al igual que sucedió con las bolsas de valores a nivel mundial, la popularidad del Presidente Donald Trump se hunde tras la imposición de aranceles estadounidenses a todo el orbe.
Ciudad de México, 5 de abril (SinEmbargo).– El Presidente Donald Trump provocó un infierno para el valor de las acciones en Estados Unidos y el mundo. Y, entre ese fuego candente –en sólo 48 horas– quemó 6.6 billones de dólares, una fortuna épica, nunca antes vista, con su decisión de imponer aranceles hasta el último rincón del orbe, dice esta mañana el diario The Wall Street Journal.
El fuego abrasador que envolvió a las bolsas de valores del planeta, sin embargo, no parece tener visos de amainar. Este sábado (a las 00:00 horas) entró en vigor el arancel mínimo de 10 por ciento sobre gran parte de los productos que ingresan a EU, otra carga de combustible que no hará sino azuzar las llamas del caos económico, bursátil y geopolítico en el que Trump ha metido al mundo.
Esta tarifa aduanera que hoy es una realidad se suma a los impuestos existentes, pero algunos bienes quedan exentos como el petróleo, el gas, el cobre, el oro, la plata, el platino, el paladio, la madera de construcción, los semiconductores, los productos farmacéuticos y los minerales que no se encuentran en suelo estadounidense. Las importaciones de acero, aluminio y automóviles tampoco se ven afectadas, porque ya están sujetas a recargos de 25 por ciento.

Rosie Ettenheim/WSJ
Por supuesto que este caos ya tiene consecuencias negativas para el Presidente estadounidense. Su popularidad también merma a medida que ha decidido destrozar las ganancias de millones de personas en el mundo, especialmente de sus propios compatriotas. El propio WSJ publica una encuesta donde la mayoría, más del 52 por ciento, dice que Trump va en la dirección incorrecta, contra un 44 por ciento que sigue dándole su apoyo. Esta diferencia de 8 puntos eran inconcebible hace apenas tres semanas.
Y es que fabricantes y minoristas, exportadores e importadores, alta y baja tecnología, las empresas más poderosas de todos los sectores y los fondos de inversión –como Apple, Meta, Boing, Devon Eneegy, Apollo Global Management, Tesla y un largo etcétera– vieron quemar el valor de sus acciones en dos días ante el susto y el enojo.
Por ejemplo, plantea WSJ, en esas 48 horas el grupo de “Las Siete Magníficas”, los corporativos de acciones tecnológicas y cuyos multimillonarios dueños apoyaron a Trump para llegar por un segundo periodo a la Casa Blanca, perdió alrededor de 1.6 billones de dólares en valor de mercado, según Dow Jones Market Data.
"Para los operadores, gestores de fondos y banqueros de Wall Street, una semana que comenzó con la ansiedad previa a lo que Trump promocionó como el "Día de la Liberación" terminó con pavor. Tras una pronunciada caída el jueves, el Dow Jones cayó otros 2 mil 200 puntos el viernes, ya que las represalias de China contra los aranceles de Trump aumentaron la amenaza de una prolongada guerra comercial global”, expuso el diario neoyorquino en un análisis de la situación realizado por Vicky Ge Huang, Cristal Hui y Gunjan Banerji.

Y es que China informó ayer que impondría un arancel adicional del 34 por ciento a todos los bienes estadounidenses importados a partir del próximo 10 de abril. Y Trump, bravucón como es, respondió: "China se equivocó, entró en pánico”, un mensaje frontal que evidenció su nula intención de negociar.
"Los gravámenes generalizados del Presidente sobre las importaciones de bienes de prácticamente todos los socios comerciales de EU dejaron a los inversores conmocionados y temerosos de una recesión. Les cuesta imaginar cómo será el mundo dentro de un mes, y mucho menos dentro de un año”, plantearon los periodistas de The Wall Street Journal.
“Estamos en un período de vómitos autoinducidos; esa es la mejor manera en que puedo resumir lo que sucedió esta semana”, le dijo al diario neoyorquino Callie Cox, estratega jefe de mercado de Ritholtz Wealth Management.
Adam Phillips, director gerente de EP Wealth Advisors y otro de los especialistas consultados por WSJ, había advertido a sus clientes que se prepararan para un 2025 con altibajos tras dos años consecutivos de éxitos del Standard & Poor's 500. Pero nadie, ni siquiera él, vio venir esta ola de ventas. Cuando los clientes nerviosos necesitaron tranquilidad esta semana, se apresuró a grabar un video: "No se precipiten", dijo. "Ni siquiera recuerdo haberlo hecho antes", dijo Phillips. "La situación se estaba intensificando muy rápidamente".
Además, los economistas de los bancos globales presentan una perspectiva más pesimista sobre la economía, y muchos han aumentado sus pronósticos de recesión. Los de JPMorgan Chase elevaron ayer la probabilidad de una recesión en la economía global de entre 40 y 60 por ciento.
"Los operadores han aumentado sus apuestas sobre recortes de tasas de interés este año, con la expectativa de que la Reserva Federal intervendrá ante las primeras señales de una economía tambaleante. En un discurso pronunciado el viernes, el presidente de la Fed, Jerome Powell, afirmó que el banco central podría abordar cualquier consecuencia de los aranceles de Trump para garantizar que los aumentos puntuales de precios no provoquen una inflación persistentemente más alta”, comento WSJ.
Encima, el indicador de miedo de Wall Street mostró el viernes pasado señales de alerta: el índice de volatilidad CBOE, o VIX, alcanzó su nivel de cierre más alto desde abril de 2020, según Dow Jones Market Data.
“Creo que este es el mayor error político en 95 años”, declaró ayer Jeremy Siegel, profesor de la Wharton School, en entrevista con la cadena CNBC. “Es una herida autoinfligida. Es un error innecesario; no tenía por qué ocurrir”.
Ahora, todo está en manos de un Presidente que ha demostrado no tener la menor intención de dar un paso atrás. No, al menos, hasta este momento de análisis y de pérdidas devastadoras. Para Trump su prioridad es agradar a sus seguidores y, según él, cumplir sus promesas de campaña.Y eso es lo más asusta a los mercados y sus inversionistas. Es el fuego que está arrasando fortunas y la estabilidad en el mundo.




