Paisajes hermosos y verdes, rica comida y una gran experiencia especial para quienes aman el contacto con la naturaleza.
Ciudad de México, 28 de junio (SinEmbargo).- La naturaleza es impresionante y siempre nos sorprende con su belleza. Para los amantes de naturaleza, quienes buscan una experiencia inolvidable, ¿qué tal hospedarse casi en las faldas de un volcán pero sin dejar de lado las comodidades y exclusividad?
Costa Rica es un lugar lleno de biodiversidad que destaca por su turismo sostenible y por ofrecer experiencias de calidad que dejan una huella en quien visita ese bello país y por supuesto que cuentan con hospedaje cerca de un volcán.
Si hablamos de volcanes en el país tico hay que mencionar el Volcán Arenal , una de sus principales atracciones; ubicado en La Fortuna de San Carlos -el norte del país-, una zona con flora y fauna que asombran y emocionan a quien lo visita, un clima principalmente lluvioso que mantiene todo verde y con parajes exuberantes, llenos de vida.

El Volcán Arenal es considerado como uno de los volcanes más bellos del mundo y desde diciembre del 2010 no registra erupciones. Su historia involucra a las tribus precolombinas que lo observaban con asombro y lo consideraron un área sagrada.
Otro de los grandes atractivos de la zona es el lago, un enorme cuerpo de agua ubicado cerca del volcán; un lugar ideal para maravillarse durante las tardes al ver la puesta del sol sobre el agua. Un dato interesante es que este genera el 40 por ciento de la energía hidroeléctrica de Costa Rica, un ejemplo de cómo el país produce energía de manera limpia y eficiente.

Acampar con mucho estilo
En la zona se encuentra Nayara Tented Camp para ofrecer una experiencia diseñada de manera excepcional para los viajeros que buscan destinos exóticos y vivencias únicas pero con mucha exclusividad.
Un espacio que cuenta cuida el balance del entorno natural de las cercanías del volcán. Sus instalaciones comprenden 21 unidades con capacidad hasta para cuatro personas que disponen de cama King, dos sofás, un muy amplio baño y lo que podría ser la cereza del pastel: una piscina propia con aguas termales naturales y duchas al aire libre.
En este lugar es posible alojarse en una "carpa" de lujo estilo safari, sumergida en una selva tropical, con una privilegiada vista al volcán. Un selvático resort en el que se cuida al máximo todos los detalles para que los visitantes disfruten al máximo su estadía. Al ser parte de Nayara Resort, el visitante puede utilizar las amenidades colectivas del lugar, en el que destaca una muy selecta oferta gastronómica con cinco diferentes tipos de restaurantes.

El área de glamping posee una serie de albercas escalonadas al aire libre con diferentes temperaturas producto de las aguas termales, ya que los terrenos de Nayara están llenos de vida salvaje, donde puedes ver perezosos, monos, plantas tropicales, heliconias, orquídeas y hasta cacao y plátanos.




