Gracias a su premio en Cannes, " Después de Lucía se ha vendido a 20 países

02/06/2012 - 8:53 am

MÉXICO, D.F., 1 De junio (apro).- Casi aterrizando a México, luego de obtener el premio por mejor película con Después de Lucía en Una cierta mirada, sección oficial del Festival Internacional de Cine de Cannes, Michel Franco da la noticia de que ha vendido la cinta a por lo menos 20 países.

Con ánimo expresa que lo consideran entre los directores más importantes del mundo, “y eso está muy bien, lo estoy disfrutando”.

--¿Qué siente que lo miren así?

--Estoy dispuesto a aprovechar la oportunidad que eso significa, pero también sé que es algo subjetivo. Siempre habrá gente que le guste más un director que otro, pero mientras a mí se me considere en ese grupo y eso me ayude a rodar con más facilidad las historias que tengo en mente, está perfecto.

Desde la primera proyección, Después de Lucía conmovió. Franco mismo dice que mucha gente salió llorando. Desde ese instante despertó el interés del jurado de esa sección, presidido por el cineasta británico Tim Roth, quien la calificó como “una obra maestra”.

El destacado realizador mencionó al anunciar el premio:

“La razón por la que vengo a Cannes y acepto ser jurado es para descubrir cosas extraordinarias y esta película lo tiene todo. La premiamos por el desempeño de sus actores, por su técnica, por el guión, por su visión.”

El reconocimiento de Una cierta mirada consiste en ayudar a la difusión del largometraje en Francia.

“Existe un compromiso para que se proyecte en este país europeo en por lo menos treinta o cuarenta salas de cine. Ya es una realidad la película”, subraya Franco.

La trama se enfoca en Alejandra (Tessa Ia González), una adolescente que se muda al Distrito Federal con su padre (Héctor Mendoza), a raíz de la muerte de su madre, y en la preparatoria a la que acude es víctima de bullying.

Franco ya había participado en Cannes de 2009 con su primer filme, Daniel y Ana, en la Quincena de realizadores.

Así confiesa que Cannes siempre fue una ilusión:

“De adolescente iba al cine a ver justamente las películas que se habían presentado en el certamen. Siempre fue una ilusión. Yo siempre he sido muy trabajador. Me he aplicado mucho desde mis cortos y el año pasado filmé dos películas, Después de Lucía y A los ojos. Entonces, no es que persiga estar en Cannes, porque a la hora de filmar nunca pienso en eso.”

Historia que conquista

--¿Qué cree que llamó la atención de Después de Lucía?

--Tiene un lado interesante obviamente y no es porque los actores sean famosos. No hay nadie que esté empujando la película, va por sí sola conquistando a los espectadores. Eso es lo que uno puede aspirar como cineasta, no hay más. Estoy muy contento ahora.

Apunta que los largometrajes que filma los realiza pensando en que sean entretenidos, “accesibles, respetuosos con el público, que tengan sustancia”. En este caso, aclara, efectúa un estudio de la violencia:

“Se aborda también el hurto y la venganza. Trato de entender qué estamos viviendo como sociedad y por qué hemos llegado a aceptar la violencia como algo cotidiano, como parte de nuestra realidad, pero además es muy interesante la falta de comunicación entre los seres queridos, los más cercanos. Esa problemática la abordo desde mi primera película. Si no puedes comunicarte con tus seres más queridos, hay poca esperanza.”

En esta edición de Cannes (del 16 al 27 de mayo), México tuvo una importante presencia: Carlos Reygadas se llevó la Palma de Oro como Mejor Director por Post tenebras lux (se buscó a este realizador, quien de Francia viajó a Rusia, pero no hubo respuesta alguna), y No, protagonizada por Gael García Bernal, filmada por el chileno Pablo Larraín, fue la ganadora en la Quincena de realizadores.

Al respecto, Franco resalta que fue un año fuera de serie para el cine nacional:

“Reygadas es un maestro, lo tiene más que merecido. Su filme es muy bueno. La cinta donde actúa García Bernal es muy buena, es un gran actor.”

Un guión escrito en París

Franco, de 33 años, escribió Después de Lucía en París:

“Tuve una residencia del Festival de Cannes para escribir el guión. Estuve allí por casi seis meses escribiendo. Quise escribir el guión con tiempo y siempre el tema de la segunda cinta es importante porque es cuando uno se reafirma como director.

--¿Cómo fue escribir el guión ahí?

--Formidable, porque además aproveché el tiempo para establecer lazos más profundos con la industria francesa. Ahora preparamos una coproducción de un director importante. Yo voy a ser el productor mexicano. Eso salió de mi estadía allí. Fue benéfico por ese lado.

--¿Cómo se ganó esa beca? Años atrás también la obtuvieron Amat Escalante y Francisco Vargas.

--Después de que Daniel y Ana estuvo en Cannes, fui a una entrevista en Francia con el presidente del festival y me seleccionaron. Entonces aproveché lo más posible la oportunidad. Es muy selectiva, por lo cual es difícil obtenerla, nada más aceptan a seis personas de todo el mundo.

Redacción/SinEmbargo

Redacción/SinEmbargo

Lo dice el reportero