Trump amenaza a la UE: Exige invertir 600 mil mdd en EU o impondrá aranceles del 35%

05/08/2025 - 5:57 pm

Trump ha explicado que la UE consiguió rebajas en los aranceles a sus productos del 30 al 15 por ciento porque invertirían 600 mil millones de dólares en EU.

Ciudad de México, 5 de agosto (SinEmbargo).– El Presidente Donald Trump ha advertido este martes a la Unión Europea (UE) de que impondrá un arancel del 35 por ciento a las importaciones procedentes de los 27 países integrantes del grupo, en vez del 15 por ciento acordado a finales de julio, si los europeos incumplen el compromiso de invertir 600 mil millones de dólares en Estados Unidos (EU).

En una entrevista con la cadena especializada en economía CNBC, el mandatario estadounidense ha subrayado que en el caso de que la UE no cumpla la promesa de acometer las inversiones pactadas "entonces pagarán aranceles del 35 por ciento", en una nueva amenaza a unos días del acuerdo de un 15 por ciento de tarifas luego de una larga negociación entre EU y los países del euro.

Sobre esta cuestión, Trump ha explicado que la UE consiguió ver rebajados los aranceles a sus productos del 30 por ciento al 15 por ciento por ciento porque se comprometieron a invertir 600 mil millones de dólares. "Debido a eso, reduje sus aranceles (...), porque me dieron 600 mil millones de dólares", ha afirmado el Presidente.

Trump lanzó una nueva amenaza de aumento en los aranceles de la UE.
Trump lanzó una nueva amenaza a la UE. Foto: Hu Yousong, Xinhua

Trump ha calificado esta cifra como "un regalo", puesto que no se trata de ningún préstamo que haya que devolver al cabo de unos años. "Nos dieron 600 mil millones de dólares que podemos invertir en lo que queramos", ha asegurado, añadiendo que no existen más detalles al respecto.

"No hay detalles. Los detalles son 600 mil millones de dólares para invertir en lo que quiera. Lo que sea. Puedo hacer lo que quiera con ellos", ha sentenciado Trump, reiterando que la UE habría estado "estafando" durante años al país, por lo que "es hora de que paguen".

El pasado 27 de julio, la Presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el Presidente Trump alcanzaron un acuerdo para resolver la disputa comercial sobre el aumento de aranceles, con el establecimiento de gravámenes del 15 por ciento para los productos europeos, al tiempo que los Veintisiete se comprometieron a realizar inversiones adicionales, así como compras de energía y armamento.

El Presidente estadounidense concretó que el acuerdo incluye un arancel del 15 por ciento sobre los bienes de la UE que entran a Estados Unidos, además del compromiso de Bruselas de efectuar compras de energía a Estados Unidos por valor de 750 mil millones de dólares, inversiones por valor de 600 mil millones de dólares y la adquisición de una "enorme" cantidad de equipo militar norteamericano.

El garrote contra la UE

En la batalla comercial lanzada tras su llegada a la Casa Blanca, Trump activó aranceles del 50 por ciento sobre el acero y el aluminio europeo, de otro 25 por ciento sobre las importaciones europeas de vehículos y piezas, y aplicó otro 20 por ciento masivo sobre la mayoría de producciones restantes procedentes de la UE.

Con la tregua anunciada en su momento, el Presidente estadounidense mantuvo en realidad los gravámenes sobre acero, aluminio y coches, si bien redujo temporalmente del 20 al 10 por ciento los otros aranceles, a los que Estados Unidos se refiere como "recíprocos" aunque no lo sean.

Luego, la UE y Trump acordaron frenar la amenaza del 30 por ciento de aranceles generalizados sobre las producciones europeas a partir del 1 de agosto, si bien este acuerdo no evitará a los 27 un gravamen del 15 por ciento sin contramedidas.

Según explican las fuentes consultadas por expertos europeos, el 15 por ciento incluiría el 4.8 por ciento que, de media, rige el comercio entre ambas potencias en concepto de "nación más favorecida" y, por tanto, dejaría el impacto en niveles similares, ya que el 10 por ciento actual no tiene en cuenta ese recargo en vigor desde antes de la Administración Trump.

En todo caso, y aunque no ha realizado gestos en función de ello, Bruselas sigue trabajando en su arsenal de represalias, que vas más allá de las medidas arancelarias, incluida la posibilidad de activar el instrumento anticoerción, nunca utilizado hasta ahora, y que prevé sanciones contra países terceros que ejerzan una presión económica sobre la UE para influir en su toma de decisiones.

Esta opción, que defiende públicamente Francia, por ejemplo, para golpear a las grandes tecnológicas norteamericanas, conlleva un proceso largo hasta decidir las medidas concretas y su aplicación. En todo caso, existe ya una mayoría cualificada suficiente de gobiernos que aboga por ponerlo en marcha si fracasan las negociaciones.

–Con información de Europa Press.

Redacción/SinEmbargo

Redacción/SinEmbargo

Lo dice el reportero