El director del hospital más importante de Gaza aseguró que algunos presos palestinos tienen miembros amputados.
MADRID, 13 Oct. (EUROPA PRESS).- El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) denunció que los presos palestinos liberados este lunes por Israel en el marco del acuerdo de alto al fuego para la Franja de Gaza sufrieron "las más horrendas torturas psicológicas y físicas".
El grupo aseguró que los propios presos relataron estos maltratos e instó a las organizaciones internacionales humanitarias y de derechos humanos a investigar estas acciones israelíes y a perseguir a los criminales de guerra en los tribunales internacionales.
En cambio, subrayó que "la resistencia trató a los prisioneros enemigos conforme a sus valores islámicos y nacionales, evitando poner en peligro sus vidas, mientras el ejército de ocupación seguía torturando y humillando a los presos palestinos en sus cárceles".

"El regocijo de las familias de los presos liberados en Gaza y Cisjordania es una expresión de la fuerza y resistencia de nuestro pueblo, que no se puede quebrar por los crímenes del enemigo", declaró Hamás.
También el director general del Hospital de Al Shifa, el más importante de la Franja de Gaza, Mohamad abú Salmiya, afirmó que los presos llegaron "con signos de tortura" e incluso con "extremidades amputadas".
"Los prisioneros liberados están exhaustos, con signos de tortura. Algunos prisioneros fueron liberados con extremidades amputadas. La mayoría de los prisioneros resultaron heridos como consecuencia de la guerra y no recibieron atención médica en las cárceles de la ocupación", indicó, según recoge el portal de noticias Filastín, afín a Hamás.

Además, Abú Salmiya advirtió que la situación del sistema sanitario gazatí sigue siendo la misma. "Necesitamos convoyes ininterrumpidos de suministros médicos. Los pacientes de cáncer y de afecciones cardiacas no han recibido tratamiento desde hace meses", alertó.
Algunos de los presos liberados relataron que los maltratos se intensificaron en las horas previas a su liberación. Así, Mahmud abú Salá, detenido en julio por fuerzas israelíes cerca del Hospital Nasser, en Jan Yunis, dijo que "nos torturaron hasta el último momento y nos ataron desde las 03:00 horas de la madrugada y hasta el momento de nuestra liberación". Además, sostuvo que los carceleros israelíes amenazaron con matar a sus familiares.
En su comunicado, Hamás indicó que la liberación de los aproximadamente 10 mil presos que continúan en las cárceles israelíes "seguirá siendo una prioridad nacional de la resistencia".
En cuanto al acuerdo de alto al fuego, destacó que "es un logro histórico sellado con sangre y sacrificios". "Es un paso más en el camino de la liberación total de toda nuestra tierra y lugares sagrados, y una promesa de que seguiremos trabajando hasta que logremos la libertad total y la independencia completa", finalizó.




