En esta edición de RADICALES se habló sobre el Papa Francisco y el escritor Mario Vargas Llosa, dos personajes relevantes y a su vez contrastantes por sus diferencias ideológicas. El argentino, un hombre reformador, defensor de pobres y marginados, y el peruano, un reconocido letrado de la derecha. ¿Cómo serán recordados Francisco y Vargas Llosa? ¿Cuál es el legado que dejan al mundo? Estas y otras preguntas fueron abordadas en este programa.
Ciudad de México, 22 de abril (SinEmbargo).- El Papa Francisco y Mario Vargas Llosa serán recordados no sólo por el legado que deja, el primero, dentro de la Iglesia católica, la mas importante del mundo, y por la obra, del segundo, en la literatura latinoamericana, sino también por las ideas que defendieron, sostuvieron Alejandro Páez, Álvaro Delgado, Fabrizio Mejía Madrid y Héctor Alejandro Quintanar.
La madrugada de este lunes, tiempo de México, El Vaticano anunció el fallecimiento del Papa Francisco a los 88 años de edad. De esta manera se pone fin a un pontificado pionero que buscó, aunque con vacilaciones, transformar la Iglesia Católica Romana en una institución más inclusiva. La ausencia de Francisco, defensor de los pobres, crea un vacío en el liderazgo de más de mil millones de católicos y deja a los cardenales ante una decisión crucial: elegir un nuevo Papa que siga su enfoque acogedor y global o restaurar la línea más doctrinaria de sus predecesores.

En tanto, el reconocido escritor peruano Mario Vargas Llosa, ganador del Premio Nobel de Literatura en 2010, murió el pasado 13 de abril a los 89 años en Lima. Se trata de una de las figuras más influyentes de la literatura, con más de 20 novelas y libros de ensayos, ganador del Premio Nobel de Literatura, del premio Príncipe de Asturias, integrante de la Academia Francesa, entre otros reconocimientos.
Vargas Llosa tuvo siempre una polémica relación con México, desde considerar al régimen priista como la dictadura perfecta hasta sus críticas al Gobierno del expresidente Andrés Manuel López Obrador, pasando por su afinidad con el PAN.

Alejandro Páez recordó que Vargas Llosa pasó de ser un reconocido escritor a convertirse en un personaje que servía a las derechas. En tanto, del otro lado, dijo, Francisco fue un hombre que siempre abogó por los mas necesitados.
"Cómo termina un personaje en teoría progresista como Vargas Llosa convertido en un cortesano que va de embajada en embajada recogiendo canapés, cómo se convierte en eso, es una evolución muy interesante porque al mismo tiempo tienes la otra evolución de Bergoglio, cómo se convierte el Papa en este puntero".
El periodista mencionó que a pesar de su labor al frente de la Iglesia católica, el Papa Francisco fue testigo de cómo el mundo fue caminando poco a poco hacia la ultraderecha.
"El Papa enfrenta a Steve Bannon, enfrenta a Milei, enfrenta a esas derechas que son radicales, pero el mundo durante su pontificado camina a la ultraderecha. Estamos hablando de un hombre con mucho poder que ve cómo el mundo camina a la ultraderecha sin contaminarse".
Por su parte, Álvaro Delgado remarcó que Mario Vargas Llosa y Jorge Bergoglio son dos de los personajes mas importantes de la historia moderna de Latinoamérica, pero a su vez son contrastantes.
"Mario Vargas Llosa y Jorge Bergoglio son dos personajes contrastantes latinoamericanos. Uno orgulloso de su latinoamericanismo, Francisco, y otro que lo repudia tanto que acepta convertirse en español".
Delgado señaló que Vargas Llosa fue un ferreo defensor del modelo neoliberal, el mismo, dijo, que el Papa Francisco condenó y combatió durante el tiempo que duró su pontificado.
"Estamos hoy en la decadencia del modelo neoliberal que tanto defendió hasta su muerte Mario Vargas Llosa y en la decadencia del neoliberalismo con todos sus males que el Papa Francisco condenó y buscó una ruta distinta, en particular, para atender todos los efectos perniciosos del modelo neoliberal que tanto defendió Vargas Llosa y que siguen defendiendo muchos como él".
En tanto, explicó que en sus inicios Mario Vargas Llosa fue un personaje que apoyaba a revolución cubana, pero con el paso de los años decidió cambiar a la derecha.
"Vargas Llosa me parece que es la caricatura de algunos intelectuales latinoamericanos. Siempre fue un fanático, primero de la revolución cubana, él es el mas radical defensor de la revolución cubana de Fidel Castro y después fue el mas grande defensor del neoliberalismo al grado de decir que estaba justificada la dictadura de Pinochet por los éxitos económicos. Se convirtió en alguien en quien se concentró la derecha".
El escritor explicó que al final, la derecha logró conquistar al escritor quien se dejó seducir con la parafernalia de los premios y reconocimientos.
"Él pasó de la izquierda a la derecha con enorme facilidad […] Vargas Llosa sí se dejó tentar por toda la parafernalia de los premios, de la élite que tiene de bufones a los artistas y en ese sentido calló redondito".
Finalmente, Héctor Alejandro Quintanar coincidió en que se trata de dos figuras que biológicamente chocan y ese choque tiene una vigencia fundamental en las disputas políticas de América Latina.
"La pregunta que hay que hacer es otra, y tiene que ver con su legado político, terreno donde ejerció un rol clave toda su vida, maximizado en los últimos cuarenta años, lapso en que incluso fue candidato presidencial en Perú. Y ahí, su actuar no fue “polémico”, como se ha querido suavizar, sino, en muchos aspectos, abiertamente reprobable".





